El miércoles 17 de abril fue una jornada en la que el kirchnerismo exhibió con lujo de detalles la guerra abierta que atraviesa hacia su interior. La disputa por la conducción – y la birome hacia el 2025- se acelera con un país hundido en el fondo del mar ante el plan de ajuste diseñado por el presidente, Javier Milei. Los ataques en la línea de flotación de Cristina Fernández y Axel Kicillof son acompañados con un cristinómetro que contienen venenosos pases de factura. El pasado que se refresca y el futuro que se nubla.
Luego de la embestía de Andrés Larroque hacia La Cámpora durante el fin de semana, los flases se posaron en el desembarco de Kicillof en Quilmes y Hurlingham. En los distritos comandados por el camporismo con Mayra Mendoza y Daniel Selci, respectivamente, le hicieron sentir el rigor al Gobernador y se encargaron de mostrar su descontento ante los cuestionamientos recibidos.
Además de los gestos de malestar, que se difundieron también a través de fotografías oficiales del distrito de Quilmes, en Hurlingham se colgaron pasacalles con un sugestivo mensaje: “Nada sin Cristina”. Las declaraciones del “Cuervo” hicieron mella en el camporismo y salieron a dejar en claro su postura en una discusión sensible.
Los mensajes por WhatsApp y llamadas estuvieron a la orden del día por parte de la militancia y dirigencia kirchnerista mientras Kicillof visitaba los municipios. La frialdad de Mayra y la reticencia de Selci a aplaudir las palabras del mandatario provincial, fueron -entre otros elementos- trending topic en el universo K.
“Recularon en chancletas”, señalaron a La Tecla desde uno de los campamentos en batalla al referirse no solo a la ausencia de Larroque en Quilmes, sino también a las declaraciones que realizó el ministro en El Destape al periodista Roberto Navarro casi en el mismo momento que la recorrida en el Conurbano. “Fue al programa de Kicillof”, resaltaron para dejar en claro que la interna también se expresa en determinado sector de los medios de comunicación.
“Para mí Cristina está por encima de todo, por eso me duele mucho cuando veo que la quieren llevar a ella a una interna, me parece que no hay que manosear a Cristina”, había dicho el armador de La Patria es el Otro (LPO) para hacer énfasis en el entorno de la expresidenta. Luego, dijo: “¿Cómo voy a estar en contra de La Cámpora si yo soy fundador? Mi vida, entregué mi vida a La Cámpora”.
Las mismas voces se encargaron de cuestionar a quiénes rodean a Kicillof y hasta lo desligaron -casi por completo- del operativo anti camporista. Incluso, especularon con una posible intervención de Cristina en las horas previas para aclarar los tantos y ordenar a una tropa que se rebela. Las especulaciones en un río revuelto siempre alimentan de las más variadas lecturas y este caso no es la excepción. Otras versiones señalan que Cristina llamó a Mario Secco luego de las declaraciones que hizo el intendente el lunes y que el alcalde le habría ratificado lo que planteó en los medios.
Mientras el diputado provincial, Facundo Tignanelli (de los más cercanos a Máximo Kirchner), se encargaba de reiterar que Cristina es la "conductora de la mayor cantidad del pueblo argentino" en plena sesión en la Cámara baja, las broncas crecían en el otro sector. El campamento que busca componer las nuevas melodías para los tiempos actuales sacó a relucir la defensa que realizaron a CFK ante la avanzada judicial en para que “no nos corran con que la queremos jubilar”. “Nosotros la defendimos y la defendemos en la calle y cuando había que hacerlo”, sentenciaron.
El baúl de los recuerdos fue desempolvado y pusieron sobre la mesa de las más variadas facturas a cobrar. Según contaron a este medio, en una reunión realizada en Ensenada el 2023 (cuando la Mesa de Ensenada tenía a La Cámpora y sus aliados) un intendente le acercó a Máximo dos fotografías para exponer una situación que le llamaba a la atención y ambas eran de la misma semana del mes de abril de ese año. Una era la conferencia de prensa en la que se anuncia la marcha a tribunales “Democracia o Mafia Judicial” en defensa de Cristina y la otra se trataba de una reunión de alcaldes del Conurbano con el presidente de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia. El jefe comunal marcó que en la primera había menos mandamases que en la segunda.
Para echar más leña al fuego, recordaron que el 13 de abril del año pasado la movilización fue encabezaba por Kicillof en CABA junto a otros dirigentes y ese mismo día el Presidente del PJ bonaerense realizó un encuentro en Monte Hermoso. En la oportunidad, reunió al justicialismo de la Sexta Sección Electoral mientras a cientos de kilómetros se llevaba a cabo un acto en apoyo a la expresidenta.
En la tarde noche de ayer siguió el día camporista de Kicillof y lo cerró públicamente en el Teatro Argentino de La Plata. Junto al ministro de Salud, Nicolás Kreplak, presentó el documental “Pandemia: gestionar lo desconocido”, una producción realizada por la Fundación Soberanía Sanitaria.
Cuando todo parecía menguar, a la medianoche, Mayra Mendoza realizó una publicación en su Instagram en la que avisó que la pelea seguirá. Se mostró junto a Cristina y a la senadora nacional, Anabel Fernández Sagasti. La foto con CFK ya es una señal en si misma en medio de la guerra interna, pero lo que resaltó fue la canción que eligió para acompañar la historia. María Becerra la artista y parte de la estrofa resaltada fue: “Con los míos siempre fui leal. Los careta' la verdad me dan igual”.
La disputa interna continuará y tuvo uno de sus capítulos más sanguinarios con días intensos. Las hostilidades entre campamentos no cesaron y dejaron heridas que parecen difícil de sanar en el corto plazo. La crisis que atraviesa el kirchnerismo arrastra al peronismo a una nebulosa mientras Milei avanza con su plan de Gobierno a costa de un tendal de nuevos pobres.
Por lo pronto, con la pingüinera en estado de ebullición, Cristina sigue hiperactiva en el Instituto Patria mientras observa los movimientos que se dan. En tanto, Axel Kicillof se desliga de la rosca para recostarse -fiel a su estilo- en los actos de gestión. La pelea por el bastón de mariscal continuará. |
