Política Provincial
31 de diciembre de 1969
Informe
Primeras grietas en la muralla K
La fortaleza parlamentaria construida por el matrimonio Kirchner comienza a mostrar fisuras. La crisis con el campo desató en el oficialismo miedos y rebeldías frente a
intereses cruzados. También, alerta por las legislativas de 2009
Cristina Fernández y Néstor Kirchner no imaginaron las consecuencias políticas que las últimas decisiones económicas iban a generar dentro y fuera del Frente para la Victoria.
No se trata sólo de la compleja crisis desatada con sectores del campo, con cacerolazos “desestabilizadores” incluidos, sino de la intolerable posición en la que quedó prendada una gran parte de gobernadores y legisladores oficialistas.
Como si corrieran a la par, mientras se extendían los días de paro agrario y cortes de rutas, se iba reduciendo, progresivamente, la fortaleza hegemónica del Kirchnerismo en el ámbito parlamentario.
No es una fatalidad, no cayó la estructura K, incluso demostró conservar el poder de mando. Pero todos coinciden en marcar un antes y un después del Gobierno y, sobre todo, se mira con cuidado la proyección legislativa que este llamado de alerta puede generar en las próximas elecciones de 2009.
Primeras críticas
Tímidos, como una verdad que cuesta asumir, muchos diputados nacionales del FpV se animaron a cuestionar algunos pasos del Ejecutivo. “El Gobierno tiene que comunicar mejor, pero, además, tiene que organizar mejor, resolver el problema de los pequeños productores”, afirmó a
La Tecla el diputado Edgardo Depetris, uno de los defensores K de la plaza del 25.
Coincidió su par del Conurbano, Mariano West, aunque dando nombres directos. “Hubo algunos errores por parte de la Secretaría de Agricultura -aseguró-, los cambios debieron darse a conocer antes, para que pudieran darse cuenta de las transformaciones”.
Cuentan los representantes de la comisión de Asuntos Agrarios que se enteraron de los anuncios por televisión, mientras se encontraban reunidos despachando expedientes. “No fuimos consultados”, remarcó Luis Ilarregui, hombre de Ayacucho e integrante de la mencionada comisión. El legislador del interior es uno de los que deben sortear las demandas de los productores locales, opuestas a la directiva del Ejecutivo.
El apoyo exacerbado de comerciantes y ciudadanos urbanos a la causa del campo, sumado al empecinamiento de los chacareros y el avance de personajes de la oposición, como el gobernador de Santa Fe, Hermes Binner, generó una obsecuencia pública en la mayoría de los oficialistas, más parecida a una actitud de supervivencia que de convicción. De hecho, por lo bajo, la mayoría mostraba su malestar por la posición que los obligaban a adoptar. Hubo, claro, personajes que se movieron de forma independiente, como el caso del santafesino Carlos Reutemann, o los UCR K, que no participaron del encuentro en Parque Norte.
“Hay que mirar el panorama con cuidado, no hay que apresurarse pero, claro, las cosas no van a ser iguales”, aseguran viejos conocedores de la dináminca política del Congreso. El próximo año, el bloque de 35 diputados nacionales por Buenos Aires deberá renovar 20 bancas; Santa Fe, 4 de las actuales 9 y Córdoba, 6 de 4.
Las tres son las provincias más comprometidas en el conflicto con el campo.