El software del sistema para el escrutinio provisorio realizado por la controvertida firma Smartmatic fue auditado por la firma Deloitte Argentina. Así lo reconoció Adrián Pérez, secretario de Asuntos Políticos e Institucionales, el sábado durante el simulacro que se llevó adelante con presencia de fiscales y la prensa.
Sin embargo, Pérez reconoció en esa misma jornada que el software aún no estaba terminado y por eso aún no lo habían entregado a la Justicia. La gran pregunta se disparó en redes. “Vaya a saber qué versión auditaron”, se preguntó en redes el perito informático Javier Smaldone, crítico de la forma en que el Gobierno llevó adelante la implementación.
La realización de una auditoría que no se conoce y que no es pública, pese a la consulta realizada por distintos medios el último sábado, incrementa los interrogantes en torno al sistema de una firma, que tiene cuestionamientos en distintos puntos del planeta.
A eso se suma que aún los partidos políticos no recibieron los códigos fuente del software, algo que genera bronca. De acuerdo a la acordada 3/2017 de la Cámara Nacional Electoral, se fija que tiene que estar a disposición de los partidos políticos “al menos 30 días antes de la elección”, un plazo que ya expiró.
Jorge Landau, apoderado del Partido Justicialista/Frente de Todos, confirmó a La Tecla.info que se hará una nueva presentación ante la Justicia para que se tomen “medidas de resguardo” ante el lanzamiento de un sistema del que desconfían.
Otras de las dudas que les surge a los fiscales partidarios es que el mismo archivo que se envía no es recibido de la misma forma. Se envía en un formato tiff pero es recibido en formato pdf o png. Pese a todo, el gobierno defiende el sistema.
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La gran apuesta de la gestión macrista es que se tengan los resultados mucho más temprano y evitar que la carga de los datos refleje alteraciones en el porcentaje de votos que obtuvo cada candidato en las primeras horas. En rigor, el Gobierno quiere evitar lo que ocurrió en las PASO de 2017 en la provincia de Buenos Aires, cuando el escrutinio provisorio colocó a Esteban Bullrich como el candidato más votado, mientras que el conteo oficial determinó que lo fue CFK.
“Con este sistema que implementamos ganamos en transparencia, agilidad y homogeneidad en la carga de los resultados. Ahora los fiscales de los partidos podrán fiscalizar la transmisión de cada telegrama en cada una de las escuelas”, explicó el secretario de Asuntos Políticos e Institucionales, Adrián Pérez.
El sábado el simulacro comenzó a las 9 de la mañana y a las 14 horas se habían transmitido con éxito 94.706 telegramas: 69.221 telegramas desde 9.131 establecimientos de votación y el resto desde 1.106 sucursales digitales de Correo Argentino.
"La idea no es mala pero debe hacer bien y con apertura" había consignado Beatriz Busaniche, presidenta de la fundación Vía Libre, a La Tecla. La especialista remarcó que transmitir los telegramas desde las escuelas no es una mala idea, y destacó la experiencia de Santa Fe, donde el área electoral de la provincia, junto a la Universidad de Rosario y a la Universidad del Litoral, desarrolló un sistema propio exitoso.
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