Francisco García Moritán es el padrino de la pequeña Anita, el hermano del marido de Pampita y también, al igual que Roberto, es empresario gastronómico. El joven tiene 41 años, está casado y aún no tiene hijos.
El hermano del legislador protagonizó un escándalo en la madrugada de este miércoles en el barrio de La Recoleta, y fue detenido. Profirió insultos racistas y amenazó con "hacer echar" a los agentes de tránsito. Terminó trasladado a una comisaría de la Ciudad.
Francisco García Moritán (41) es uno de los hermanos de Roberto (los otros dos son Patricio y Lucía) y también es cuñado de Pampita y, además, fue elegido por los felices padres de Anita como uno de los padrinos de la nena.
El joven es empresario gastronómico como su hermano y está casado desde 2019 con Agustina Sanguinetti. Fue a fines de ese año, 2019, cuando trascendió que él y Roberto estaban enemistados, rumor que fue desmentido por los protagonistas.
En las últimas horas, el empresario dio positivo en un control de alcoholemia cuando se trasladaba en un vehículo a la altura de Avenida del Libertador y Pueyrredón, y cuando la Policía le pidió los documentos, constató que circulaba con una licencia falsa.
El hermano del legislador de Juntos por el Cambio, ante esta situación, llamó "negros de mierda" a los efectivos que controlaban el tráfico, y amenazó con hacerlos "echar", haciendo uso de sus supuestos vínculos.
Sumado a eso, García Moritán menor fue sometido por inspectores de tránsito del gobierno porteño a un control de alcoholemia, que dio casi el doble de lo permitido: 0,89 gramos por litro en sangre, cuando el límite en CABA es de 0,5 gr/l.
Cuando los inspectores le informaron que iban a proceder a secuestrar el auto y la licencia, empezó a insultar a una mujer que participaba del operativo, al decirle “vos sos una mocosa con un trabajo raro, andate a la concha de tu madre, te vas a quedar sin laburo”.
Los efectivos de la Comisaría vecinal 2 A que se trasladaron hasta el lugar también fueron recibidos con una lluvia de insultos. “Son unos negros de mierda, se van a quedar sin laburo”, fue uno de los improperios que recibieron de García Moritán, ebrio.