La Tecla
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“Estoy no en desacuerdo”, fue la frase que un referente del PRO bonaerense eligió para definir su posicionamiento respecto del postergado encuentro entre la UCR y el PRO de la provincia de Buenos Aires en La Plata.
Con reminiscencias de aquel voto “no positivo” del entonces vicepresidente Julio Cobos, que volteó la aplicación de la ley 125 de retenciones para el campo en tiempos de Cristina Fernández, la expresión marca las dudas que buena parte de los amarillos tienen acerca de la jornada que ambos espacios planean para abordar cuestiones de la agenda provincial como la Seguridad y la Salud.
La tragedia meteorológica que golpeó a Bahía Blanca y varios distritos del sur obligaron a “patear” la reunión entre legisladores, intendentes y referentes de dichos partidos, planteada como un espacio de debate pero que exuda, claramente, un orejeo de la temperatura electoral en año de comicios. Aunque algunos consideran que tampoco el 18 se realizará, no son pocos los amarillos que auguran una cancelación definitiva de la cita.
Los radicales mantienen la ilusión de reencontrarse con sus antiguos socios, con quienes comparten interbloque en la Cámara de Diputados (de hecho, ya que la figura no existe en la Legislatura provincial), aunque la juntada sólo es impulsada por el oficialismo partidario, comandado por el aún presidente del Comité provincial, el senador Maximiliano Abad. Diego Garciarena, también marplatense, comanda el bloque UCR-Cambio Federal, mientras que el ritondista Matías Ranzini preside el espacio amarillo.
Unos y otros saben que el tablero está complicado. “Si el PRO no cierra con los libertarios no tendrá otra opción que volver a buscar a los radicales, mientras que la UCR necesita al PRO porque, si no se suma a la ola libertaria, quedará sola y con una expectativa de voto muy pobre y con el riesgo de perder legisladores y municipios”, evaluó un analista días atrás.
Son varios los referentes amarillos que consideran “un error” acudir a dicha convocatoria, bajo el argumento de que aún no está cerrada la puerta para un encuentro con Las Fuerzas del Cielo, impulsado por sectores que rehúyen del liderazgo del expresidente Mauricio Macri.
Diego Garciarena (UCR) y Matías Ranzini (PRO), presiden sus bloques en Diputados.
Desde algunas de las trincheras PRO reconocen que hay diferencias en cuanto a la velocidad con que los dirigentes se posicionan ante la rosca con los libertarios. “Algunos creemos que hay que esperar un poco, no apresurarse, sobre todo porque hay definiciones pendientes de trascendencia en distritos claves como la Ciudad de Buenos Aires”, apuntó un referente ritondista bonaerense.
Conmigo no cuenten
Otros, en cambio, piden a gritos avanzar, como sea y a cualquier precio, hacia un frente de derecha junto a las tropas mileistas, lo que podría forzar a sectores del radicalismo a sumarse.
Este posicionamiento se traduce en que los más feroces partidarios del libertarianismo amarillos ya hayan avisado que no viajarán a La Plata para abrazar a los boina blanca. Uno de ellos es Diego Santilli, impulsor de la máxima celeridad, arrastrando a legisladores e intendentes que le son leales.
Así, de realizarse el encuentro, también pegarían el faltazo varios diputados provinciales como Agustín Forchieri, vicepresidente del bloque, Martiniano Molina, Martín Endere, Fernanda Antonijevic y Gustavo Coria. Una incógnita es dónde se parará Fabián Perechodnik, que juega libre y no reconoce referentes.
Otro ausente será el alcalde marplatense Guillermo Montenegro, cercano a Patricia Bullrich y con vastas coincidencias ideológicas y políticas con las ideas de Javier Milei, entre ellas las referidas a la mano de hierro en cuanto a la Seguridad. Su negativa a participar del cónclave arrastra a su principal alfil en la Legislatura, el senador provincial Alejandro Rabinovich, ex jefe de Gabinete del mandamás de La Feliz años atrás.
El "Colo" Santilli y Montenegro, dos que avisaron que no cuenten con ellos.
Entre los intendentes, dos son los que mantienen un alineamiento con el “Colo” Santilli: Sebastián Abella, de Campana, y Lisandro Matzkin, de Coronel Pringles. Al menos los consideran como propios en el cuartel general santillista.
También habría rechazado la invitación el jefe comunal de San Isidro, Ramón Lanús, de estrechos vínculos con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
En cuanto a Cristian Ritondo, el actual presidente del PRO provincial se mueve con ambivalencia respecto de posibles acuerdos electorales. Si bien su presencia fue confirmada a La Tecla.info por su equipo de colaboradores, sorprendió al insistir, horas después, con la necesidad de avanzar firmemente en un acuerdo con La Libertad Avanza.
“Cristian debería tener más en cuenta que es el presidente del partido, de todos los que permanecemos en el PRO, y dejar un poco de lado sus preferencias políticas o personales”, lanzó un dirigente cercano a Jorge Macri con ascendencia en el interior de la Provincia.
Convocantes
El jefe de Gobierno porteño es, junto con Abad y el presidente electo del Comité Provincia, Miguel Fernández, uno de los principales impulsores de la posibilidad de re enamoramiento con la UCR, teniendo varias terminales como la alcaldesa de Vicente López, Soledad Martínez, vicepresidenta del PRO nacional, o su par de Junín, Pablo Petrecca.
En la mesa también guardan lugares para el angelicismo, alidado del jorgemacrismo en CABA, lo que asegura una silla para el diputado Fernando Rovello y el senador Christian Gribaudo, actual jefe de bloque amarillo en la Cámara alta.
Aunque no participa activamente de la convocatoria, el excandidato a Gobernador, Néstor Grindetti, tampoco ve con malos ojos un nuevo abrazo con sus viejos camaradas de recorridas, por lo que no sería extraño que dé el presente en el aún dudoso reencuent4ro.