18 de septiembre de 2024
FUTURO RADICAL
“Queremos un radicalismo socialdemócrata”
El diputado provincial encabeza la lista en la que confluyen Evolución y el espacio de Facundo Manes y busca desbancar al abadismo de la conducción del partido en la provincia de Buenos Aires.
-¿Por qué se llegó a esta instancia de ir a una interna y no encontraron un punto de acuerdo?
-Por dos razones principales. La primera tiene que ver con poder discutir cuál es el rumbo político que la Unión Cívica Radical de la provincia de Buenos Aires va a tener en los desafíos de ahora y de cara al futuro. Eso en el marco de las posturas legislativas, del posicionamiento político respecto al Gobierno Nacional y al Gobierno Provincial y, sobre todo, en la proyección de la construcción política de cara al 2025 y al 2027. Y la segunda es porque, también, está en discusión modificar un esquema de toma de decisiones en el partido en el que todos los actores del radicalismo de la Provincia participen, se puedan expresar y puedan dirimir las distintas miradas y tomar decisiones de consenso, si es posible, o si no de mayoría, pero con todo el mundo participando.
-¿Eso no está hoy en la Unión Cívica Radical, no hay una apertura? ¿Qué ven que falta?
-Bueno, el rumbo político claro, desde la mirada que nosotros tenemos de un radicalismo que tiene que ser oposición a un Gobierno nacional que desfinancia la ciencia y la tecnología, que desfinancia las universidades, que veta la posibilidad de que nuestros jubilados se acerquen un poco a una jubilación digna después de haber trabajado y esforzado toda su vida; y un radicalismo también que sea oposición a lo que significó el kirchnerismo en la Argentina. La verdad es que no vemos con claridad hoy esa expresión de parte del oficialismo partidario, con lo cual lo que queremos garantizar es un radicalismo socialdemócrata, con una mirada de un Estado eficiente pero que tenga conciencia social, que crea en la educación y en el conocimiento como motor de desarrollo de la Provincia y del país. Y respecto a la segunda razón que te decía, creemos que en este último tiempo ha faltado debate interno, ha faltado convocatoria a plenarios del Comité Provincia. De hecho, el candidato a la lista (del oficialismo) ha sido candidato a vicegobernador de la fórmula Patricia Bullrich y Luis Petri, dos dirigentes que hoy son parte del gobierno nacional con responsabilidades importantes, y yo no he escuchado cuál es el análisis de qué es lo que eso significa y cuál es la postura respecto a lo que estos dirigentes han hecho.
-Desde los dos sectores en pugna se coincide en que es un momento complicado para una interna. ¿Cómo ves el contexto en el que se va a dar la elección? ¿Crees que el afiliado está entusiasmado con ir a votar?
-Es cierto que es un momento complejo, donde la gente está con otras preocupaciones, y estamos viviendo tiempos difíciles de recesión, de una crisis económica que se va profundizando y hay temor al desempleo. Pero lo cierto es que esta interna no involucra a toda la sociedad, sino a aquellos afiliados que quieran expresarse sobre cuál tiene que ser el rumbo del partido radical, quiénes tienen que ser los que conduzcan, y harán gala de una de nuestras mejores tradiciones, que es nuestra tradición democrática, e irán el domingo 6 de octubre a votar y a definir justamente las autoridades locales y provinciales. Es un momento complejo, pero el ejercicio democrático interno de elegir autoridades tampoco me parece que sea nada grave, sino al contrario. Puede terminar hasta siendo algo virtuoso si, obviamente, lo encaramos con la responsabilidad necesaria y con los planteos claros de por qué se está dando la discusión.
-¿Cuál será la impronta que le dará Pablo Domenichini a la UCR bonaerense si es presidente?
-Un partido dinámico, que recorra la Provincia, que hable con todos los actores que hacen a la Unión Cívica Radical, intendentes, legisladores; que busque unificar a todos los diputados radicales que hoy conforman dos bloques distintos. Y, sobre todo, un radicalismo que dé garantías de no acercarse a ninguna expresión que no respeta los valores históricos del partido y que no representan, a nuestro entender, el sentido radical, como es La Libertad Avanza o sectores del PRO que hoy trabajan de forma coordinada con el Gobierno nacional. Y un partido que va a poner toda la energía en construir una alternativa superadora para los bonaerenses y para el país.
-Una vez finalizado el proceso del 6 de octubre, y estén consagradas las nuevas autoridades, ¿los bloques tienen que unificarse sí o sí?
-Desde nuestra mirada sí. Los bloques deberían unificarse.
-La unificación y de la conducción de la bancada también formó parte de la discusión que hubo en el proceso de negociación previo al cierre de listas. ¿Qué plantean ustedes?
-Nuestra mirada es unificación de todos los diputados radicales, con respeto a las mayorías en el marco de la elección de autoridades y, obviamente, el pedido de expresión de coherencia en las votaciones, en esta premisa política que ya he repetido de sostener una mirada socialdemócrata del partido, y que busque darle respuesta a los bonaerenses de los problemas que se viven y del momento difícil por el que están atravesando los ciudadanos. En ese marco, además, creo que todos los diputados radicales vienen haciendo un buen trabajo, por lo tanto sería hasta lógica la unificación de los bloques.
“No tenemos nada que ver ni con La Libertad Avanza ni con el kirchnerismo”
-Una demanda con la que ustedes insistieron era una declaración pública de pararse en contra del gobierno de Milei, y desde el otro lado dicen que ustedes se muestran cercanos al kirchnerismo.
-No, nosotros lo decimos con claridad, hay que construir una alternativa superadora al kirchnerismo y superadora a lo que está haciendo el gobierno de La Libertad Avanza. El radicalismo tiene que mantener sus posturas. Quienes tenemos responsabilidad legislativa y quienes tienen responsabilidad ejecutiva debemos llevar adelante las posiciones que creemos que están bien, sin importar de quién fue la iniciativa o quién nos acompaña. Hay que sostener una identidad en el tiempo, y desde ese lugar estamos seguros que en la mirada, en los valores del radicalismo, no tenemos nada que ver ni con La Libertad Avanza ni con el kirchnerismo.
-En la Argentina actual las alianzas son casi fundamentales. ¿Qué panorama ves de cara al futuro respecto de las alianzas que pueda tener el radicalismo?
-El radicalismo tiene que confluir con todos aquellos que tengan sintonía con su identidad política, con todos aquellos sectores que crean en el diálogo, crean en la apuesta al desarrollo, crean en la educación pública; y además lo tiene que hacer con vocación protagónica. El radicalismo tiene que acompañar a sus mejores hombres y mujeres, a los dirigentes que tienen capital político de cara a la sociedad, para que puedan liderar y conducir esos procesos de alianzas. También es una cuestión a abordar, a corregir, la de un partido que a veces está más preocupado en ver cuáles son los acuerdos y cómo acompaña a dirigentes de otros partidos en esos acuerdos, que en defender a los propios dirigentes. Y ahí surgen nombres obvios en la política de la provincia de Buenos Aires: el mismo Facundo Manes o varios otros; puedo nombrar algunos intendentes, a los cuales la Unión Cívica Radical de la provincia tiene que acompañar y fortalecer para que puedan protagonizar.
-¿Faltó generosidad o sobró egoísmo para no llegar a un acuerdo?
-No, ninguna de las dos cuestiones. No creo que haya faltado ni generosidad, ni haya sobrado egoísmo, ni haya faltado diálogo. Lo que creo es que hay una decisión el 6 de octubre que tiene que ver con dos miradas de hacia dónde el radicalismo tiene que enfocarse para construir una alternativa para los bonaerenses, y quizás una buena manera de encontrar un consenso en esto del rumbo político sea yendo a las urnas. Así que me parece que esta interna tiene una razón de ser y tiene que ver con dirimir esto que estuvimos hablando.