10 de abril de 2025
PANORAMA
El espejo de la interna en la visita de Kicillof
El gobernador arribó a La Feliz luego del anuncio de desdoblamiento y las acusaciones de ruptura. El ravertismo ausente y los kicillofistas de la Quinta, expectantes. Más allá de la pirotecnia, ¿terminará con el "todos unidos triunfaremos"?
Son días convulsos dentro del peronismo bonaerense. Lo que hace tiempo quedaba en amagues se hizo realidad: Kicillof confirmó el desdoblamiento y estallaron las tensiones con el cristinismo. Las acusaciones fueron desde la ruptura a la traición aunque varios protagonistas de la compulsa aseguraron que debía primar la unidad.
Tras dos días de tensión había fuerte expectativa por la presencia del mandamás bonaerense en el congreso de la UOM, sindicato conducido por Abel Furlán, un histórico alfil de CFK en el mundo gremial. Finalmente Axel puso rumbo a Mar del Plata y cerró el mitin con un discurso que tuvo a Javier Milei como principal apuntado.
El evento funcionó como un espejo de la interna. A la cita faltó buena parte del ravertismo, que en la ciudad encarnarían la vereda opuesta al kicillofismo. Las ausencias más notorias fueron la de los concejales de Unión por la Patria. Si bien uno de los argumentos se centró en la coincidencia con horarios de comisión, varios actores del pasillo recordaron que, en otras épocas, la venida de dirigentes de fuste motorizaba cambios de horarios y suspensiones. A su vez, algunos de los ediles compartieron mensajes en apoyo a CFK.
Por su parte, los lugartenientes del gobernador en la ciudad se mostraron al pie del cañón. Todos quieren hacer bien los deberes de cara a septiembre.
El Consorcio Portuario Regional funcionó como foto de la ausencia-presencia. En el Hotel 13 de Julio estuvo Gabriel Felizia, ex-presidente de la entidad que fue eyectado del esquema de la ex-ANSES y hoy se encuentra cercano a Gustavo Pulti. Por su parte, Marcos Gutierrez, mandamás de los muelles que responde al matrimonio Raverta-Obeid, no fue de la partida.
No obstante, ante una elección que parece ir camino hacia dos polos bien marcados, muchos ven en la fragmentación, un camino directo hacia la derrota. Aun bajo la tormenta de la interna, algunos comienzan a replicar las estrofas que popularizó Hugo del Carril: "todos unidos triunfaremos".