El kirchnerismo le copó el Congreso a Proyecto Sur y el Frente Patriótico sigue sumando voluntades
Tal como se preveía, los K fueron los principales protagonistas del acto-Congreso de Proyecto Sur. El principal referente del partido, Pino Solanas, convocó a la oposición a "un frente opositor", en tanto que Máximo Kirchner llamó a "cerrar el Ministerio de la Venganza"
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El senador nacional y jefe de Proyecto Sur, Fernando “Pino” Solanas, convocó ayer a "conformar un gran frente amplio opositor sin exclusiones", en tanto que el hijo de la ex presidenta y diputado nacional, Máximo Kirchner, se3ñaló entre otras cosas que "el 10 de diciembre se tiene que cerrar el Ministerio de la Venganza que abrió Mauricio Macri y volver a abrir el Ministerio de Trabajo y de Salud".
Pero no fueron los únicos dirigentes K que coparon el evento. También estuvieron los legisladores y precandidatos a presidente Felipe Solá (RedxArgentina) y Agustín Rossi (Unidad Ciudadana), ambos lanzados para la presidencia. Además dijeron presente el ex massista Daniel Arroyo, el dirigente de Patria Grande Juan Grabois y el gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá.
El evento tuvo lugar en el Aula Magna de la Facultad de Medicina de la UBA, donde Solanas reafirmó que no tiene "ningún inconveniente en formar parte del mismo frente electoral que el kirchnerismo" y se mostró confiado en que "es posible un acuerdo opositor para armar un gran frente patriótico para poner un freno al neoliberalismo".
A su vez dijo sentirse "preocupado" porque "para nosotros el frente de unidad debía estar sellado desde fin del año pasado. "El tiempo pasa y no se recupera. Esperemos poder llegar a un gran acuerdo primero en la conformación del frente y luego resolver el tema de las candidaturas", afirmó Pino.
En ese sentido, destacó que este denominado “frente patriótico”, que a dos meses del cierre de listas todavía no está conformado, "debe resolver sus diferencias y sus candidatos en las PASO".
Al referirse a Alternativa Federal, aunque sin mencionarlo de manera directa, consideró: "es un error de la oposición creer que divididos se puede derrotar a Cambiemos, porque siempre las divisiones favorecieron al poder dominante de turno. Las terceras fuerzas siempre fueron favorables al poder oficialista".
A su turno, Máximo Kirchner, hizo lo propio, apuntó a la unidad y pidió que "la unión no se agote en lo electoral ni elimine las identidades y sirva para hacer una síntesis superadora de un gobierno consistente y plural a favor del pueblo"; para luego plantear que "no sé quién va a ser candidato o candidata, pero los convoco a no seguir a un apellido sino a una idea de país".
"El 10 de diciembre, el primer día de gobierno, se tiene que cerrar el Ministerio de la Venganza que abrió Mauricio Macri y volver a abrir el Ministerio de Trabajo y de Salud", concluyó.