26 de septiembre de 2019
ACTUAL CONTROVERSIA
Dieta cetogénica: ¿ángel o demonio?
Más conocido como dieta Keto, este plan alimentario está en auge en Estados Unidos y Europa. Pero mientras nutricionistas y deportistas proclaman los beneficios de su práctica, otros expertos alertan sobre sus riesgos. ¿Cuál es la verdad sobre esta tendencia?
La dieta cetogénica, más conocida como dieta Keto, está en auge en Estados Unidos y Europa. Elegida y recomendada por muchos fitfluencers, también la llevan a cabo figuras como la reina Máxima, Kim Kardashian y Jennifer Aniston.
La misma propone “volver a comer como nuestros ancestros: comida real, sin procesados”, explica la cocinera Daniela Viner. Es que esta dieta de bajo contenido en carbohidratos y muy alto en grasas (low carb/high fat) induce un cambio en la fuente principal de energía y en el estado metabólico.
Por su parte, el licenciado en Nutrición Matías Marchetti explica que el objetivo es crear una situación de cetosis parecida a la del ayuno. Para eso, un menú cetogénico debe contener entre 5-10% de carbohidratos, 60% de grasas y 30-35% de proteínas, detalla Viner.
Pese a su gran popularidad, recientemente la dieta Keto fue puesta en tela de juicio luego de que Raquel Valenzuela Argüelles, nutrióloga de la Dirección General del Deporte Universitario de México, quien alertó sobre los riesgos que representa para la salud la ingesta de grasas y proteínas en exceso. Al respecto detalló que este tipo de alimentación es peligroso, ya que puede generar un incremento del ácido úrico, colesterol y los triglicéridos.
Consultado por este estudio, Marchetti explica que “eso podría ocurrir si no se contemplan los límites de la dieta. Es importante ingerir las calorías adecuadas a las necesidades y gasto calórico de cada persona. De esta manera, no habrá ningún tipo de déficit o exceso”.
En este sentido, el especialista repara en la importancia de que el plan alimentario sea hecho a medida por un especialista; y destaca que si se concurre a un profesional de la salud que calcule todos los parámetros, la dieta podrá ser aplicable a cualquier persona y por tiempo indefinido.
Si bien generalmente se la ha asociado a una dieta para adelgazar rápidamente, Marchetti asevera que puede realizarla cualquier tipo de persona, desde alguien común a un deportista. Sin embargo advierte que decidirse por este plan alimentario es hacer un cambio de paradigma, porque no es fácil extender la dieta en el tiempo: “El problema es que, como nosotros no estamos acostumbrados a una cultura de tanta grasa y tan bajos carbohidratos, es difícil lograr una adhesión de más de dos meses. Y lo cierto es que cualquier snack o golosina te saca de esa cetosis y te sentís muy mal”.
A tener en cuenta. Los beneficios de este plan
- Control del apetito: da mucha saciedad. Al reducir los carbohidratos, necesariamente se toma más proteínas y más grasa, con lo que se reduce el apetito
y se ingieren menos calorías.
- Mayor pérdida de peso: una dieta cetogénica produce una pérdida de peso de dos a tres veces mayor que una dieta baja en grasas, y se sostiene más tiempo.
- Mayor pérdida de grasa y menos grasa visceral. Hay dos tipos de grasa: la subcutánea (que se ve) y la visceral (que se acumula alrededor de los órganos internos). Las dietas cetogénicas, además de ayudar a perder peso, eliminan mayor cantidad de grasa de la cavidad abdominal.
- Menos riesgo de enfermedades cardiovasculares.
- Mejora de la sensibilidad a la insulina y reversión de la diabetes.
Prohibidos, los alimentos que son mala palabra
1- Frutas. Contienen azúcares en forma de fructosa, que es un carbohidrato. Los que menos tienen (limón, arándano, frambuesa, fresa, sandía, pomelo y melón) pueden ingerirse excepcionalmente.
2- Cereales (pan, pastas, harina, arroz, copos, galletas).
3- Legumbres (lentejas, garbanzos, porotos, habas). Prohibidos también sus derivados, tales como harina de soja o garbanzos, soja texturizada o quesos veganos.
4- Azúcares. Dulces, golosinas y productos procesados.
5- Bebidas azucaradas o alcohólicas. Las últimas portan etanol, que se utiliza de forma prioritaria como fuente de energía; su ingesta obstaculiza la cetosis y la quema de grasas.
6- Leches, bebidas vegetales o yogures azucarados. Solo se permiten en pequeñas porciones los que son sin azúcares o naturales.
Receta de pancakes
Ingredientes. Dulce: 2 cdas. de harina de coco; 2 huevos; extracto de vainilla; stevia y canela. // Salado: 2 cdas. de harina de almendras, 2 huevos, 1 pizca de sal, un trocito de queso feta rallado y pimienta.
Preparación. Licuar todos los ingredientes. Calentar una sartén y ponerle aceite de coco. Verter la cantidad necesaria para un pancake y cuando este haga burbujitas, darlo vuelta, y al minuto sacarlo.
Acompañamiento. Dulce: vertir frutos rojos y yogur de coco. Salado: pisar 1/2 palta y echar un chorrito de aceite de oliva.
En estudio. A quiénes ayuda
El licenciado Marchetti destaca que esta dieta ha demostrado muy buenos resultados en casos de epilepsia infantil, donde se redujo la frecuencia de las convulsiones.
Por eso fue prescripta en casos de epilepsia refractaria donde los fármacos no daban el efecto esperado.
También se ha utilizado en personas con obesidad mórbida que tuvieran que someterse a una intervención de cirugía bariátrica.
Y actualmente se estudian sus resultados en casos de personas diabéticas, con cáncer o alzheimer.