20 de marzo de 2020
INTERNA
El aislamiento social estalló la grieta de la Iglesia
El Azobispo de Mercedes - Luján se alineó al gobierno de Alberto Fernández y decretó las misas a puertas cerradas y sin público. Al contrario, el platense Víctor Fernández planeaba misas abiertas al aire libre. La grieta eclesiástica.
Tal como informó LaTecla.info, en los últimos días, el arzobispo de La Plata, Víctor Manuel Fernandez, pidió a los sacerdotes "evalúar dar misa en lugares abiertos" a partir del próximo martes cuando concluye. De esa manera, en la previa al decreto nacional, dejaba en evidencia la postura de no acatar al pedido del gobierno nacional para limitar la propagación del virus de covid-19 con cese de actividades. Claro, la resolución de Alberto Fernández se extiende hasta el 31 de marzo.
Si bien, en el comunicado inicial Fernández informó a la feligresía católica que la Iglesia acatará la decisión del jefe comunal, solamente cesará las actividades entre viernes y martes. Luego, retomaría la actividad en rechazo a las recomendaciones de las máximas autoridades.
"El intendente de La Plata ha prohibido eventos en parroquias y templos entre el viernes y martes próximo, lo que incluye las misas", indico el arzobispo, quien no obstante resaltó que "los templos estarán abiertos aunque la actividad estará reducida para evitar todo lo posible la circulación de personas".
Ante el nuevo escenario, conocido desde la noche del jueves, el arzobispo Fernández no emitió mensaje sobre el cese de actividades. En contrapartida, desde el arzobispado Mercedes - Luján, a cargo de Jorge Scheining lanzaron un decreto en total alineamiento con la disposición del Gobierno de Todos.
En la resolución, informaron a todos los sacerdotes de dicha región a brindar misas en templos cerrados y sin presencia de público. Desde La Plata, no hubo respuesta.
El decreto