Carmen Barbieri relató cómo se enteró de la enfermedad de su hijo
La capocómica estuvo en PH, Podemos Hablar y allí contó cómo recibió la noticia de que Federico Bal padece de cáncer de colon
Compartir
Carmen Barbieri estuvo como invitada en el programa PH, Podemos Hablar, donde abrió su corazón y contó cómo se enteró de la enfermedad de su hijo Fede Bal, quien fue diagnosticado hace algunas semanas con cáncer de colon.
Todo comenzó cuando Andy Kusnetzoff, el conductor del clásico de los sábados por Telefe, pidió que pasaran al punto de encuentro "los que recuerdan un día negro en su vida" y Carmen, que viene enfrentando varios golpes desde hace un par de año no dudó en pasar.
"El peor día de mi vida es cuando mi hijo me dijo 'mamá tengo cáncer', fue el golpe más grande de mi vida", comenzó diciendo. Y continuó: "Esperaba nunca haber recibido ese noticia. Yo digo que él tiene un problemita de salud y Fede me dice, 'decí lo que es mamá, cáncer'… Vino a casa después de hacerse la biopsia todos sonrientes un sábado a la mañana y me dijo 'tengo cáncer, vamos a Disney'. Yo me pusé a llorar pero me dije a mi misma que íbamos a pelearla y que la vamos a ganar. Fue el día más negro de mi vida. Si pudiera volver el tiempo atrás haría cualquier cosa por no vivir ese momento".
"Todo el sufrimiento que te pueda contar no tiene comparación con lo que sentí ese día. Fede está súper positivo. El pone el cuerpo, yo no me quiero hacer la víctima, hace todo para salir adelante con mucho positivismo", dijo a modo de balance.
En cuanto a la enfermedad explicó: "Tiene un cáncer hereditario. Se lo detectaron gracias a Sofía (Aldrey) quien cuando se enteró que se descomponía muy seguido lo mandó al médico. Le sacaron 10 pólipos y se encontraron con un tumor de 5 centímetros. Su abuelo Gregorio murió de eso. Parezco un médico hablando porque estuve 26 años al lado de una persona enferma (por Santiago Bal)".
Y cerró concluyente y agradecida: "Fede tiene días buenos y días malos pero su mujer es una roca que lo mantiene en pie cuando cae".
