La Tecla
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En las elecciones de medio término de 2017, que significaron el regreso de Cristina Fernández a la arena política, uno de los dirigentes bonaerenses que optó por salir del espacio kirchnerista fue Eduardo “Bali” Bucca. En aquel momento, el intendente de Bolívar se alineó a Florencio Randazzo para acompañarlo como primer candidato a diputado nacional del Frente Justicialista Cumplir y ser rival de la lista de Unidad Ciudadana que encabezó, para senadora, la ex mandataria.
Dos años más tarde, con la unidad del espacio opositor al gobierno de Cambiemos y Mauricio Macri, Bucca volvió a optar por otra salida. En 2019 fue el candidato a gobernador bonaerense de Consenso Federal, la lista que encabezó para presidente Roberto Lavagna. Con la victoria del Frente de Todos, el bolivarense se consagró jefe del interbloque “Federal” de diputados nacionales.
Sin embargo, y en pleno avance de la pandemia, en el último mes una serie de movimiento del diputado revolucionaron las aguas del interior bonaerense. Más precisamente una fotografía con Cristina Fernández con la excusa de llevar la “Ley Silvio” al Senado. Fue el propio Bucca el que dio a conocer la cita con la presidenta de la Cámara Alta nacional.
Días más tarde, Bucca se sentó en la mesa del ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés “Cuervo” Larroque, uno de los dirigentes de peso de La Cámpora. En esa oportunidad, el funcionario bonaerense fue quien hizo pública la reunión.
En ese sentido, según fuentes del Instituto Patria sentenciaron a LaTecla.info, en el último lapso Bucca ganó la consideración de ser “un gran compañero”. En tanto, en el distrito, Bolívar, las sospechas de una reconciliación con el kirchnerismo y con vistas a los comicios del año entrante son más que fuertes. Por el momento, Bali mantiene el silencio, pero cuando el río suena.