Histórico: CABA adhirió al protocolo nacional de Interrupción legal del embarazo
Con 50 votos positivos, 7 negativos y 3 abstenciones, la Ciudad logró adherir al protocolo nacional sobre la irrupción del embarazo. La sanción fue celebrada por la mayoría y de legisladores que cuenta la Casa.“Lo que estamos viviendo hoy es histórico", dijo la presidenta de la Comisión de Mujer, Infancia, Adolescencia y Juventud, Laura Velasco, del Frente de Todos.
Con el objetivo de salvaguardar el derecho a la salud y a la vida a las mujeres y personas gestantes, la Legislatura porteña aprobó hoy la adhesión de la Ciudad de Buenos Aires al Protocolo para la atención integral de las personas con derecho a la interrupción legal del embarazo dispuesto por el Ministerio de Salud de la Nación, con 50 votos a favor, 7 en contra y 3 abstenciones. El proyecto había sido presentado el pasado 18 de febrero con 42 firmas de legisladores y legisladoras, en un marco de acuerdo del que participaron todos los bloques legislativos.
Para la presidenta de la Comisión de Mujer, Infancia, Adolescencia y Juventud y firmante de la iniciativa en representación del bloque del Frente de Todos, Laura Velasco, “lo que estamos viviendo hoy es histórico. Es un gran día para una ciudad que tiene la tradición de ser pionera en relación con los derechos de las mujeres y personas gestantes, sin embargo necesitábamos brindarles, al igual que a los profesionales de la salud, la solidez de la ley que los acompañe”.
“Vamos por la soberanía sobre nuestros cuerpos, sabiendo que son las más pobres y las más jóvenes las que mueren por abortos clandestinos y que los países que legalizaron el aborto, con Educación Sexual Integral y acceso a anticonceptivos, llevaron a cero las muertes de personas gestantes y bajaron la cantidad de abortos que se realizan”, manifestó Velasco durante su intervención.
En Argentina se realizan entre 370 mil y 522 mil interrupciones de embarazo por año, es decir, alrededor de 1.220 por día. Cada 3 horas, una menor de 15 años es madre; en un 90 por ciento se tratan de situaciones de abuso intrafamiliar. Por eso Unicef Argentina recomienda la aplicación de la ESI. Cada 5 minutos una menos de 19 años es madre sin desearlo.
“Esta acción es un homenaje a todas las niñas obligadas a parir, a las niñas y niños que se quedaron sin madre, a las mujeres torturadas en prácticas clandestinas y hospitalarias. Y también para nuestra compañera Bety Quiste, quien murió hace un mes en la Ciudad de Buenos Aires; gran militante del feminismo popular, creyente como muchas católicas por el derecho a decidir, que dijo con mucha claridad ‘Ni Una Menos por abortos clandestinos’ y fue parte de las promotoras territoriales que en los barrios populares, junto a los centros de salud, sabían que había que combatir a las prácticas que con el perejil o las perchas matan mujeres”, finalizó la legisladora.
ILE EN CABA
Según cifras del Ministerio de Salud porteño, durante 2019 se realizaron en la Ciudad 8.388 interrupciones legales del embarazo, cien veces más que en 2014; 1.191 eran menores de 19 años, de las cuales 58 tenían apenas entre 10 y 14 años. El 86% restante se trataba de mujeres de entre 20 y 45 años.
Respecto a las causas que permitieron el acceso a la ILE, en 858 casos habían sido víctimas de una violación, en más de 7300 se determinó que existía un riesgo para la salud y en 611, para la vida. Estas cifras pertenecen al sistema público, ya que respecto al sector privado no hay información alguna.
Actualmente, existen en la Ciudad de Buenos Aires 60 instituciones públicas que practican la ILE: 44 son CeSAC y 16 son hospitales.
El acceso a la ILE está garantizado en nuestro país por las tres causales que previstas en el Código Penal de la Nación de 1921, a su vez que comprendido por la Constitución Nacional y los Tratados de Derechos Humanos que se incorporaron en su reforma de 1994. En el año 2012, a partir del fallo FAL de la Corte Suprema de Justicia, fue actualizado a partir del concepto de salud integral planteado por la Organización Mundial de la Salud, orientando el accionar de los equipos de salud y estableciendo los nuevos estándares para el acceso a la interrupción del embarazo.