A pesar de que fue uno de los rubros que volvió a la actividad más pronto, a fines de mayo, los comercios minoristas de bienes no esenciales siguen padeciendo la recesión económica ocasionada por la pandemia.
Según precisó la UCIP (Unión del Comercio, la Industria y la Producción), en julio, las ventas disminuyeron un 37% con respecto al mismo mes del año pasado.
El relevamiento de la entidad contempla rubros como: artículos deportivos y recreación; bazar y regalos; bijouterie y accesorios; calzado y marroquinería; electrodomésticos, indumentaria y lencería; joyerías y relojerías; jugueterías; perfumerías y cosmético; textil blanco y ropa de cama, mueblerías.
Se trata de una contracción similar, pero levemente menor a la de junio, cuando el descenso en la actividad fue del 42%. En tanto, en abril, en pleno aislamiento, hubo una merma del 85%. Y, en mayo, un 76%.
En relación al desarrollo de las ventas en el próximo trimestre, el 13,5% de los encuestados consideró que aumentarán; el 54,1% proyectó que se mantendrán sin cambio; y el restante 32,4% sostuvo que bajarán.
Por su parte, respecto a la situación actual en la que se sienten los comerciantes consultados, el 48,6% indicó que es regular; el 27% que es buena; el 16,2% que es mala; y el restante porcentaje se dividió entre quienes consideran que se encuentran en una situación mala y muy buena.