Los tiempos se acortan para el desalojo de la ocupación en Guernica, donde el estado bonaerense busca la solución al conflicto. Hay 80 usurpaciones de terrenos en los que interviene el poder judicial
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La toma de terrenos en la provincia de Buenos Aires alcanzó dimensión en los medios de comunicación a partir de la gran aglomeración de familias que se asentaron en Guernica, en el municipio de Presidente Perón. El ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés Larroque, fue la persona designada por el gobernador Axel Kicillof como mediador en el conflicto, dilatando la orden de la Justicia de desalojar los predios, cosa que requeriría la intervención de las fuerzas de seguridad.
Luego de instalarse en un tráiler en la toma de Guernica, Larroque afirmó hace que en el territorio provincial hay “ochenta tomas judicializadas”.
Según datos del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad brindados a La Tecla, desde 2018 hasta 2020 se registraron 37 tomas de tierras en La Plata, 26 en Moreno, 11 en La Matanza, cinco en Escobar y una en Presidente Perón. Todas ellas merecieron la intervención de la Justicia.
Hoy por hoy, la de Presidente Perón tiene fecha de desalojo para esta semana, dictaminada por el juez Martín Miguel Rizzo. Larroque declaró que no hay “más margen para prórrogas”. La proximidad de un desalojo por una orden judicial significa la intervención de las fuerzas de seguridad para el retiro de familias y viviendas.
Si bien el ministro de Desarrollo se instaló en Guernica, en otros distritos indicaron que la presencia de los Estados nacional y provincial, puntualmente de las fuerzas de seguridad, a veces no es del todo eficaz. Según señalaron a este medio desde la gestión del municipio de La Plata, en la toma de tierras de Los Hornos, en el predio del ex Club de Planeadores, Nación y Provincia comenzaron “a trabajar muy bien” con la comuna, como sucedió en el caso de Guernica, “pero se fue desmadrando”.
“La semana pasada me llamaron porque Gendarmería no estaba presente en el predio. Ellos sí estaban, pero el terreno es enorme, y había solo seis u ocho efectivos. Tampoco podían actuar, no tenían en claro para qué estaban. Entraban y salían”, relató la secretaria de Planeamiento Urbano de La Plata, María Botta. Según explicó, esperan la solución del caso Guernica para ver un desalojo efectivo y que esto se replique en los distritos.
Los municipios suelen tener sus recaudos al reconocer o hablar sobre las tomas de tierras o, en todo caso, destacan que la ocupación fue breve y finalizada en un plazo corto de tiempo. La Tecla trató de consultar a fuentes municipales de Moreno sobre la situación de las ocupaciones, pero señalaron que no querían hacer declaraciones sobre el tema. Cabe recordar que, según los datos brindados por la Provincia, el distrito que comanda Mariel Fernández tiene un total de 26 tomas activas.
A pesar de esto, cuando la intrusión en el amplio terreno de Guernica comenzó a tomar vuelo mediático, los intendentes peronistas del Conurbano salieron a blindar en bloque a la intendenta de Presidente Perón, Blanca Cantero, expresando en conjunto el rechazo a las usurpaciones de inmuebles.
La intendenta del Frente Renovador tuvo que lidiar con protestas de vecinos que le reclaman por hechos de inseguridad en las zonas aledañas a los terrenos. Ante la prórroga del desalojo dictaminada por el juez, Cantero había cuestionado la decisión y protestó porque los “pocos” efectivos policiales que tenía el distrito, estaban destinados a la vigilancia de la toma. A su vez, pedía celeridad a la Justicia.
“En este momento hay una resolución de la Suprema Corte de la provincia de Buenos Aires que hay que revisar porque complica mucho los desalojos. Lo digo sin ánimo de incidir en otro poder”, señaló a este medio Ariel Sujarchuk, intendente de Escobar.
Lineamiento nacional
Una de las pistas del posible futuro accionar de la administración provincial del gobernador Axel Kicillof frente a las tomas de tierras se puede leer en una de las respuestas del jefe de Gabinete de la Nación, Santiago Cafiero, en el informe de gestión al Senado nacional de la semana pasada.
En ese marco, el senador de la Unión Cívica Radical de Tierra del Fuego, Pablo Blanco, le preguntó al Jefe de Gabinete “¿qué postura adoptará el gobierno nacional en defensa de la propiedad estatal y privada frente a estos delitos?”, en referencia a las intrusiones. “Una vez que la situación se define como ´toma de tierras´ mediante sentencia firme emanada de una autoridad judicial competente, es que estamos ante un acto ilegal”, respondió Cafiero.
Las situaciones se alargan en el tiempo, se tensan los vínculos y los Estados nacional, provincial y local, la Justicia, y otros intervinientes, comienzan a buscar la resolución de la cuestión de las tomas de tierra. ¿Cómo continuará este hecho, en el marco de un país con un alto déficit habitacional y una economía jaqueada? Dependerá de de la pericia de los gobernantes para atender un flagelo en crecimiento y que puede agravarse. Hoy quienes requieren viviendas son, en su mayoría, jóvenes que ya tienen hijos y no pueden seguir viviendo en las ya precarias casas de sus padres.
En proceso de desalojo Guernica: el caso más resonante
La usurpación de un campo en la localidad de Guernica es uno de los casos judicializados y el único en el municipio de Presidente Perón. Si bien desde mediados de año, cuando comenzó esta toma, su desalojo viene siendo pospuesto por el juez de Garantías Martín Miguel Rizzo, la semana pasada el magistrado puso como plazo límite el 15 de octubre. El ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés Larroque, destacó que “500 familias” firmaron un acta acuerdo para retirarse de la toma. Sin embargo, denunció que hay un sector que quiere “politizar” el conflicto. La más mediatizada de las tomas genera también conflictos internos en el distrito. Grupos de vecinos protestaron frente al Palacio Municipal, reclamándole a la intendenta Blanca Cantero más medidas contra la inseguridad. La jefa comunal, a su vez, había pedido que la Justicia apurara los términos del desalojo.
Esteban Castro “Tenemos que generar dispositivos de repoblación de pueblos”
El secretario General de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Esteban “Gringo” Castro, dialogó con La Tecla sobre el proyecto de nuevas ciudades que los movimientos sociales le plantearon al presidente Alberto Fernández. -¿Cuál es su visión sobre las tomas de tierras en la Provincia? -Las tomas nunca las acompañamos, no porque tengamos algún prejuicio, sino porque tardan diez años en resolverse. Es una extrema necesidad que se manifiesta de esa forma, como cuando nosotros cortábamos rutas porque teníamos hambre. -¿Qué dice de quienes señalan que detrás de las tomas hay intereses políticos o económicos? -Es como todo, porque hay informalidad, ilegalidad, pibes que se la aguantan con la policía diciendo que se quieren quedar y se quedan. Eso ocurre y no lo negamos, pero están basadas en una necesidad concreta. Si tenés resuelto el tema de la vivienda, será tierra prometida pero llega. -¿Ustedes tienen una propuesta para la cuestión habitacional? -Para nosotros es grave la concentración poblacional en el Conurbano bonaerense. Tenemos que trabajar todos los sectores, para generar dispositivos de repoblación. Hay muchos pueblos que quedaron abandonados porque no llega más el tren o porque no hay mucha gente. Yo tuve la posibilidad de hablar con Alberto (Fernández) y se puede empezar con los terrenos que tiene el Estado, para poder planificar un comodato a veinte años, o créditos a veinte años y créditos para la compra de tierras. El problema de las tomas está desde que tengo uso de razón. Hay un déficit habitacional. Hay tres o cuatro proyectos, todos provenientes de movimientos populares, vinculados a la creación de nuevas ciudades. Algunos pueden decir que es algo a largo plazo, pero existen articulaciones con Nación, Provincia, municipios, para poder promover ciudades más chicas, que generen mejores niveles de formalidad.
Esteban Castro
La versión del municipio “En La Plata todos estamos mirando lo que pasa en Guernica”
María Botta, secretaria de Planeamiento Urbano de La Plata, es la encargada de trabajar con las tomas de tierras en el municipio capital de la Provincia. En este distrito hay varias ocupaciones, entre ellas la del predio del ex club Planeadores, en la localidad de Los Hornos. -¿Cómo se trabaja con la problemática de las tomas como en Guernica o Planeadores? -Hay una problemática habitacional a la que debe darse respuestas con política claras. La cuarentena, sumada a alguna movilización que está por detrás, es un coctel explosivo. En La Plata todos estamos mirando a Guernica para ver si hay una política clara del desalojo. No se puede lotear por lotear, dar tierras al voleo; hay zonas aptas y otras no. Y es preocupante la demora en la toma de decisiones. La gente tiene que tener en claro que esto es ilegal. Hay una crisis habitacional y hay que hacerse cargo como Estado en todos los niveles, pero el mensaje que se baja es contradictorio; no hay una bajada de línea clara, entonces se dan las condiciones para el desorden. Nosotros tenemos como objetivo, de acá a fin de año, aprobar tres loteos sociales. Una respuesta concreta, no biribiri. -¿Varía la intervención de la comuna ante la toma según quién sea el propietario? -Si es un terreno municipal, tenemos las herramientas para actuar. El problema es cuando es un predio fiscal, nacional o provincial. Nosotros hacemos la denuncia, pero tiene que actuar el propietario. Ahí se complica. En los predios privados hay arrastres de años anteriores. Lo que estamos trabajando es en ver si se puede aplicar la Ley de Hábitat, se pueden hacer permutas o cómo resolverlo. Nosotros queremos gestionar esa permuta, por la cual el propietario cede la tierra. En la toma de campos se está avanzando con la Justicia como para que no se vuelvan a ocupar esos terrenos, pero también hay que estar alertas.
La Plata
Ariel Sujarchuk, intendente de Escobar “Hay estructuras inescrupulosas detrás de las tomas de tierra”
En la nómina de tomas de tierras judicializadas en la provincia de Buenos Aires, el municipio de Escobar figura con cinco ocupaciones entre este año y el anterior. El intendente Ariel Sujarchuk condenó la utilización política y remarcó que se necesita más celeridad en el accionar judicial. -¿Cuál es su opinión sobre las tomas de tierras en la Provincia? -La toma de tierras no es algo nuevo, pero se agrava en tiempos de crisis y hay quienes se aprovechan de las necesidades de la gente. Detrás de la toma de tierras está el negocio de estructuras inescrupulosas que falsifican boletos, utilizan personas con vulnerabilidad para que hagan el inicio de una toma, y después revenden el resto. Por el sistema jurídico y la situación actual de vulnerabilidad, es más complejo hacer un desalojo y se genera este tipo de negocios. Es lo más condenable y repudiable. Hay otro aspecto, que es cuando se alientan las tomas desde algún sector de la política. O cuando se mira para el costado. En este momento hay una resolución de la Suprema Corte de la provincia de Buenos Aires que hay que revisar, porque complica mucho los desalojos. Lo digo sin ánimo de incidir en otro poder. -¿Qué medidas toma el municipio frente a las tomas de tierras? -En Escobar hacemos alerta temprana. Tenemos un sistema que se llama Ojos y Oídos en Alerta, para las cuestiones de seguridad en las que no sirve el 911. Con este sistema, los vecinos de Escobar tienen la posibilidad de alertar movimientos extraños. Nos dio resultado para impedir rápidamente la usurpación de terrenos. El distrito tiene todavía mucha tierra disponible a buen valor de mercado. Es probable que un terreno actual dentro de un tiempo tenga mayor valor. Desde la gestión municipal creamos un Banco de Tierras para blanquear esos lotes. Todo debe tener un marco, un límite, y esencialmente un marco de transparencia, porque la tierra es lo único que no se reproduce. Si no se utiliza bien la tierra fiscal en el marco de un consenso que trascienda la gestión, se pierde un capital público difícil de recuperar.