Jubilaciones del Bapro: ganadores y perdedores de la reforma
En medio de la vorágine electoral, la administración de Axel Kicillof avanza en la modificación de la Ley Previsional del Banco Provincia. Cuáles son los principales puntos y cómo se vislumbra el debate
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Con las elecciones a la vuelta de la esquina y la campaña electoral a toda marcha, el Gobierno de Axel Kicillof busca poner fin a la normativa que regula el sistema previsional de los trabajadores del Banco de la Provincia de Buenos Aires, impulsada por la administración de María Eugenia Vidal. Qué cambios traerá la nueva ley y cuáles son las principales objeciones que se le hacen.
El proyecto que modifica el régimen por el cual se rige la Caja de Jubilaciones, Subsidios y Pensiones del Personal del banco, y que provocó en su momento un largo conflicto con el gremio bancario y los empleados de la entidad, se encuentra en la Cámara de Diputados, donde se espera que el tratamiento y la aprobación sean un trámite para el Gobierno.
No obstante, a pesar de la voluntad de evaluar la nueva norma, la oposición de Juntos por el Cambio no tardó en reprochar que se discuta en medio de un proceso proselitista y que, además, haya quedado afuera el régimen que incluye a todos los trabajadores estatales que cubre el Instituto de Previsión Social.
El objetivo de la nueva ley es hacer frente al déficit y a los juicios que acumula la 15.008, que fue objetada en la Justicia a través de más de 2.000 medidas cautelares y más de 7.000 reclamos individuales. Sin embargo hay puntos que significarían un retroceso que se haría extensivo a todos los habitantes de la Provincia. “Son 16,5 millones de bonaerenses sosteniendo una jubilación especial a 15.000 personas, cuando quienes pagan tienen salario y jubilación promedio muy inferior a los beneficiarios” dijo a La Tecla el extitular de la entidad bancaria Juan Curutchet (Ver cuadro).
Por otro lado se busca achicar el déficit de la caja de jubilaciones, que el año pasado fue de más de $ 10.000 millones y es financiado por el Banco Provincia, y la relación negativa entre activos y pasivos.
Para ello, el texto completo del proyecto tiene previsto en su articulado el incremento de los aportes de los trabajadores en actividad, jubilados y pensionados, como también del Bapro como entidad, a la que se suma una especial del 7 por ciento mientras la Caja sea deficitaria.
Entre sus especificaciones, el nuevo proyecto fija 35 años de servicios como mínimo, con 60 años de edad en el caso de las mujeres y 65 años para los varones, poniendo fin a una igualdad etaria que tiene la actual ley. Estos puntúltimo cargo, como regía antes de la reforma de Vidal, que lo redujo al 70%.
A pesar de los beneficios que busca enfatizar la administración Kicillof, el panorama se avizora hostil en caso de ser aprobada en Diputados, ya que todavía queda la Cámara de Senadores, y allí el Gobierno bonaerense tiene un escenario donde la mayoría la ostenta el arco opositor.
Fuentes consultadas por este medio señalaron, en off, que desde el Ejecutivo provincial se buscaría dar las concesiones que sean necesarias a la bancada de Juntos por el Cambio para que sus legisladores levanten la mano a favor del proyecto y, de esta manera, el oficialismo pueda tener una cucarda en plena campaña electoral.
Axel Kicillof Promesas y una reiterada crítica a sus antecesores El proyecto para reformar la Caja de Jubilaciones se inscribe en una promesa de campaña y un trabajo en conjunto con La Bancaria. Durante el 48° Congreso Nacional Ordinario de la Asociación Bancaria, y escoltado por el presidente de la Nación, Alberto Fernández, y el secretario general del gremio, Sergio Palazzo, el gobernador Axel Kicillof anticipó con un discurso crítico a la oposición que “estamos celebrando el éxito alcanzado para construir un proyecto de ley que termine con los efectos de la Ley 15.008, que impulsó el gobierno anterior, y que nos permita empezar a transitar un camino mejor, mucho más justo y que contemple a todos los sectores”.
Juan Curutchet “Que se debata también cómo se está manejando al Bapro” Juan Curutchet fue titular del Banco Provincia durante la gestión de María Eugenia Vidal. En diálogo con La Tecla explicó los motivos que impulsaron la reforma de la ley jubilatoria de la entidad. Al respecto consideró: “La visión que tuvo el Gobierno de Vidal es que si el banco está correctamente administrado puede servir a los bonaerenses, crecer y, al mismo tiempo, pagar el régimen especial de jubilaciones que gozan los trabajadores del banco. De otra forma son 16,5 millones de bonaerenses sosteniendo una jubilación especial a 15.000 personas, cuando quienes pagan tienen salario y jubilación promedio muy inferior a los beneficiarios”. En esta línea, el exfuncionario expresó: “Durante nuestra gestión, el banco incrementó su patrimonio y, al mismo tiempo, pagó en término las jubilaciones bajo la ley 15.008”. Además cuestionó: “Forzosamente interpreto que no se tienen fe para administrar el banco con la misma solvencia”. En referencia a cuándo se impulsa el debate parlamentario, en plena coincidencia con el calendario electoral, Curutchet afirmó: “No tengo objeciones al momento en que se plantea el debate parlamentario. No soy de los que creen que en los años electorales deban eludirse los debates difíciles. Sí creo importante que se debata también cómo se está manejando al Bapro y cuánto está haciendo por la producción y el consumo, ya que, contrariamente a lo que prometieron, en términos reales presta menos, eliminó la promoción Súper 50 y está lleno de títulos públicos”.
Federico Bach “La Caja tiene un problema deficitario estructural” El secretario general de La Bancaria seccional La Plata, Federico Bach, en diálogo con La Tecla expuso los principales lineamientos de la reforma que impulsa el Gobierno provincial y, además, arremetió contra la norma actual. Afirmó que “es un proyecto presentado y acordado con el gremio, con lo cual repara derechos perdidos con la ley 15.008 de (María Eugenia) Vidal; y en el contexto de esta pandemia es la mejor iniciativa para este momento, donde, por muy poquito, perdemos todos, activos y jubilados, pero con eso preservamos el pago de las jubilaciones y le sacamos la mochila del déficit de la Caja al Banco de la Provincia de Buenos Aires, que lo llevaba a una pérdida del balance de sus cuentas”. En esta línea agregó: “Lo que se recupera es el 82 por ciento móvil y la paritaria bancaria, cuando estaba en el 70 por ciento del haber jubilatorio. Además se baja la edad de 65 a 60 años en la mujer y se genera un prorrateo para los hombres hasta el 2028 para llegar a los 65”. Bach dijo también: “Los que se jubilaron con la 15.008 podrán optar por este sistema jubilatorio, con lo cual se puede revertir lo que pasó en estos dos años. Si bien una ley no puede ser retroactiva, a partir de ahora se puede pasar de sistema, porque no son tantos casos y no van a generar un desequilibrio”. Respecto de la actual situación expresó: “La Caja tiene un problema deficitario estructural, porque hace tiempo se tiene 10.550 activos y cerca de 15.000 jubilados y pensionados, con lo cual no se equipara el 1 a 1, y eso genera un déficit permanente”.
Posturas opositoras El debate que apunta a calentar la grieta en la Legislatura Con el texto del proyecto, el próximo paso es su tratamiento legislativo, donde los bloques opositores marcaron sus reparos. En tal sentido, Andrés de Leo, senador de JxC e integrante de la comisión de Hacienda, consideró a La Tecla que “es un proyecto que vamos a evaluar. Hay una idea que es financiar el déficit de la Caja con recursos del Banco Provincia. En principio puede parecer mejor que antes, cuando era financiado por el Gobierno provincial; o sea, todos los bonaerenses con recursos del Presupuesto, pero no dejan de ser fondos de un banco de todos”. Sobre la iniciativa que aún está vigente, el legislador dijo: “Nosotros estamos convencidos de que lo que se hizo durante el gobierno de María Eugenia Vidal fue lo correcto”. Por su parte, el diputado cambiemita y vicepresidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda, Daniel Lipovetzky, afirmó: “Me parece bien que se comience a debatir, pero tiene algún componente electoral al haberlo presentado en esta fecha”. En esta línea fue tajante al afirmar: “Estaría bueno que, más allá de debatir el tema de jubilaciones del Banco Provincia, que es válido hacerlo, también hiciera sobre el valor de los haberes del resto de los empleados de la Provincia que se jubilan a través del Instituto de Previsión Social”. Por su parte, el titular de la comisión de Previsión y Seguridad Social en la cámara, Fabio Britos, señaló: “Estoy de acuerdo con el espíritu de devolver los derechos a los trabajadores bancarios. Yo voté en contra en ese momento, durante el Gobierno de (María Eugenia) Vidal”.
Gustavo Marangoni “Tiene que quedar claro cómo se va a financiar” En diálogo con La Tecla, el presidente del Bapro durante la administración de Daniel Scioli, Gustavo Marangoni, expresó: “Hubo cambios en la gestión anterior que no estuvieron bien orientados, principalmente elevar la edad de las mujeres a 65 años. Eso es algo que no tiene otro régimen previsional de Argentina. Tampoco es lo mismo corregir el porcentaje de las jubilaciones y llevarlas al 70 por ciento del promedio de los últimos años. Después está el tema más estructural, que es el financiamiento de la Caja; ahora se suben algunos aportes que tienen que hacer tanto el banco como los trabajadores. Y me imagino que la idea es descargar en parte al Gobierno provincial. Ese es un viejo debate por la ecuación, que es diferente entre aportantes y pasivos. Eso genera una situación de estrés, y la eterna discusión porque el banco no lo puede absorber. Este proyecto tiene la diferencia de que fue consensuado con el sector gremial, y eso le da un plus”. Además subrayó: “El punto principal y lo que tiene que quedar claro es cómo se va a financiar, cuánto y quiénes ponen qué cosa; sea el Estado provincial, el banco como institución a partir de las utilidades y los trabajadores mediante sus aportes. Pero el haberse consensuado con los trabajadores y el gremio La Bancaria, me parece un mejor arranque que el proceso anterior. Pero hay que ver también cómo impacta en los números del banco, porque si tiene que hacerse cargo del déficit y no tiene un sostén del Gobierno se debe cuidar la salud de la entidad, para no vestir un santo y desvestir otro”.