3 de septiembre de 2021
ENFRENTADOS
El Gobierno cierra una semana tensa con el campo y los industriales
Con las elecciones a la vuelta de la esquina, el oficialismo abrió frentes de batalla con dos sectores claves de la economía. La Mesa de Enlace y la UIA no escondieron su malestar.
A 9 días de las PASO, tanto el Gobierno nacional como el bonaerense profundizaron la campaña y la grieta comenzó a ensancharse. En ese marco, se reavivaron conflictos tanto con el campo como con los industriales. El rumbo económico marca el termómetro en el proceso electoral.
El martes los Ministerios de Desarrollo Productivo y de Agricultura prorrogaron hasta el 31 de octubre próximo las restricciones a las exportaciones de carne. A través de la resolución conjunta 7/2021, se limitaron los embarques hasta un 50% del promedio despachado el año pasado.
El Gobierno fundamentó que la extensión de la medida fue debido a “resultados positivos", y destacó que "tras dos meses de vigencia, los precios se estabilizaron e incluso mostraron cierta retracción en distintos eslabones de la cadena". "En consecuencia puede observarse que las medidas tomadas han cumplido el objetivo de reducir la dinámica de precios", detalló en la resolución.
Sin embargo, la receta implementada para intentar detener la escalada inflacionaria mostró un rápido efecto secundario. La Mesa de Enlace, integrada la Sociedad Rural Argentina (SRA), Confederaciones Rurales (CRA), Federación Agraria (FAA) y Coninagro, puso el grieto en el cielo.
"Es una medida equivocada y que va a llevar a situaciones donde los productores no queríamos llegar. La Mesa de Enlace acá reunida tomó la decisión de diferentes acciones", señalaron. Asimismo, adelantaron que habrá un cese de comercialización y que evaluarán si lo llevarán a cabo tras las PASO.
A su vez, el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) cuestionó el accionar del Gobierno y envió una carta al presidente Alberto Fernández. En la misma, expresaron su "preocupación y rechazo por esta medida que atenta contra la producción, empleo, consumo interno y la generación de divisas".
Dos días después, el oficialismo abrió otro frente de disputa y esta vez con quienes conducen la Unión Industrial Argentina (UIA). El jueves se celebró el Día de la Industria y la entidad desarrolló un acto en José C. Paz. Cursó invitaciones a Alberto Fernández, al gobernador Axel Kicillof y los principales ministros. La respuesta fue negativa. No participaron y enviaron a segundas líneas: el secretario de Industria Ariel Schale, la secretaria de Comercio Interior, Paula Español y al secretario PYME, Guillermo Merediz.
“Un honor recibirlos en casa, que son nuestras fábricas. Ariel, le agradecemos al ministro Kulfas que nos haya privilegiado con la presencia de ustedes, contigo, con Paula. Nos trajiste a Merediz, así que el reclamo lo voy a tener con las pymes”, dijo de manera irónica el presidente de la UIA, Daniel Funes de Rioja.
Mientras tanto, Alberto Fernández encabezó en el municipio chaqueño de Fontana, junto al gobernador provincial, Jorge Capitanich, un encuentro con empresarios del Norte Grande. Allí, estuvo escoltado por los ministros de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Claudio Moroni.
Por su parte, Axel Kicillof visitó la planta de la empresa Marolio en el municipio de General Rodríguez. En la oportunidad, se reunió con empresarios bonaerenses y dirigentes de cámaras industriales. Participaron el ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica, Augusto Costa; el intendente Mauro García; y el precandidato a diputado nacional Daniel Gollan.
En este contexto, con una economía en plena crisis, el Gobierno encara el último tramo de la campaña enfrentándose con dos sectores claves. Las tensiones suben y la grieta se expande.