Por primera vez, la modelo cordobesa Rocío Moreno rompió el silencio, confirmó la separación con el cantante Paulo Londra y dio detalles de su conflictiva relación. Ambos jóvenes son padres de Isabella, de un año y cinco meses, y están a la espera de un segundo bebé en febrero.
En una entrevista exclusiva con el portal Teleshow, la influencer contó que el principal quiebre entre ellos tuvo que ver con las reiteradas salidas del músico, las cuales eran incompatibles con la vida familiar que habían construído. “Empezó a salir más, a juntarse con amigos. No es que yo no quiera que se junte, el tema es que estaba ausente en la casa y cada vez volvía más tarde o prácticamente no volvía a casa, y se quedaba en la casa de los padres para que yo no viera los horarios y cómo volvía”, relató.
Al poco tiempo, la joven quedó embarazada nuevamente y aseguró que tras esto la situación con el artista, lejos de mejorar, empeoró. "Recuerdo una madrugada que yo, descompuesta, le pedí que volviera para ayudarme (estaba con su hija de un año) y dijo que llamaba para fastidiarlo. Terminé jugando con Isabela descompuesta, y apareció a la mañana", reveló.
"No creo que sea susto, tiene que ver las influencias, el entorno y él que no tiene madurez para saber dónde está y lo que debe hacer. A mí me gustaba salir, pero tengo una bebé y hay cosas que uno no debe hacer porque hay responsabilidades nuevas”, explicó Rocío, sobre los motivos.
Con respecto al parto que se viene, Moreno aseguró que no hay vuelta atrás sobre la ruptura, y admitió no saber si Paulo estará presente ese día "No estuvo antes, cuando lo necesité. No es algo que espero. Dadas las circunstancias hoy en día me doy cuenta de que muchas situaciones no se pueden naturalizar", expresó.
Por último, la joven relató el momento máximo de crisis con el trapero. "Toqué fondo cuando se fue a Estados Unidos y me enteré por las redes. No está bien lo que estoy viviendo: no puede ser que me descomponga y termine monitoreándome en las guardias, con 17 de presión, por circunstancias vividas provocadas por él o por su familia", sostuvo.
"No elijo vivir así, ni para mí, ni para mis hijas. Hoy tengo unas sensaciones de enojo y angustia… Soy una explosión de sentimientos. Ya no sé si me interesa tener esa charla; seguramente la tendremos: Hoy digo, '¿para qué?' Pero la vamos a tener que tener por el bien de las nenas. Nos une una relación de por vida, pero ya no hay nosotros", concluyó Rocío en la entrevista.
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