14 de mayo de 2022
ROSCA INTENSA
Semana turbulenta en el PRO mueve la estantería de Juntos y condiciona a Kicillof
La diferencias internas en uno de los socios de la coalición opositora marcaron la agenda. A pesar del pedido de bajar la espuma, los chipazos continúan.
A la crisis política que atraviesa el Frente de Todos (FdT) también se le suma la batalla interna que se despliga en la principal coalición opositora. A nivel nacional Juntos por el Cambio (JxC) exhibe diferencias entre sus popes que ya miran al 2023 y los cimbronazos se trasladan a la provincia de Buenos Aires. En este marco, el PRO no logra salir de la tormenta y ya hubo movimientos que impactaron también en los planes del gobierno de Axel Kicillof.
El portazo que dio el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, sacudió el escenario en territorio bonaerense debido a que el espacio amarillo se quedó sin nexo con el Poder Ejecutivo provincial. El mandamás dio un paso al costado de una tarea clave y esgrimió que fue debido a que los acuerdos a los que llega son boicoteados desde su propio frente. La reforma previsional del Banco Provincia fue la gota que rebasó el vaso en una relación que se desgasta desde diciembre.
"La interna es del PRO, es entre ellos mismos y después viene el resto", manifestó a La Tecla un dirigente bonaerense miembro de la coalición opositora. Sin embargo, admitió que la pelea "viene de más arriba" y aludió a las versiones que señalan que Mauricio Macri dio la orden de que los legisladores provinciales de su espacio no aprobaran nada que modifique el cambio en el régimen jubilatorio promulgado durante el gobierno de María Eugenia Vidal.
"Después de eso, todos salieron a sobreacturar posiciones en el PRO. Quizás algunos no se los veía con una postura tan genuina, parecía que era la voz de otro", describió. Incluso fue más allá y los comparó con quienes están en la otra vereda: "Es más o menos igual que la interna del Frente de Todos, con la diferencia de que ellos son Gobierno".
Las tensas relaciones entre sectores del PRO, además de la salida de Grindetti a la Mesa Provincial de Juntos, también dejó en saco roto algunos acuerdos tejidos entre oficialismo y oposición en la Legislatura. De hecho, el Senado y Diputados sesionaron con temas "light" y solo se aprobó - con la abstención de los opositores- la adhesión al Consenso Fiscal.
Ante esta situación, otras voces señalaron a este medio que la situación en el bloque de Juntos "no es tirante, pero no estamos cómodos. Tampoco es el caso que se habla mediáticamente. Hay buena relación entre todos, las cuestiones internas influyen pero tampoco tanto. Hay buen clima de compañerismo".
Mientras tanto, en los últimos días se vieron recorridas en las que participaron varias figuras de peso con el objetivo de mostrar paz. En la capital bonaerense se vio a Julio Garro con Horacio Rodríguez Larreta, en Tres de Febrero Diego Valenzuela compartió una actividad con Cristian Ritondo, quien luego fue a Quilmes para fotografiarse con Grindetti.
Así, cierra una semana turbulenta uno de los socios de mayor peso de JxC a pesar de los esfuerzos que intentan buscar un clima de armonía. Atrás quedó aquella reunión de intendentes del PRO en La Plata en la que, entre otros puntos, acordaron bajar la espuma de las diferencias y resolverlas hacia adentro. Al mismo tiempo, cobraron fuerza aquellos planteos que ponen el grito en el cielo en torno a quiénes toman las decisiones y la necesidad de jerarquizar a los que detentan poder territorial.