Expectantes, agazapados, confiados pero a la vez inquietos.
Esa es la situación en La Plata del grupo que se nuclea en torno al liderazgo de Florencio Randazzo, que ya tiene a quienes pegarle, pero no tiene aún, a quien acompañar.
No es para menos, el ex ministro de Transporte del kirchnerismo y actual miembro de la Cámara de Diputados de la Nación, sabe perfectamente que para acrecentar su armado en la provincia de Buenos Aires necesita que aparezca el candidato que se pueda meter como “cuña” entre las dos fuerzas mayoritarias.
Un tiempo atrás arremetió en los distintos medios asegurando que “el problema que atraviesa la Argentina es que hay un Presidente sin poder político con una gran desvalorización en relación a su palabra” apuntando al corazón de Alberto Fernández (que en el 2017 fue ni más ni menos que su jefe de campaña de su frustrada candidatura) para luego arremeter contra Cristina y Macri afirmando que “se los debería jubilar, ellos son parte del problema que tiene hoy la Argentina”.
En diagonal a una definición
Establecidos los dichos de su líder, la ciudad de La Plata no es ajena a una novela en donde la incertidumbre parece ser el común denominador de un candidato que suele entremezclar desconfianzas y optimismo entre sus militantes.
Es que Randazzo se transformó en pocos años en “el candidato” cuando irrumpió acompañado por agrupaciones pujantes y juveniles, como “La Florería”, y se fue desinflando con el correr de los años con actitudes pocos felices que provocaron el alejamiento de muchos de sus seguidores.
Hoy encontramos los que se fueron consolidando en el espacio, otros que se mantienen a la espera para ver qué camino tomar y no faltan aquellos que como suele ocurrir en política, se van perfilando hacia las orillas de los que “pintan” a ganador.
Para ello hay que hacer un poco de historia y rememorar lo que fue el último armado político que, dicho sea de paso, le permitió al candidato alcanzar su lugar en el Congreso de la Nación en el escrutinio final establecido por la Junta Electoral en nuestra ciudad representando a la provincia de Buenos Aires.
Los dirigentes de las distintas secciones electorales impulsaron su candidatura por el Frente Vamos con Vos con un armado en donde se establecieron peronistas no K, la alianza con los Vecinalistas y Libres del Sur.
La Plata vivió en aquel momento una puja interna con tres armados diferentes ya sea para el Concejo Deliberante como para la cámara de diputados bonaerenses: “Hacer otro Camino” (Osvaldo Dameno-Gerardo Jazmín), "Hay otro camino" (Andrés Lamotta-Alejandro Santecchia) y "Por el Progreso Social" (Alberto Delgado-Javier Pacharotti).
Dameno-Jazmin lograron una clara victoria en la interna pero en la general , si bien superaron los votos en la sumatoria obtenidos por las tres listas, no alcanzaron a cubrir las expectativas que se habían establecido.
Juntando soldados heridos
No extraño que en lo que va del año, y si bien no hay definiciones políticas, los randazzistas hayan mantenido reuniones con su líder procurando por un lado mantener en sus filas a quienes lo acompañaron en la última elección legislativa; sino además comenzar a “juntar” los soldados heridos que van quedando en el camino ya sea desde el lado del oficialismo como desde la mayor porción de la oposición.
Los referentes consultados confirmaban esto y ratificaban que el armado debe poner en foco a las dos grandes coaliciones: el Frente de Todos intentará preservar la unidad y Juntos por el Cambio se moverá en espejo.
Es factible que ambas fuerzas sufran deserciones que abran paso a nuevos agrupamientos. En este caso los randazzistas consideran que tanto Cristina como Macri deben dar paso a nuevas instancias y allí deben aparecer otra vez como alternativa.
Para ello sostienen que su líder deberá integrarse a Schiaretti, Monzó, Frigerio, los socialistas de Santa Fe, algún gobernador y otros actores que abran el abanico de esa tercera vía tan esperada.
Algunos ya han comenzado a construir en la ciudad esta tercera alternativa y como es el caso del Dr. Osvaldo Dameno mantener el acuerdo con la agrupación de vecinalistas en La Plata y conformar un Frente Cívico que llamarán “Decidamos”.
Allí, según lo marcan integrantes de la agrupación randazzista, harán lugar para otras fuerzas políticas y grupos sociales, económicos e Institucionales que tengan un pensamiento afín.
Hace pocos días y con la presencia de Randazzo recibieron a sectores socialistas, peronistas que han militado con otros referentes, representantes de partidos que no pasaron el piso de la PASO anterior y reconocidos empresarios y comerciantes de la ciudad y también de la actividad cultural.
Ese es el camino elegido. Seguramente conformaran seguidamente una mesa promotora que conduzca el proceso hasta que la dinámica del acontecer vaya dictando los pasos a seguir.
Un álbum con pocas figuritas y muchos figurones.
Los más confiados, creen que a nivel nacional aparecerá esa tercera vía de la mano de distintas figuras convocantes que nazcan desde el corazón del interior del país, para que la construcción sea muy fuerte y con chances importantes.
Otros en cambio no descartan que las peleas internas de los dos grandes frentes provoquen una ruptura que pueda cerrar esa grieta con un consenso que abarque a peronistas federales, radicales insatisfechos, socialistas desencantados e independientes dispuestos a romper esa hegemonía.
Y los desencantados, creen que la polarización volverá a ser muy grande y que no sumarse a alguno de los frentes, seria no solo un grave error, sino el final del espacio.
En La Plata, como en todos los distritos, los randazzistas que hoy están al pie del cañón acompañando a su candidato se muestran junto a él y pugnan por una construcción amplia y con contenido ideológico.
También están los otros, que ya jugaron con el ex ministro y le juraron pleitesía, y sin embargo no muestran sus barajas y se mantienen con perfil bajo esperando que se produzcan las definiciones.
Lo cierto es que en este álbum llamado Randazzo, hay pocas figuritas ya pegadas y muchos “figurones” con el objetivo de llevarse el premio mayor.
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