19 de julio de 2022
PRIORIDADES
Con una Argentina en llamas, Alberto Fernández insiste con la reforma judicial
Tras el mensaje difundido en las últimas horas de ayer por Cristina Fernández de Kirchner, el presidente volvió a poner el foco sobre la reforma judicial y compartió una reflexión en Twitter.
Un dólar a 300, la quita de subsidios a los servicios, el problema con los planes sociales y una escalada inflacionaria sin precedentes empañan el panorama nacional. De acuerdo a sondeos realizados por consultores como Poliarquía y Focus Market, la imagen negativa del gobierno supera el 60% y se enmarca en valores similares a los de 2001, año en el que tuvo lugar la última gran crisis.
No obstante, ayer la vicepresidenta publicó un durísimo video contra la Corte Suprema de Justicia, en el que la acusó de haber convertido al Poder Judicial en un “partido político protector del macrismo” y “perseguidor” de los dirigentes de otras fuerzas.
También responsabilizó al órgano por la crisis económica: dijo que “será muy difícil mejorar las condiciones de vida” de los argentinos “con esta Corte y su modo de funcionamiento”.
Gran parte de los comentarios que recibió la publicación de la mandataria, fueron negativos. Varios usuarios la acusaron de estar “en otra realidad” y de no prestar atención a “lo que realmente nos importa a los argentinos”.
En este marco, Alberto Fernández coincidió con su compañera de equipo y sostuvo que la justicia está "deslegitimada y necesita, de manera urgente, una reforma profunda y democrática" e insistió en la necesidad de "reconstruir una Justicia Federal que respete y haga respetar los derechos constitucionales”.
"Pueden hablar de las formas y del video de Cristina Kirchner, pero NO dejemos de debatir el problema y buscar una solución. Como Presidente sigo comprometido en que los argentinos contemos con una justicia honesta e independiente de los poderes políticos y fácticos como merecemos"; afirmó en un hilo publicado en su cuenta de Twitter.
Según las principales encuestadoras, los problemas que aquejan al común de la gente tienen relación con la inflación y la consecuente pérdida del poder adquisitivo. Sin embargo, la coalición gobernante mira otro partido: el de la arremetida judicial contra exfuncionarios kirchneristas acusados de corrupción, específicamente, en el caso Vialidad, el único por el que la vicepresidenta está siendo juzgada.
La erosión en la imagen y valoración positiva del gobierno nacional se agudiza con la salida de cada ministro, con la inflación que supera los 5 puntos cada mes, con las discusiones internas y los trapitos al sol.
De cara a un 2023 que se aproxima sin figuras fuertes, no hay oficialismo ni oposición capaz de empatizar con la gente del común y sus necesidades. Divididos, mirándose el ombligo y privilegiando las chicanas, no habrá candidato que pueda llegar muy lejos.
CRÍTICAS DE PROPIOS Y AJENOS
Con este panorama, los reclamos al gobierno no se hicieron esperar. El referente radical en la Provincia, Maximiliano Abad, acusó al presidente de estar "totalmente alejado de la realidad" y de darle la espalda "a las necesidades y prioridades de los millones de argentinos que sufren una situación económica cada día más dura".
Su par nacional, Soledad Carrizo, también fue determinante al solicitarle atender "los verdaderos problemas del país", ya que "atacar a la Justicia no baja la inflación, no genera trabajo, no controla el dólar y no devuelve la confianza".
Por otro lado, los 'propios' no se privaron de criticar: así lo hizo Susana González, diputada provincial por el Frente de Todos. La legisladora consideró que Fernández "tardó mucho en reflexionar" y que "la justicia apesta", apoyando la reforma judicial.