Economía caliente: la encrucijada del gobierno ante la poca confianza a sus medidas

El Gobierno Nacional oficializó la prohibición de contratar nuevos empleados en el Estado hasta el 31 de diciembre de 2023. De esta manera, comienzan a implementar una medida que busca achicar el déficit fiscal en el marco de lo pedido por el Fondo Monetario Internacional. Mientras tanto, la economía continúa con serias dificultades.

Por otra parte, ante la necesidad de poner un freno a la suba acelerada del dólar blue, se permitirá a los no residentes y turistas vender hasta 5.000 dólares a un tipo de cambio desdoblado de la cotización paralela.  Asimismo, el Banco Central de la República Argentina liberó el acceso al mercado de cambio para el pago de importaciones de los insumos que salieron de puerto de origen antes del 27 de junio pasado.

La medida permitirá pagar la totalidad de los pedidos hasta 4 millones de dólares o el 40% hasta un tope de 20 millones de dólares. Se trata de insumos que serán utilizados para la elaboración de bienes en el país y que fueron embarcados en origen hasta el 27 de junio.
Las medidas llegan en un contexto de fuerte suba del dólar blue o ilegal, que este jueves al mediodía trepó a $338.

En diálogo con LaTecla.Info el economista, Luis Palma Cané, consideró “Más que congelar los ingresos hay que bajar rol del sector público, con frenar se para la gangrena y esta es una medida incompleta”.

Con respecto a las medidas señaló que "liberar las importaciones que se consideren estratégicas, ¿quién lo va a decidir?, estas son medidas inconducentes que no van a producir efectos y en consecuencias estamos siempre en lo mismo. Falta un plan y entonces lo que se puede prever es que el escenario se va a complicar".

En esta línea, Palma Cané y respecto a las expectativas agregó: "Falta un acuerdo político que es la condición necesaria, pero de eso no hay nada. Hay una tregua con bandera blanca de un presidente que no gobierno y quien lo hace es Cristina Kirchner con su grupo de extrema dureza con medidas populistas que se contraponen a las pocas medidas ortodoxas que pretende implementar la nueva ministra, y el escenario salvo que cambie todo esto va a seguir complicado".

De esta manera, el economista fue contundente al afirmar: "Sin acuerdo político no hay plan. Las medidas son incoherentes, a cuentagotas, sin un esquema consistente entre unas otras y no se puede tapar el sol con las manos. Para comenzar a vislumbrar una solución hace falta un acuerdo y un shock fiscal determinado por la baja del gasto público y un shock cambiario para desacelerar la brecha porque no se puede manejar la economía de esta manera".