Sergio Berni: "El delito es mucho más que un problema policial"
Para el ministro de Seguridad es hora de avanzar en un abordaje integral de uno de los flagelos que más aquejan a la sociedad. Dice, además, que la Justicia ha tomado protagonismo político, y avala la teoría de que hay
parásitos escudados en la figura de Cristina
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En la escuela Juan Vucetich, Sergio Berni recibe a La Tecla con su inconfundible estilo frontal y sin pelos en la lengua. El Operativo Sol para esta tempo-rada, la necesidad de que las cuestiones de seguridad sean abordadas más integralmente, las críticas a la Justicia por la continuidad de la puerta giratoria y definiciones políticas picantes.
-¿Cómo va a ser el Operativo Sol?
-Comienza a partir del 21. Es un Operativo Sol que tiene la particularidad de que se espera un nuevo récord de asistencia de turistas, que han elegido a la Provincia como su lugar preferido de descanso. Y, además de la seguridad ciudadana, también vamos a reforzar con las alertas de incendio que tenemos para el verano, producto del calor y la sequedad, entendiendo que gran parte de los lugares turísticos están enclavados en zona boscosas, zonas combustibles. Por eso, la particularidad de este año es que se va a incorporar todo el sistema de lucha contra el fuego.
-¿Qué cantidad de efectivos va a tener el operativo?
-En total van a ser casi 10.000, entre los asignados locales y los que se movilizan. Y vamos a entregar patrulleros para los municipios costeros, y con eso ya estamos reemplazando el 100% de la flota de patrulleros urbanos de toda la Provincia.
-¿Con esto se termina la renovación de los patrulleros en los municipios?
-Sí, renovamos el ciento por ciento de los patrulleros, que son más de 4.500.
-¿Se van a incrementar los controles de alcoholemia?
-Se van a hacer los controles que se hacen siempre en la ruta y que tienen que ver con seguridad vial, con la velocidad, con el control de documentación y con el control de alcoholemia, por su-puesto. Pero lo más importante es llevar tranquilidad y que haya un tránsito fluido hacia la costa, sobre todo en los días pico. Todos sabemos que los fines de semana y cuando comienza la temporada son días complicados para el tránsito, y ahí hay un refuerzo de la seguridad vial.
-Se habló de una coordinación con el Ministerio de Salud, ¿eso se va a implementar?
-Por supuesto. Tiene que ver con la coordinación de ambulancias, atención médica y enfermería que se despliega junto con el despliegue de la Policía.
-Uno de los temas que suele disparar discusiones es que se trasladan efectivos hacia la costa y quedan desguarecidos los lugares donde cumplen funciones esos policías. ¿Se contempla evitar esa descompensación?
-Obviamente que hay una redistribución que tiene que ver con la cantidad de afluentes en cada distrito, pero el aporte del egreso (producido la semana pasada) de 1.500 oficiales va a ser muy importante para evitar que se saquen policías de otros distritos.
-¿Hay avances en materia de seguridad? Porque en las encuestas sigue apareciendo como uno de los principales problemas señalados por la gente.
-Por supuesto, ¿cómo no va a ser el principal problema de preocupación de los bonaerenses la seguridad? No se olvide que en el 2019, cuando asumimos en diciembre, lo primero que hicieron las cámaras de Diputados y de Senadores fue dictaminar que la Provincia se encontraba en emergencia de seguridad. Desde allí es de donde arrancamos y donde empezamos a trabajar, y por eso llevamos adelante un plan integral de seguridad.
-¿Que consiste en...?
-Hemos trabajado en tres ejes fundamentales: recursos humanos, recursos materiales e incorporación tecnológica. Eso ha permitido que, por primera vez, haya una reducción importante en las estadísticas; porque cuando uno habla de seguridad, le guste o no le guste, la única manera de tener evidencia científica es con estadísticas. Y las que hace el Procurador de la Provincia marcaron el año pasado que los delitos habían bajado entre un 20 y un 25%, y que el 2021 fue el mejor en materia esta-dística de los últimos 25 años. ¿Eso es suficiente? Por supuesto que no, porque comenzamos con un techo extremadamente alto y porque, además, necesitamos que se involucren diferentes actores en la construcción de seguridad. La seguridad es un mecanismo dinámico, multiagencial y multidisciplinario, y necesitamos que muchos actores que tienen responsabilidad en esa construcción lo hagan con el compromiso y la entrega como lo hacemos desde el ministerio.
-En el discurso que dio para el egreso de los efectivos de la Escuela Vucetich dijo que entre 2016 y 2019 la policía perdió 3.500 efectivos. ¿Cuántos policías hay y cuántos aspira a tener cuando termine la gestión?
-Lo que queremos es duplicar la capacidad operativa de la policía en el Conurbano. Eso significa que tenemos que, por lo menos, terminar de incorporar 20.000 efectivos. Ya llevamos incorporados 7.200, para junio van a ser 11.000, y esperamos que el año que viene haya una importante convocatoria para poder completar los 9.000 que faltan. El problema no es la voluntad política de incorporarlos, sino llevar adelante importantes campañas de convocatoria. La Vucetich tenía una capacidad de 1.000 a 1.100 cadetes por año, nosotros la ampliamos e hicimos las escuelas descentralizadas, y hoy no hay un cupo para limitar el ingreso. Más allá que el ingreso tiene unos exámenes muy estrictos, sobre todo psicológicos, todos aquellos que tengan vocación de incorporarse a la policía tienen las puertas abiertas sin ningún tipo de límite, solamente aprobar los exámenes.
-¿Con los 1.500 recientemente egresados, a cuántos efectivos se llega?
-Los 88.000 que estaban, más 7.200 incorporados por nosotros hasta ahora, y a mitad del año que viene vamos a terminar de incorporar 11.000, y (para el fin del mandato) aspiramos a haber incorporado 20.000 nuevos oficiales. Calcule que la capacidad operativa en el Conurbano no supera los 40.000 policías y casi vamos a terminar duplicando eso.
-¿Cuál es el máximo problema que tiene la seguridad de la Provincia?
-Primero, el entendimiento de la multicausalidad del delito; segundo, el compromiso de los diferentes actores que tienen que involucrarse junto con la poli-cía, porque pensar que el delito es solo una cuestión policial es mirar el problema por el ojo de una cerradura. El delito es mucho más que un problema policial, y me parece que el desafío es poder encolumnar a todos los sectores que tienen una responsabilidad en la construcción de la seguridad con la misma fuerza, compromiso y determinación que lo hacemos desde el Ministerio de Seguridad.
-¿Cuáles son esos sectores?
-Todos. La seguridad comienza con la implementación de valores en la familia, con la educación, con el trabajo como metodología de inclusión social, con política de inclusión; y no hace falta que expliquemos cuál es el rol fundamental de la Justicia a la hora de determinar el futuro de la delincuencia, de qué manera se resociabiliza a un delincuente. El problema con los menores. La discusión parlamentaria sobre una nueva Ley de Minoridad. Son diferentes actores que tienen que asumir por lo menos el compromiso de una discusión.
-¿Esto lo habla con el ministro de Justicia?
-Sí, lo hablamos todos los días, y estamos todos de acuerdo. Es la primera vez que la Provincia empieza a construir y a inaugurar cárceles y alcaldías, que es un requisito indispensable a la hora de resociabilizar a los delincuentes. Es imposible hacerlo en el estado que estaban las cárceles, con condiciones infrahumanas; y nadie quería invertir porque políticamente no es redituable. Calcule que entre el 80 y el 85% de los delitos graves son cometidos por personas que reinciden; o sea que se podrían haber evitado si hubiéramos tenido los lugares para llevar adelante una acción tan importante como la resociabilización.
-¿Sigue existiendo la puerta giratoria?
-¿Tiene alguna duda?
DIFERENCIAS CON NACION “No existe la coordinación con las fuerzas federales”
-¿Mejoró la situación de las fuerzas federales en la Provincia?
-No. Siguen estando de la misma manera que el primer día.
-O sea que faltan.
-Nunca estuvieron. Nunca estuvieron coordinadas con el ministerio. Están en los lugares que son su base natural, como, por ejemplo, la PSA en el aeropuerto de Ezeiza, o la Escuela de Gendarmería en Ezeiza o la Prefectura, que se encuentra en las zonas portuarias de la Provincia, pero coordinadas en materia de seguridad ciudadana con el ministerio están de la misma manera que al principio.
-O sea que sigue sosteniendo que no hay una colaboración del Gobierno nacional en materia de seguridad.
-No es sostenerlo. Usted me pregunta y yo le digo que no existe tal coordinación, ni mucho menos un plan de trabajo conjunto.
-¿Y tiene diálogo con el ministro Aníbal Fernández?
-Sí, por supuesto. Estamos esperando. En algún momento el Presidente se comprometió a hacer una reedición del Plan Centinela, y estamos esperando que eso suceda.
-Cristina Fernández habló de la inseguridad y usted dijo que eso era música para sus oídos. Pero muchos lo tomaron como una crítica hacia su gestión. ¿Cómo lo vio?
-Me parece que de lo que habló la vicepresidenta fue de la reedición del Plan Centinela, que fue la incorporación y la coordinación de casi 5.000 efectivos de las fuerzas federales trabajando codo a codo con la Policía de la Provincia de Buenos Aires; plan que no solamente diseñé sino que ejecuté cuando fui secretario de Seguridad de la Nación. Me parece que la vicepresidenta le reclamó al Gobierno nacional la implementación de un operativo como el Centinela.
-¿Sigue sin encontrar aciertos en el Gobierno nacional?
-Yo creo que hay aciertos, no es todo negativo, pero me parece que hasta el día de la fecha no se ha dado certidumbre a nuestros votantes sobre el rumbo que debería llevar el país y que fue para lo cual asumimos el compromiso de presentarnos en una elección.
PUERTAS ADENTRO Cristina Fernández y “los parásitos” que se amparan en la vicepresidenta
-¿Qué le provocó que Cristina Fernández diga que no va a ser candidata?
-Por sobre todas las cosas, una preocupación por la vicepresidenta, porque me parece que está pasando por una situación totalmente injusta.
¿Ha hablado con ella últimamente?
-No.
-¿Ha tenido contacto con la cúpula del kirchnerismo en los últimos tiempos desde que se alejó del espacio?
-Puedo tener contacto, pero no en temas políticos puntuales
-¿Cree, como dicen algunos, que hay un sector parasitario de la política que vive a la sombra de la vicepresidenta?
-¿Si creo?
-Sí.
-No, estoy convencido de eso.
-¿Y cómo se sale de esa situación?
-Problema de los parásitos.
-¿Quién debería ser el candidato a Presidente del Frente de Todos?
-El hombre o la mujer que tenga vocación verdadera de transformar.
-¿Usted con quién quisiera trabajar?
-Con cualquier peronista que tenga esa vocación.
-¿Qué piensa hacer el año que viene?
-Por sobre todas las cosas, dedicarle toda mi energía a esto que estamos haciendo, que es llevar adelante una profunda transformación en materia de seguridad, que lleva un inmenso esfuerzo de 24 horas todos los días de la semana.
-¿Puede ser Axel Kicillof ese candidato a Presidente?
-Sí, claro, por supuesto. Pero me parece que el gobernador Kicillof tiene la vocación de ser reelegido. Además, aquellos que caminamos en la Provincia todos los días vemos ese clamor por Axel Gobernador.
-Y si él fuera a dar la pelea nacional, ¿usted iría en busca de la Gobernación?
-Yo tengo todas mis energías puestas en este desafío que es la construcción de seguridad, un desafío difícil, que lleva mucho tiempo, mucho esfuerzo, mucho compromiso, y en eso se me van las 24 horas del día.
CRITICIAS Y DENUNCIAS “El lugar de ministro de Seguridad es el más difícil de toda la política”
-¿A qué le atribuye que por momentos reciba muchas críticas, algunas desde los medios y otras desde otros sectores?
-Primero, se equivocan solo los que hacen. Segundo, el que no quiere ser criticado no tiene que hacer nada. Y, lamentablemente, el lugar de ministro de Seguridad es el más difícil de toda la política de la Argentina, no tengo ninguna duda. Uno está resolviendo problemas todos los días; problemas estructurales que vienen arrastrándose de años y hay que cambiar. Y ese es el compromiso político que uno tiene. Muchos hablan, pero son pocos los que dan la cara.
-¿Qué le contesta a la acusación de que tiene propiedades sin declarar?
-Una cosa es lo que se dice y otra cosa es lo que es. Estoy presentando toda la documentación en la Justicia, como corresponde, que es donde hay que dar todo tipo de explicaciones.
-¿Se está jugando mucho la política en el terreno judicial?
-Me parece que la Justicia ha tomado un protagonismo político; se ha salido de los carriles de administrar justicia para intervenir fuertemente en decisiones políticas.
-Se viene un año electoral, y en la campaña, que parece haberse adelantado, se dicen muchas cosas. Hay sectores de la oposición que expresan críticas por los sueldos de los policías, el estado de las comisarías. ¿Cómo está hoy la situación salarial de la fuerza?
-Esos sectores son los mismos que dejaron que la cantidad de policías disminuyera, dejaron que los patrulleros sean todos chatarra, son los que nunca pusieron un peso para arreglar las comisarías. En este nuevo presupuesto estamos trabajando para que, con el refuerzo para Seguridad, se arreglen todas las comisarías. Estamos ordenando todo aquello que cuando ellos tuvieron la posibilidad de hacerlo, no lo hicieron.
-¿Alcanza el presupuesto del año que viene para los objetivos que se plantea?
-Sí. Obviamente que los objetivos son infinitos y los recursos son finitos; entonces, gobernar significa administrar recursos y prioridades, fundamentalmente.
MAPA DEL DELITO “Veo a los intendentes mucho más comprometidos con la seguridad”
-En la entrevista que hicimos en mayo dijo que cuando hay que poner la cara, los intendentes desaparecen. ¿Lo sostiene?
-Veo a los intendentes mucho más comprometidos con la seguridad. Siempre se habló del mapa de la seguridad, del mapa del calor y del mapa de donde se generan los delitos. Nosotros, lo que hacemos es el mapa de la génesis del delito, dónde se produce, dónde está la marginalidad como factor importante de generación del delito. No hay que confundir marginalidad con pobreza. Y los intendentes son un factor importante a la hora de actuar en los lugares donde las políticas de inclusión son fundamentales, porque ellos tienen las herramientas más eficientes. Ya nadie discute que la seguridad no es un problema de un policía más o un patrullero más, es un problema multiagencial, multicausal, y hay que atacar fundamentalmente donde se genera, que es en donde hay exclusión, marginalidad.
-¿Y por qué se producen a veces esos escarceos entre los intendentes y el ministerio por la falta de patrulleros o efectivos?
-Nadie discute que faltan efectivos, si no, no habría tenido la iniciativa el Gobernador de reponer la cantidad de policías perdidos. De que faltan efectivos no discute absolutamente nadie. Lamentablemente, a los policías no se los puede comprar hechos, se los tiene que hacer; y formarlos y capacitarlos lleva un proceso. Además, la incorporación depende de la voluntad de ser policía de la sociedad. Nosotros hemos hecho todos los esfuerzos para recuperar el numerario perdido, pero también necesitamos una amplia convocatoria.
CONTINUIDAD O NO “Primero hay que terminar este período, después veremos”
-¿Cuál es la mayor virtud que tiene el Gobierno de la Provincia y qué cuestión a corregir observa?
-La mejor virtud es que es un Gobierno que donde hay problemas estructurales aplica soluciones de fondo, independientemente de la especulación política. Y defectos, me parece que todos aquellos que trabajamos todos los días y que intentamos cambiar las cosas podemos equivocarnos. Solamente no se equivocan aquellos que no hacen.
-Si Kicillof renueva como Gobernador y lo vuelve a convocar para el próximo período, ¿está decidido a continuar?
-La verdad que primero hay que terminar este período, que es bastante exigente, después veremos.
-¿Envejeció en estos cuatro años en el ministerio?
-¿Tiene alguna duda?
-¿Alguna vez sintió ganas de irse a su casa?
-No, porque uno asume esto con el compromiso de la militancia. La verdad que cuando uno asume una responsabilidad como esta es movido por la pasión, por el compromiso, por la responsabilidad y, obviamente, por la vocación de servidor público. No es casualidad que uno sea médico cirujano, que sea militar; son profesiones que tienen que ver con la vocación de servicio, y uno a la vocación de servicio la explota, y es el motor que hace que funcione todos los días.
INCIDENTES EN GIMNASIA-BOCA “Si la policía no actuaba como actuó hubiéramos tenido una tragedia”
-A la distancia, ¿cómo ve ahora lo que pasó en el partido de Gimnasia-Boca en La Plata?
-Como lo vi el primer día. Hubo tres momentos en ese partido. Por un lado, una policía que fue contratada para un partido con cancha llena y la policía cumplió con ese objetivo; de hecho, comenzó el partido sin ningún tipo de incidentes. Un segundo momento, que es cuando empieza el partido y quedan, de acuerdo a testigos de la causa, entre 5.000 y 7.000 personas afuera con entradas compradas, totalmente enardecidas, queriendo entrar; y en esa desorganización hubo un accionar individual de un policía que terminó con un gas lacrimógeno que ingresó a la cancha. Y, a partir de ahí, un tercer momento en el que si la policía no actuaba como actuó hubiéramos tenido una verdadera tragedia. Había 25.000 personas que querían salir por cuatro puertas y había 7.000 personas del otro lado que querían ingresar. Todos sabemos que esa situación trae tragedias, como pasó con la Puerta 12. Y la policía despejó para que la gente pueda salir, y de hecho pudo salir. Esto es lo que se ve reflejado en la causa.
-¿Descarta totalmente que haya habido alguna incidencia interna por lo que pasó la semana previa con cambios en la Departamental La Plata?
-Eso no tiene ningún tipo de asidero. Si alguien no hubiera sobrevendido 7.000 entradas, ¿cree que hubiera existido ese problema? No. ¿El problema fue que la policía actuó mal a la hora que comenzó el partido? No, porque la cancha se llenó y no hubo ningún tipo de inconvenientes. El problema fue cuando empezó el partido y quedaron afuera 7.000 personas con las entradas en la mano. El primer fiscal debería haber investigado quién se las vendió, pero no allanó el club inmediatamente, no investigó, y por eso fue apartado de la causa.