Los intendentes de Juntos no claudican en la búsqueda de un esquema electoral que, aún cuando haya que dirimir candidaturas nacionales y provinciales en las PASO, ellos salgan indemnes de la puja local quedándose con la exclusividad de la boleta en el distrito y que su nombre vaya colgado a todas las papeletas que bajo el sello de la coalición compitan en agosto.
Pero ese reclamo choca con la desconfianza de los postulantes presidenciales del Pro, fundamentalmente de Patricia Bullrich, quien ya les avisó que si no dan muestras claras y fehacientes de equidad les plantará candidatos para complicarles la primaria local. Incluso cuando ello pueda suponer el riesgo de perder el distrito.
Como señaló este medio, en la reunión de la mesa provincial del Pro con le exministra de Seguridad, ella les dejó claro que mirará con lupa distrito por distrito y dejó explícita su duda acerca de quién le cuidará la boleta en los lugares donde el intendente ya se haya expresado por otro candidato. Esa advertencia va más allá de los límites del partido amarillo y alcanza también a los radicales. A tal punto llega la preocupación de los alcaldes que uno de ellos, en la mencionada junta de la mesa provincial le propuso a Bullrich que ella pusiera todos los fiscales y que él se hacía cargo de pagarlos, con tal de que no tuviera competencia interna el 13 de agosto.
Pero la desconfianza tiene argumentos, y acecha de la misma manera a Bullrich que a Rodríguez Larreta. En el búnker larretista vituperaban hace algunos días por la foto que el intendente de San Nicolás, Manuel Passaglia se sacó con la exministra. “Horacio lo fue a visitar varias veces, estaba todo bien y, de pronto se sacan los hermanos la foto con Patricia y le explicitan su apoyo. Son pequeños gestos que preocupan”, subrayó uno de los hombres que trabaja en la campaña del jefe de Gobierno porteño.
Lanús, donde el jefe comunal Néstor Grindetti aparece como uno de los precandidatos a gobernador alineados con Patricia Bullrich, y que ya tiene en la línea sucesoria al alcalde en ejercicio (Grindetti tomó licencia para hacerse cargo del club Independiente) Diego Kravetz, difícilmente sea un distrito en el que Rodríguez Larreta empuje con fuerza alguien que desbanque al grindettismo. Si bien Grindatti mostró una preferencia es respetado por todas las figuras del Pro y tendría un lugar en un eventual gobierno amarillo, gane quien gane.
Larreta también mira con atención los movimientos de Martín Yeza. El intendente de Pinamar ya dijo que no va por la reelección y tiene en las gateras a algunos candidatos para sucederlo, con una aparente leve ventaja en su favor para Juan Ibarguren, secretario de Turismo y Desarrollo Económico, no se descarta que el larretismo busque imponer a alguien más. Yeza ha jugado desde el principio en favor de María Eugenia Vidal y aunque no haya tenido una clara definición ahora por Bullrich, en el entorno del mandamás porteño lo ven como un hombre muy ligado a Maurico Macri, y que jugará para donde Macri le indique.
El jefe comunal de Rivadavia, Javier Reynoso, alineado a los hermanos Buil, y por ende al monzoísmo, quedó parado del lado de Bullrich, y por eso Santilli y Larreta aprontan para una posible interna a Julia Monasterio. Excepto San Nicolás, los otros son distritos con un volumen de votantes menor y eso puede tranquilizar al jefe de Gobierno de la Ciudad. Sin embargo, el “Pelado” ha conseguido el acompañamiento de alcaldes de varias ciudades con una gran incidencia electoral. A esos intendentes Bullrich les pide equidad en las fotos, en las declaraciones, en la publicidad y en todo lo que concierne a definiciones de preferencia por uno o por otro.
En la punta de ese lote están Julio Garro (La Plata) y Diego Valenzuela (Tres de Febero). El mandamás de la capital provincial dijo hace unos días, en declaraciones periodísticas, que “tanto Horacio como Patricia tienen capacidad para gobernar la Argentina” y días después acompañó por igual a Diego Santilli y a Cristian Ritondo en el Congreso del GEN, del cual participaron ambos candidatos a gobernador en distintos horarios. Fue el sábado 29 de abril y cerca del alcalde bromeaban “dos veces, un sábado de feriado largo, en una actividad del GEN, los sacrificios que hay que hacer en la campaña”. Por ahora esos sacrificios no parecen alcanzarle a Bullrich, que sigue alentando la candidatura del senador Juan Pablo Allan. Es una puja en la que también se anota el diputado Daniel Lipovetzky.
Valenzuela es otro de los que mostró apoyo por Rodríguez Larreta y allí la otra pata de la interna quiere pisarle el distrito. Cristina Ritondo sondeó para ese menester al exarquero de la Selección Luis Islas. Otro distrito de la Primera alineado con Larreta es Campana, donde el intendente Sebastián Abella irá en busca de la reelección pero si no hay un acuerdo para que en los distritos donde se gobierna se evite la pelea interna, Bullrich anota en la competencia a Carlos Cazador.
Ezequiel Galli (Olavarría) fue uno de los primeros enojados cuando Cristian Ritondo fue al distrito a levantar la mano del exsenador provincial Dalton Jáuregui. Pero Galli juega abiertamente para Larreta y Santillo y si se abren PASO difícilmente pueda evitarlas aunque su reelección no pareciera correr grandes riesgos. Un caso similar al de Valenzuela y Garro.
En bahía Blanca, donde Héctor gay ya anunció que no buscará un nuevo mandato, el espacio que conduce junto a la senadora Nidia Moirano y al exdiputado y actual director del Banco Provincia Santiago Nardelli, se encolumnó detrás del mandamás porteño y promueve la candidatura de Moirano a nivel local. Emiliano Alvarez Porte es el candidato que propone Ritondo, pero si hay internas el espacio de Emilio Monzó le ofrece a Bullrich la postulación del actual diputado Lorenzo Natali, quien encabezó la boleta seccional de la Sexta en las elecciones de 2021. Las encuestas avalan esta movida.
“Si un intendente se mete en la disputa nacional Patricia se va a meter en lo local”, le dijo a este medio uno de los armadores políticos de la exministra de Seguridad. Y puso como ejemplo de no intervención a General Pueyrredón. “Montenegro no se mete en lo nacional, entonces Patricia no interviene en su distrito”, comentó.
Pero en otros casos la cosa es mucho más complicada. El intendente de Junín, Pablo Petrecca, históricamente alineado a Jorge Macri, quedó entre la espada y la pared. Mientras Rodríguez Larreta prácticamente lo designó su armador seccional, desde el Bulrrichismo le reclaman a Macri que su pollo debe jugar para la dama. El senador Marcelo Daletto, del equipo de Emilio Monzó, fue hace un par de semanas al distrito a presentar la mesa de Bulllrich, y propone para la intendencia a Luis Chami, quien fuera el segudno de Petrecca en la estructura política del distrito. También aparece como posible candidato para enfrentar al jefe comunal el empresario Ricardo De la Fuente, que está en sintonía con Javier Iguacel.
Mientras los jefes comunales claman por la Y o la V corta para ser ellos, o sus herederos designados, los únicos con la boleta de Juntos a nivel local, llevando arriba a todos los competidores para las categorías nacionales y provinciales, quienes apuestan por ser quienes le devuelvan el gobierno nacional a lo que en sus inicios fue Cambiemos miran con recelo y desconfianza el movimiento de los siempre resbaladizos intendentes.
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