A menos de un mes para las PASO, y pese a la fuerte escalada del dólar blue en los últimos días, el ministro de Economía de la Nación y precandidato a presidente de Unión por la Patria, Sergio Massa, se reunió con la cúpula de la CGT junto a su compañero de fórmula, Agustín Rossi.
Allí fue recibido por el trinomio que conduce la entidad gremial, Héctor Daer, Pablo Moyano y Carlos Acuña. Mientras que entre el público figuraba el Hugo Moyano y el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro.
Tras las palabras del “Chivo” Rossi, donde el rosarino criticó a quienes intentan “terminar con el kirchnerismo para siempre”, le tocó la palabra al ministro de Economía. Allí, hubo un fuerte respaldo hacia los trabajadores, cuestionamientos a Juntos por el Cambio, y cruzó al empresariado al asegurar que “no existe ninguna empresa sin trabajdores”.
Durante su discurso, el tigrense subrayó: “Esta muestra colectiva de unidad del movimiento obrero. Que tenemos que seguir consolidando y abrazando al resto de los sectores que representan al mundo del trabajo”.
“Es la responsabilidad de convocar para cumplir con un segundo mandato histórico que tenemos quienes pretendemos representar al mundo del trabajo que es el de trabajadores únanse. Tenemos que unirnos con todos los sectores del mundo del trabajo para tratar de transmitir cuáles son los desafíos que enfrentamos en los próximos meses y los próximos años”, añadió el precandidato.
Allí aparecieron las críticas hacia los sectores opositores: “No hablan del trabajo como instrumento de transformación de un ciudadano, hablan del trabajo como un costo. Hablan del costo laboral. Y para nosotros, que entendemos lo que representa el trabajo como instrumento de la movilidad social ascendente en Argentina. El trabajo es el motor más importante de crecimiento que tenemos en nuestra sociedad”.
En ese sentido, marcó algunos puntos flacos durante la gestión de Alberto Fernández: “Si bien creció 33 meses consecutivos el ingreso al mercado de trabajo en Argentina, los salarios no se recuperaron como se tenían que haber recuperado. Ahí tenemos el primer desafío, que es tomarnos de la mano, defender en la puja distributiva el rol del salario, en la distribución del ingreso en Argentina”.
“Poner al estado como equilibrador de las relaciones sociales y empujar para recuperar ingresos, peleando con la inflación, pero también mejorando el salario de trabajadores y trabajadoras”, completó.
En esa línea, aparecieron las críticas hacia los empresarios: “La mesa de trabajo tiene que estar tendida entendiendo que no hay trabajadores sin empresas y eso tenemos que entenderlo todos. Pero los empresarios deben entender también que no hay empresas sin trabajadores. ese equilibrio es el estado quien tiene la responsabilidad de regular”.
“Nunca me van a ver empujando a los trabajadores fuera del ámbito de negociación. Porque estoy convencido en que la Argentina tiene que recuperar el camino de mejor puja distributiva”, finalizó.
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