La batalla electoral en la provincia de Buenos Aires por el sillón de Dardo Rocha se define por un voto y se espera un final reñido. Cómo llega cada fuerza política al 22 de octubre
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Por Andrés Sosa y Javier Garbulsky
El 22 de octubre será el gran día para la provincia de Buenos Aires, ya que sus habitantes decidirán sobre su futuro al elegir a quien gobierne por los próximos cuatro años. El contexto económico se presenta desfavorable para las amplias mayorías y suma otro elemento que genera distanciamiento entre la gente y la dirigencia política. En qué situación llegan Unión por la Patria (UP), Juntos por el Cambio (JxC), La Libertad Avanza (LLA) y el Frente de Izquierda Unidad (FIT-U).
El tándem Axel Kicillof - Verónica Magario va por la renovación de su gestión en un campo minado por la situación nacional, rencillas internas y el caso Insaurralde. El último tramo de la campaña estuvo signado por un operativo blindaje con la intención de amortiguar el impacto de los golpes en la línea de flotación oficialista. La victoria obtenida en las primarias les dio un impulso mayor para reforzar los aspectos que consideraron positivos y para poner el ojo en los que entendían que había que cambiar. Aumentar el caudal de votos es el principal objetivo no solo para retener la Provincia, sino también para llevar a Sergio Massa al balotaje.
En ese sentido, luego de un análisis exhaustivo de los resultados, uno de los aspectos que resolvieron fue apuntar a quienes no concurrieron a votar. Particularmente recurrieron a los padrones partidarios de cada espacio político (fundamentalmente el del Partido Justicialista) para identificar a los más cercanos y trabajar sobre la importancia de ir a las urnas en la actual situación. Por ese motivo entendieron que para cumplir tal despliegue, las acciones debían realizarse de manera unitaria y recostándose sobre el poder territorial que poseen los intendentes del peronismo. En tanto, los caciques oficialistas, si bien trabajan sobre la boleta completa, se enfocaron en localizar la campaña; es decir, priorizan en mostrar empatía con la población como una de las formas para combatir el enojo de la misma con la dirigencia.
En los últimos días, el sector más cercano a Kicillof se caracterizó por el armado de actividades masivas con la característica de priorizar la mística peronista, la liturgia y el poder de movilización. Tal es así que el multitudinario acto de Ensenada fue el fiel reflejo de tal decisión, como así también la caravana llamada “Del kilómetro cero a la capital nacional del peronismo”, que inició en Berisso y concluyó en La Matanza.
Por su parte, con ocasionales intervenciones de la Patoneta, el vehículo de campaña de Patricia Bullrich, Juntos acelera con el fin de recuperar 600.000 votos, que son los perdidos desde la elección de 2021 hasta las PASO de este año, identificando el posible destino de la fuga.
En la lista aparecen exvotantes de JxC que optaron por la alternativa libertaria, muchos de los cuales evalúan como negativo el Gobierno de Mauricio Macri, o que, al menos, no cumplió con sus expectativas. También influyó, creen en el comando de campaña cambiemita, el considerable grado de ausentismo y voto en blanco en las primarias. “A ellos hay que convencerlos de que participen, y decirles bien claro cuál es nuestra propuesta”, afirmaron. Para ello, Grindetti y su séquito optan por petit reuniones, antes que las multitudinarias caminatas. “Nos reporta más un contacto directo con víctimas de la inseguridad, con maestras, con comerciantes, que las tradicionales recorridas por una calle”, explicaron.
El compañero de fórmula del lanusense, enfocado de manera especial en el interior, definió la estrategia con una ingeniosa frase. “Menos TikTok y más toc toc”, en referencia a la necesidad de golpear puertas para acercarse a los vecinos. En este sentido, en el análisis aparecen puntos prioritarios para “atacar”. Por un lado, el populoso Conurbano, bastión del peronismo pero con reciente inserción libertaria. Allí suelen desembarcar las principales espadas de Juntos, incluidos referentes nacionales. Por otra parte, el mapa de calor pos-PASO muestra unos treinta distritos en los que los candidatos ganaron a los oficialismos peronistas y vecinalistas, o perdieron por muy poco.
Los objetivos alcanzan, además, a tres secciones electorales, donde la performance de agosto fue buena pero no tan buena: Cuarta, Quinta y Sexta. “Ahí ganamos, pero se puede sacar mucho más si se trabaja bien”, aseveraron desde el comando opositor. En el carril de La Libertad Avanza, la candidata a Gobernadora, Carolina Píparo, solo se limitó a subir a la ola generada por Javier Milei para sacar rédito y mostrarse un poco más competitiva luego de que su alianza quedara tercera en las PASO. Las principales actividades que emprendió fueron recorridas en las que resaltó el polémico economista con su motosierra en mano. La diputada nacional quedó en ridículo en una recorrida que hacía sin la figura más importante de LLA. En plena filmación de un spot de campaña en Florencio Varela, en el que construía una fake news, fue increpada por vecinos que le señalaban que lo que decía era falso.
Su intención era mostrar una calle de tierra destruida, pero, en realidad, se encontraba en pleno trabajo de reparación por parte del Municipio. En este contexto es que tres de las cuatro fórmulas presentan mayor competitividad en una elección que define al ganador por la mínima diferencia. Cada cual con sus formas intentará quedarse con la victoria. El 22 será el día de la verdad.
LA LIBERTAD AVANZA Contra la casta, libertarios buscan el voto bronca del Conurbano
Entonados por la victoria de Javier Milei en las PASO, donde resultó el más votado, La Libertad Avanza confía en recuperar terreno en la Provincia. Carolina Píparo terminó detrás de Kicillof y Grindetti, a más de 10 puntos de ventaja, y se sube a la ola “mileísta” confiando en un aluvión de votos que la eleve electoralmente. La estrategia ha sido, hasta ahora, similar a la del “León”: denuncia contra la clase política tradicional (la casta, en la jerga libertaria) y denuncia de pactos entre los grandes espacios políticos para marcar el ritmo de la Provincia. Así, la diputada nacional pidió detener nombramientos en el Estado bonaerense y pases a planta permanente.
Para intentar el “batacazo”, los encargados de la campaña violeta diseñaron un plan para desembarcar en grandes conglomerados del Conurbano. Creen que allí el voto bronca es mayor; muchos de ellos, peronistas desesperanzados, y otros, independientes que buscan un cambio motosierra en mano.
UNION POR LA PATRIA A todo o nada, objetivo reelección y meter a Massa en el balotaje
En la provincia de Buenos Aires, Unión por la Patria (UP) llega al 22 de octubre asediado por problemas internos y un contexto económico nacional adverso que dificultaron un desarrollo de la campaña en paz. La centralidad de Axel Kicillof fue vital en la estrategia diseñada para retener la Gobernación y así oxigenar a Sergio Massa en la contienda nacional. Para delinear los trazos gruesos de los pasos a seguir el oficialismo armó la mesa de coordinación de campaña con dirigentes de peso de las diferentes tribus.
La misma se compuso con miembros del entorno del Gobernador, intendentes del Conurbano, ministros con despliegue territorial, referentes del massismo y equipos técnicos para el aspecto comunicacional. Con candidato único para la Gobernación y una interna presidencial, las PASO tuvieron un sabor agridulce. Kicillof logró imponerse con claridad por sobre el resto de los postulantes y encaró la segunda etapa con una espalda mayor. No obstante, la derrota a nivel nacional activó mecanismos de contención y el territorio bonaerense se transformó en la trinchera predilecta con el objetivo de aportar votos suficientes que lleven a Massa a una eventual segunda vuelta.
La campaña se centró en fortalecer el perfil de mandatario provincial con el acento puesto en la gestión, los valores y la propuesta de mostrar un futuro claro a la sociedad. Asimismo, desde calle 6 señalaron que “la gestión es nuestra mejor campaña. Con el trabajo coordinado con los intendentes tenemos que lograr la tracción de abajo hacia arriba”. Con la economía al borde del colapso, la intención del oficialismo siempre fue tender a poner sobre la mesa una agenda netamente bonaerense y polarizar con Néstor Grindetti (Juntos) y Carolina Píparo (La Libertad Avanza). En ese aspecto hicieron hincapié en la defensa de los derechos adquiridos y alertaron sobre los planteos de recorte impulsados por la oposición. La fórmula Axel Kicillof - Verónica Magario es la apuesta fuerte de Unión por la Patria para dar una batalla electoral sin precedentes desde la recuperación de la democracia, en 1983.
JUNTOS POR EL CAMBIO Un plan para la remontada atado a la cosecha de Patricia Bullrich
Con los estertores de una dura disputa en el seno del PRO, que tensionó la convivencia interna en Juntos y puso en peligro el futuro de la alianza opositora, Néstor Grindetti fue a la PASO con dudas sobre el nivel de homogeneidad que podría alcanzar tras el enfrentamiento entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta.
Las primarias fueron un complejo examen para la oposición, que en territorio bonaerense logró amalgamar, en algunos casos con fórceps, el frente interno para ir a la batalla contra peronistas y libertarios. Así como el de Lanús se subió a la Patoneta, el vehículo utilizado por Bullrich para recorrer el país, también sumó a Diego Santilli y al ritondismo a su esquema de campaña, buscando atornillar el voto que no le fue fiel. Tras la interna, con el triunfo del lanusense y su integración en la fórmula con el radical Miguel Fernández, intendente de Trenque Lauquen, comenzó una andadura que busca remontar los resultados de las primarias.
En el recuento final, JxC quedó a unos tres puntos (decimales más o menos) del vencedor de agosto, el gobernador Axel Kicillof, cifras que disimulan el porrazo producido y hacen albergar esperanzas sobre una remontada el domingo 22. Claro está, para Juntos se abre un panorama complejo, que obligó a la fórmula provincial a sumar millas en territorio bonaerense, y a meter corazón para compensar con campaña lo que Bullrich no le insufla. “Es difícil si arriba se caen. No sé si es así, pero que Patricia esté estancada nos obliga a sumar más en la Provincia”, evaluó un intendente amarillo.
El presidente de Independiente centró buena parte de su actividad en el Conurbano, aunque también viajó a varias ciudades del interior. Por el contrario, el boina blanca realiza en estos últimos días un rally por una veintena de distritos de las secciones Cuarta y Quinta. Todos tienen claro que el interior es el punto fuerte, pero que una baja cosecha en el Conurbano conspirará contra las pretensiones de triunfo. Y la estrategia, repiten, es barrio por barrio, calle por calle, casa por casa.
FIT UNIDAD Pico y pala para construir un camino con salida por izquierda
El Frente de Izquierda (FIT) Unidad atravesó un proceso de elecciones internas en las PASO tanto en la provincia de Buenos Aires como a nivel nacional. En este marco, la fórmula Rubén “Pollo” Sobrero - Natalia González Seligra se ganó el derecho de pelear por la Gobernación al vencer a la dupla Alejandro Bodart - Jimena Lettieri. Para la presidencial, Myriam Bregman - Nicolás del Caño derrotaron a Gabriel Solano - Vilma Ripoll. En territorio bonaerense -como también en todo el país- encararon una campaña austera, en la que desplegaron a toda su militancia para llevar a cabo un puerta a puerta con la sociedad.
Al mismo tiempo, su estrategia diseñada incluyó sus habituales intervenciones en conflictos sociales, ambientales y laborales en defensa de los intereses de los más vulnerados. En este marco se plantan como la alternativa a las tres fuerzas políticas que sacaron más votos en la provincia de Buenos Aires: Unión por la Patria, Juntos y La Libertad Avanza. Con más énfasis en polemizar con Javier Milei y sus controvertidas propuestas, también ponen el foco de sus duros cuestionamientos en la gestión del Gobierno actual como en las consecuencias que dejó la administración cambiemita de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal
ANIBAL URIOS, RESPONSABLE DE LA CONSULTORA DC El rumbo de los candidatos, bajo la óptica del análisis político
UNION POR LA PATRIA “Kicillof entendió que no era el momento para hablar de valores kirchneristas, sino de gestión. Fue inteligente, entendió que lo de los derechos, la derecha recalcitrante, a la gente no le llegaba. La gente quiere que le resuelvan los problemas. Yo lo veo fuerte, se sostiene, saben que el quilombo no es suyo. El no fue a buscar a Alberto, ni a Massa, y tampoco fue el que le levantó la mano a alguno de los dos”, dijo el analista. En referencia al peso del escándalo Insaurralde sostuvo que “la gente no se lo tiró a Axel, se lo tiró a Massa por la cabeza”. Sobre las expectativas electorales explicó que “mantendría los 30 y pico puntos de las PASO; no va a hacer una gran elección, pero lo ayuda que del otro lado no tenés pesos pesados, no tenés a una figura como Milei”.
JUNTOS POR EL CAMBIO En referencia a JxC, Urios expresó que “Grindetti no es tan parecido a Bullrich, ella es mujer y ganó la interna a alguien más pesado. Y él no era el mejor candidato del espacio, me parece que hoy hubiese sido mejor candidato Santilli, al que le ganó arañando”. En cuanto al postulante indicó que “no lo veo atacando los problemas que al bonaerense le molestan, como la inseguridad, el narcotráfico, las villas, las tomas; no lo veo batallando con eso. Me parece que desaprovechó la campaña. No creo que se caiga porque el que vota a Bullrich lo vota a él”.
LA LIBERTAD AVANZA “Píparo tiene suerte de estar en la boleta de Milei. Va a sacar un poquito más de votos, pero no es Milei, no tiene ni un perfil parecido. Tiene sus quilombos, no es alguien muy agradable ni genera empatía, tampoco tiene carisma. Tampoco puede hablar de la casta porque viene saltando de partido en partido. La gente no le termina de creer”, afirmó. Y añadió: “Un error fue hacer campaña abrazada a Milei, es un error porque el voto no se traslada. Por eso sacó 10 puntos. Igual va a subir un poquito, pero lejos. Yo creo que será tercera en octubre”.
FIT-U “A la izquierda no la ayudan los tiempos. Tienen un discurso viejo, no terminan de despegarse de una izquierda que ya se murió en el mundo. Son la izquierda del quilombo, de las cuatro frases. Y eso se ve en la provincia de Buenos Aires”, dijo Urios. “Electoralmente podría estar entre 5 y 8 puntos, o hasta un poquito menos. Tal vez agarren algún voto de alguien que vaya a votar enojado con los que están, que no quiera la boleta de Massa, ni de Milei ni de Bullrich”.