31 de octubre de 2023
ATENCION JUBILADOS
Jubilaciones e inflación: mientras el aumento de precios golpea, qué pasará en noviembre
La formula por movilidad augura un incremento de entre 21% y 24%, pero se espera que el impacto por la suba de precios se coma este aumento. Ante esta realidad, los bonos serían un paliativo.
El reajuste de las jubilaciones y pensiones del sistema general de la ANSES sería en diciembre de entre 21% y poco más de 24%, pero según la ly aprobada en 2020 el índice de movilidad jubilatoria está sujeto a un tope. La suba se ubicaría, así, unos 10 puntos porcentuales por debajo de la inflación del tercer trimestre del año, que fue de 34,65%.
Una particularidad que define lo que ocurre con los haberes previsionales en el último mes de cada año es que la ley actual, vigente desde 2021, prevé la eventual aplicación de un tope al porcentaje de la suba. Ese valor máximo está vinculado con la recaudación de impuestos y de aportes y contribuciones destinados al pago de las prestaciones, y es independiente de cómo le haya ido a los ingresos frente a la inflación.
Es decir, el sistema de actualizaciones establecido por el actual gobierno no garantiza un incremento piso para los ingresos en función de alguna variable (como podría ser la suba de precios), pero sí establece un porcentaje máximo anual. Si no se aplicara ese tope, y según las estimaciones, el aumento de diciembre rondaría entre 25% y 28%.
Lo cierto es que, con o sin tope, el reajuste por movilidad acumulado en 2023 se ubicará fuertemente por debajo de la inflación. Las recomposiciones otorgadas en marzo, junio y septiembre acumularon un 74,48%. Es decir, la suba total según el índice se ubicó 28,7 puntos porcentuales por debajo del aumento promedio de precios que, en los primeros nueve meses del año, fue de 103,2%.
Para todo 2023, las estimaciones indican que la inflación será de alrededor de 180%. Y los haberes jubilatorios reajustados por la fórmula tendrían una suba nominal, en caso de aplicarse el tope, de entre 111% y 117%. Así, la caída de poder de compra será superior al 20%.
Bonos paliativos
Más allá del porcentaje, la expectativa está también puesta en qué ocurrirá con la política de bonos que, desde hace más de un año, y a partir de insuficiencia de la fórmula de movilidad frente a la inflación, el Gobierno otorga a un grupo de jubilados y pensionados.
Actualmente, quienes tienen un ingreso que supera el haber mínimo, quedan al margen del cobro del adicional de $37.000 establecido para septiembre, octubre y noviembre. Por fuera de quienes tienen el ingreso básico, solo reciben un adicional los titulares de haberes brutos de hasta $124.460, y el refuerzo es en tales casos de un monto equivalente a lo necesario para llegar a esa cifra.
Qué pasa en noviembre
En noviembre, quienes tienen haberes de hasta $87.460 (incluyendo a quienes perciben pensiones no contributivas) cobrarán un bono de $37.000.
Los afiliados de PAMI con haberes de hasta $131.190 recibirán una ayuda de $15.000. Por otro lado, solo para quienes accedieron a su prestación sin moratoria rige la garantía de la ley 27.426, que indica que el haber (sin contar bonos) no puede ser inferior al 82% del salario mínimo, vital y móvil. Esto se traduce en que quienes tienen un haber bruto de hasta $119.720 recibirán un suplemento de hasta $32.260.
Para quienes este año recibieron el aumento de 74,48% (por movilidad) y no tuvieron bonos, la caída del poder de compra llegó en septiembre a más de 14%, y es superior aún en octubre y noviembre, ya que son meses en que no hay reajustes.