Déficit fiscal en Argentina: un problema frecuente que pocos gobiernos pudieron resolver

En tiempos donde la economía argentina es un gran inconveniente para el gobierno nacional, el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) lanzó un estudio de la historia reciente de nuestro país en torno al déficit fiscal y arrojó resultados poco alentadores.

Según IARAF, en solo seis de los últimos sesenta y dos años hubo superávit fiscal en la República Argentina. 

El período donde la economía estaba más estabilizada, fue durante la gestión de Néstor Kirchner y el primer gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, entre los años 2003 y 2009.

Desde 1961 a la fecha, la mayoría de los gobiernos no pudo provisionar estabilidad a variables macroeconómicas de vital importancia como los ingresos de la sociedad, los precios y el nivel de empleo.

En la historia reciente de nuestro país, en solo seis de los últimos sesenta y dos años el Sector Público Nacional obtuvo mayores ingresos que gastos. 

Esto implica que, en ese lapso de tiempo, “nunca se ha dado la oportunidad de generar fondos de ahorro genuinos para enfrentar momentos de crisis y mantener constante la provisión de bienes públicos”, según expresaron en el estudio.



Durante el último año de la gestión de Alberto Fernández, se registró un fuerte déficit fiscal en nuestro país, uno de los principales inconvenientes de nuestra economía. 

Según este informe, entre 2019 y 2021 se registró un déficit que rondó el 8.3%, número más alto desde el principio del gobierno de Raúl Alfonsín.

Sin embargo, no se asemeja a los números registrados durante los años previos de la última Dictadura Cívico-Militar, donde el déficit superó el 13.8%.

En ese sentido, el informe aconseja una serie de medidas para combatir el déficit y giran en torno a una política monetaria autónoma, un mercado de crédito sin presiones, una carga tributaria previsible y un bajo endeudamiento del sector público.