Salir a caminar, ir al gimnasio o tomar una clase de una disciplina power puede brindarnos mucha satisfacción; sin embargo existen otras prácticas que pueden colaborar con ese bienestar, y son las disciplinas energéticas.
A lo largo de la historia han desempeñado un papel muy importante en la búsqueda del equilibrio entre el cuerpo y la mente. Desde antiguas tradiciones orientales hasta enfoques contemporáneos, este tipo de prácticas busca armonizar y canalizar la energía vital que fluye en nuestro interior.
A diferencia del resto de las actividades físicas convencionales, que sólo buscan trabajar los músculos, las disciplinas energéticas pretenden lograr un bienestar integral. Esto no quiere decir que debemos abandonar esa rutina de crossfit o zumba strong, sino, más bien, complementarla con otra actividad que regule nuestra energía.
En este artículo descubriremos cómo el yoga, el tai chi y otras técnicas no sólo fomentan la flexibilidad y fortaleza física, sino que también promueven la serenidad mental y el bienestar emocional.