En un mano a mano con La Tecla, el intendente Fernando Gray analizó el escenario político y económico tras la asunción de Javier Milei. Sin pelos en la lengua habló sobre las dificultades y desafíos en su distrito, el presente del Justicialismo y la renovación partidaria.
-¿Cómo está viendo la actual coyuntura política y económica?
-Con mucha preocupación porque veo que se están tomando medidas que realmente son producto de la improvisación y de la falta de equipos de un gobierno que recién comienza y que tienen un impacto muy grande en la población. Hay cuestiones como tarifas de gas, de luz, de transporte y se vienen las de agua y cloacas que realmente me preocupan muchísimo como intendente.
-Sobre los efectos de las medidas que está tomando el gobierno nacional y llevándolo a lo político, ¿Qué responsabilidades tuvo la gestión anterior?
-Este es un replanteo que tenemos que hacer dentro de nuestro espacio político, en el frente del cual integro y en nuestro partido. Yo creo que acá hay responsabilidades compartidas. Todos los que integramos este espacio las tenemos, pero diferenciadas. Indudablemente acá hay gente que tiene más responsabilidad que otra, así como muchos militantes. Esa es una reflexión y una autocrítica interna que tenemos que hacer y que no se ha dado. Y ojalá se dé porque no veo mucho ánimo de quienes deberían hacerla. Empezando por los presidentes de los partidos a nivel nacional y de la provincia de Buenos Aires. Es más, el Partido Justicialista bonaerense se reunió después de cinco meses, así que está prácticamente en un estado de acefalía frente a cosas tan graves como las que están pasando en nuestro país, como el intento de la ley ómnibus, como la quita de derechos todo el tiempo, y las cosas gravísimas que están sucediendo y que repercuten en la provincia de Buenos Aires, entre ellas el tema de subsidios al transporte, de los servicios públicos, de la obra pública que son realmente estructurales de un país y que yo creo que nuestro partido no está a la altura de las circunstancias.
-Mencionó que el partido estaba en un estado de acefalía. Y usted había pedido la renuncia de las autoridades del PJ a nivel nacional y provincial. ¿Ve hoy en día esa posibilidad de renovación?
-El peronismo se va a renovar si dan un paso al costado porque después de cada crisis vuelve a fortalecerse. Lo que yo pedí fueron gestos de grandeza, pedí que hicieran lo que hizo Néstor Kirchner, cuando perdimos en el 2009 y al otro día presentó la renuncia. Quizá fue demasiado, pero Néstor había uno solo y es lo que tenemos. Y esta es la realidad con la cual nos manejamos. Y la verdad es que el peronismo se va a recomponer, se va a renovar y va a renacer.
Ahora, bueno, indudablemente hay dirigentes que no están dispuestos a dar un paso al costado y no se dan por aludidos de gran parte de los problemas que tuvo el gobierno anterior, que fue una tensión permanente entre quienes gobernaban y los que estaban dentro del mismo gobierno y que tironeaban todo el mundo y tensionaban todo el tiempo. Eso nos llevó a ser un gobierno que no logró satisfacer las demandas de la población y tener buenos resultados, y perdimos la elección.
Bueno, los responsables de eso, fueron por un lado el expresidente de la nación, que no supo poner las cosas en su lugar, que no supo ordenar el espacio y por otro lado, la agrupación La Cámpora, que estaba presionando el mismo gobierno que habían puesto y todos nosotros habíamos votado. Pero ninguno de los dos sectores ahora se hace responsable de la situación.
Conclusión de esto, los perjudicados son millones de argentinos y argentinas que estamos padeciendo este gobierno y nuestro partido y nuestro espacio que pierde volumen político por estas desafortunadas cuestiones. Pero bueno, confío en el peronismo, en la base, en la reconfiguración y que vamos a realmente poder salir después de una crisis como la que tenemos en este momento. El peronismo está en crisis de representación. Porque quienes formalmente están a cargo de la estructura partidaria no representan a la gran extensión que es el peronismo, fundamentalmente nuestra provincia de Buenos Aires. Entonces hay una gran porción del electorado y de la militancia que no se siente representada.
-¿Y quién debería encabezar o encarar esa renovación para que el peronismo vuelva a ser representativo?
-Yo no soy quién. Doy mi opinión como militante, ni siquiera como dirigente. Sí, quienes no deberían encabezarla es quienes nos han llevado al fracaso. Y sabemos quiénes nos han llevado al fracaso. Así que no deberían estar al frente de la etapa que viene. -Dijo que iba a presentar su corriente interna dentro del peronismo. ¿Cómo está eso? -Trabajando muchísimo. Estoy abriendo unas oficinas y me estoy organizando con nuestros equipos. La verdad que sí, veo que hay un campo nacional y popular, inclusive más allá del peronismo, que realmente tiene muchas ganas de trabajar seriamente con responsabilidad, que quieren una provincia mejor, que tienen ilusiones con nuestro país, y quieren que estemos a la altura de las circunstancias. Así que voy a trabajar en ese sentido.
ROLES
“A Kicillof no lo veo con vocación de liderar el Partido Justicialista“
-En la etapa de renovación del peronismo, ¿qué rol deberían o tendrían que jugar los intendentes?
-Como lo hacemos siempre, de máxima responsabilidad, porque los intendentes somos los que atendemos la enorme cantidad de demandas territoriales. Creo que tenemos que estar más presentes que nunca. La gente nos apoyó y nos sigue apoyando, porque cuando elige un intendente sabe muy bien a quién. En las comunidades, por más grandes que sean, nos conocemos y tenemos referencias y yo confío en esa gobernanza local. Ahora eso no basta para un proyecto. Eso es una parte de un proyecto que tiene que ser transformador de una provincia y de un país. Hay que empezar a darle forma y volumen político a un frente que tiene que renovarse, que tiene que ampliarse, que tiene que abrir su base. Hay más gente afuera que adentro y hay que ver qué es lo que pasa con los que se fueron, con los desencantados, con los desilusionados y ese es el enorme trabajo que tenemos que hacer.
-¿Y a Axel Kicillof ?
-Esa es una decisión política del gobernador. Yo no lo veo con vocación de liderar el Partido Justicialista. Pero esa es una decisión que tendrá que tomar él. Sí lo veo ahí con algunas cuestiones con Máximo Kirchner y con tironeos con algunos otros sectores. Y esos tironeos tampoco son buenos para los bonaerenses. Porque eso es lo que nos llevó al fracaso nacional y espero que se ordenen en la provincia de Buenos Aires porque si no, si va a pasar lo mismo que en la nación y vamos a tener severas dificultades de gestión. Así que yo espero realmente que el gobernador sepa ordenar eso porque quien lo debió ordenar a nivel nacional fue el expresidente. Y quien debe ordenar esto a nivel provincial es el gobernador. Yo la verdad espero que esta etapa sea distinta. Yo confié mucho en este gobernador que esas reformas las iba a hacer. Así que espero que en esta segunda etapa de gestión las haga. Me refiero en seguridad, el tema de seguridad no podemos estar toda la vida hablando, charlando, comentando y viendo noticias que nos ponen muy mal por todos los medios.
A LA JUSTICIA
“La Cámpora entró por asalto y por la ventana a apropiarse del Partido”
-¿Cómo ha quedado la situación cuando usted fue a la justicia respecto a lo que era la conducción del Justicialismo bonaerense?
-Yo discutí y discuto la forma en que eligieron las autoridades del partido justicia. Porque entró La Cámpora por asalto y por la ventana a apropiarse del Partido Justicialista donde ni siquiera hicieron internas. Me dijeron que fuera a la justicia y fui a la justicia. Senté el primer precedente de un reclamo de índole político partidario de una interna que llegó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación. No hay antecedentes de haber llegado con un reclamo de esta naturaleza. Para llegar allí, la Cámara Nacional Electoral, determinó que había un caso de gravedad institucional que ameritaba que esa cuestión la viese la Corte y será quien determine o no, pero ya la Cámara me ha dicho que hay un caso de gravedad institucional, por eso yo estoy en la Corte Suprema. Lo que yo quiero es que mi partido sea respetado. Que se respete mi partido, que se respete a Perón, que se respete a Eva Perón, que se respeten nuestras banderas, que se respeten nuestros más de 70 años de historia. Y veo que no se ha respetado eso. Que no se han respetado las formas, que no se han respetado los dirigentes, que han pasado un montón de cosas que tristemente nos han llevado a esta derrota. Así que bueno, será la Corte, pero fundamentalmente la voz de los militantes y del peronismo, del verdadero pueblo peronista, el que va a tener la última palabra.
-¿Esto debería ser una autocrítica?
-Sí, yo no quiero personalizarlo en mi, pero esto de andar a los empujones y andar con prepotencia. La verdad que no es la forma de conducir y menos cuando se gobierna. La verdad que quienes actuaron de esta manera deberían rever sus formas porque la verdad que no les ha ido bien ni a ellos ni al conjunto.
DIA A DIA
La administración municipal en tiempos complejos
-¿Cómo han paliado desde el municipio las consecuencias de la actual coyuntura?
-Y poniéndole el cuerpo desde el municipio, con la ayuda provincial en algunos casos, sin ayuda nacional, con grandes dificultades, para comprar insumos, porque hay una severa distorsión de precios, donde por ejemplo hay elementos como chapas, donde ni siquiera cotizan las grandes empresas fabricantes. También hay problemas el abastecimiento de determinados recursos médicos, donde hay problemas para la provisión de alimentos. Es un momento complejo del país. Estamos poniendo todos nuestros equipos, reestructurando nuestro municipio, estando en primera persona sobre las cuestiones estructurales, porque realmente es un momento complejo para la población y para las gestiones locales.
-Y con estas acciones que han llevado adelante, ¿hay algún área que han dejado, de atender o darle prioridad sobre otras?
-Nos hemos enfocado la gestión en las áreas estructurales que tienen que ver básicamente con seguridad, desarrollo social y salud, fundamentalmente donde nuestro sistema es 100% municipal y con apoyo de un hospital del Bicentenario, que es un hospital SAMIC. El resto de las áreas, como la obra pública, está paralizada. Sí, tratamos de mantener los servicios y el resto de las áreas que son importantes para un municipio como el nuestro, como son medio ambiente, como cultura. Pero, las elementales, en momentos de crisis como este, le hemos puesto la mayor cantidad de recursos. Ahora, dichos recursos son finitos para una tamaña crisis, con un deterioro permanente, donde hay familias que caen en la pobreza a diario.
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