En sintonía con los fuertes discursos de Javier Milei y Axel Kicillof en el Congreso nacional y la Legislatura Bonaerense respectivamente, en 25 de Mayo el intendente Ramiro Egüen inauguró el período de sesiones ordinario con un discurso muy polémico con muchas perlitas.
Si bien anunció que realizará obras que quedaron pendientes de la gestión anterior, “con o sin ayuda de la Provincia”, el representante del GEN le hizo un regalo a toda la bancada de Unión por la Patria, donde les obsequió herramientas para que se “pongan a laburar”. Esta situación desató un escándalo de gritos en el recinto, donde varios ediles peronistas abandonaron sus bancas.
En el fragmento más picante de su discurso, el alcalde aseguró: "La oposición ahora quiere marcar la agenda por eso le traje siete zapines de regalo para que vayan a laburar”.
En ese sentido, cuestionó la “herencia” que recibió de la gestión de Ralinqueo, además de confirmar que realizará acciones judiciales: “Observamos irregularidades en obra pública, desvío de fondos afectados, pago de pensiones a personas fallecidas, vehículos asegurados que no estaban funcionando".
"Todo lo que se ha detectado en la auditoría de lo heredado de la gestión anterior, que aún continua, será llevado a la Justicia para que los responsables sean enjuiciados por no haber cumplido los deberes de funcionario público y por la malversación de fondos que ya ha quedado acreditada”.
Allí cuestionó nuevamente al exalcalde, actual funcionario del gobierno de Axel Kicillof: “Llevamos 84 días de gestión y si bien he escuchado que no debemos mirar el pasado y dedicarnos a gobernar, sepan que lo estamos haciendo desde el minuto cero, que no tuvimos la transición deseada, lo cual nos hubiera facilitado las cosas”.
“Pero nos encontramos con palos en la rueda de quienes por estos días nos piden que gobernemos como si lo hubieran hecho con responsabilidad, esa que declaman pero que no ejercieron en su debido tiempo”, sostuvo el intendente.
Aseguró que recibió un “municipio quebrado, sin dinero, con deudas y obras iniciadas”. Además, advirtió que hay fondos por parte del gobierno nacional y provincial que ya fueron girados, pero que “no están las cuentas de la Comuna”.
En sintonía con el discurso del presidente Javier Milei, detalló la realidad de los trabajadores municipales y las irregularidades en la planta: “Había personas contratadas que no sabían que lo eran y se anoticiaron cuando recibieron la notificación de que no se les renovaría el contrato”.
En otro pasaje de sus palabras, aseguró que “había empleados municipales que robaban combustible que fueron denunciados y fueron desafectados”. “El inventario recibido no coincide con la realidad, porque hay bienes patrimoniados que no logramos encontrarlos, y otros existentes que no están en el Patrimonio”, detalló.
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