Massa y el Ejecutivo provincial, acuerdo en stand by por una silla que permanece vacía
Kicillof espera que el líder del Frente Renovador le acerque el nombre de quién se hará cargo del Grupo Bapro. El tigrense demora y en el Gobierno dicen que respetarán el acuerdo alcanzado en diciembre.
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Sergio Massa chicaneó, hace unas semanas, al ministro de Infraestructura de la Provincia, Gabriel Katopodis, comparándolo con un mítico personaje de Tom Hanks, por la aceleración que el funcionario le quiere dar a la obra pública y que contrasta con las dificultades financiera que le hacen poner un freno obligado. “Dejá de correr Forrest”, le dijo Massa, invitándolo a que sosiegue sus ímpetus, pare la pelota y después sí, con el panorama más claro, impulse la gestión sobre un terreno firme. Esa lógica es la que, contrariamente a su derrotero político, el tigrense parece estar aplicando hacia el interior de su espacio y en las negociaciones con el Gobernador. Es que Massa procrastina definiciones clave y nadie sabe a ciencia cierta muy bien por qué.
Lo que está claro es que tampoco avanzaría en momentos en los que la sísmica interna del peronismo dejó de moverse bajo tierra y se expone a cielo abierto. “Sergio es táctico cien por ciento”, asegura un dirigente que lo conoce de la política y de compartir mesas de truco. Dentro de esa lógica habrá que encuadrar la demora que el exministro de Economía de la Nación se ha tomado para designar funcionarios de su espacio que tienen lugar reservado en el Gobierno bonaerense. Puntualmente, en el Grupo Provincia y las empresas que dependen de ese holding asociado a la entidad financiera provincial.
Como ya es harto sabido, en los últimos días de diciembre, Massa acordó con Kicillof que Malena Galmarini presida el Grupo Provincia, pero la extitular de AySA se negó y abrió un foco de conflicto tanto hacia afuera como al interior del Frente Renovador. Malena dijo “no”, pero el massismo conserva por el momento la reserva de cargo y debe acercar el nombre para que el Grupo vuelva a tener autoridades.
“Axel va a respetar los acuerdos y los lugares de cada uno”, se cansan de repetir en el entorno del mandatario, donde aseguran que “debe tener una charla con Sergio para cerrar el tema”. Massa y Kicillof han hablado en los últimos días, pero no de ese asunto al parecer; o al menos eso es lo que se deja trascender desde los dos espacios. “Massa todavía no resolvió a quien poner en el Grupo Provincia. Ni siquiera hay nombres dando vueltas. No es un problema de Axel, es un tema que tiene que resolver Sergio, porque el lugar sigue guardado para el Frente Renovador”, repitió ante La Tecla una fuente del Ejecutivo.
En el massismo, en tanto, se muestran un tanto distantes y renuentes para hablar del asunto. Aseveran que no es un tema que esté en el radar de estos días, y hasta algunos ven como caída la posibilidad de que alguien del Frente Renovador finamente sea quien reemplace a Gustavo Menéndez, quien presidió el holding hasta que asumió nuevamente como intendente de Merlo, el 10 de diciembre. Si finalmente el espacio conducido por el tigrense desiste de ocupar esa silla será una nueva demostración que las grietas internas provocadas por el sismo post electoral son más profundas y ya imposibles de disimular.
Hasta ahora, Massa hace equilibrio entre Kicillof y Máximo Kirchner, y ha sabido sobrellevar sin exponerlo demasiado su enojo con los dos, porque le sigue pareciendo poco lo que le dieron a su núcleo político después de haber sido el candidato a presidente de Unión por la Patria. Si rompe ese equilibrio con desplantes a los ofrecimientos del Gobernador habrá dejado de ocultar la bronca para empezar a surfear las aguas de la venganza. En el Gobierno esperan que la cosa no llegue a tanto y finalmente Sergio acerque el nombre que se sentará al mando del conglomerado de empresas.
Lo que también se sabe es que, además, hay una disputa por resolver acerca de quien se queda al mando de los directorios de Provincia ART, Provincia Seguros y Provincia Vida, las compañías que integran el holding. Massa quiere quedarse con todo, Kicillof se aferra a que esos lugares los tenían otros espacios y busca aplicar la máxima de “respetar los acuerdos y los lugares de cada uno”.
Mientras tanto, las resoluciones que tienen que ver con el Grupo y las empresas se deciden en el directorio del Banco Provincia.
Por ahora sigue en pie la próxima designación de Martín Marinucci al frente de Aubasa cuando se haga la asamblea anual en junio. El ingreso del exresponsable de Trenes a la empresa de las autopistas estaba dentro del acuerdo entre Massa y Kicillof, pero su designación se demoró, arrastrada por la indefinición del Grupo Provincia. Entonces, y otra vez por las postergaciones del exministro de Alberto Fernández y ante la inminencia de las audiencias públicas para redeterminar los precios de los peajes se designó interinamente a Guillermo Sauro.
Massa no corre como Forrest, pero a muchos empieza a preocuparle que tampoco arranque como si fuera Manuelita. Pero tratándose de Sergio aplica “es la estrategia, estúpido”.