El ex arzobispo de La Plata fue designado como Párroco en Mar de Ajó
El ex-Obispo de Mar del Plata, Gabriel Mestre, desembarcará de otra vez en la costa atlántica. Prestará servicios en la parroquia "Nuestra Señora de Fátima".
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A casi 4 meses de su salida del arzobispado platense, Gabriel Mestre fue designado como Párroco en la localidad costera de Mar de Ajo. El marplatense, que se desempeñó durante varios años como Obispo en "La Feliz", asumirá el próximo 26 de septiembre a las 18.
En la designación se detalló "la necesidad de proveer la atención pastoral de la Parroquia 'Nuestra Señora de Fátima' de la ciudad de Mar de Ajó, Provincia de Buenos Aires" y añadieron: "Contando con el nulla obata de parte del Dicasterio para los Obispos".
Luego, señalaron: "Considerando que S.R.R. Mons. Gabriel Mestre aceptó la propuesta que le hiciera oportunamente de residir en la Diócesis y brindar un servicio pastoral".
El 9 de septiembre de 2023, Mestre se despedía de la Diócesis de Mar del Plata tras seis año como Obispo. A la postre, el primero nacido en la ciudad. El motivo fue un llamado del Papa Francisco que le encomendaba una nueva comunidad: la Archidiócesis de La Plata. Luego, casi nueves meses después, el Santo Padre le pidió la renuncia al cargo, que Mestre efectivizó este lunes junto con un comunicado.
La noticia sorprendió pero no dentro del mundillo eclesial marplatense. Los ruidos en la comunidad de "La Feliz" aparecieron en torno a las sucesión del clérigo. El reemplazante interino fue Luis Albóniga, hombre de confianza de Mestre elegido por el Colegio de Consultores. En los meses siguientes dos Obispos electos para hacerse cargo de la diócesis se bajaron aunque por motivos bien distintos.
José Maria Baliña fue el primer designado pero renunció por motivos de salud. Debían realizarse una operación de los ojos. Algunas fuentes sindican, a su vez, que cursaba una depresión. El segundo caso levantó mucha más polvareda. Moseñor Larrazabal, que se desempeñaba en San Juan, iba a arribar en enero a "La Feliz" pero el run run en torno a una denuncia de abuso de poder de una marplatense truncó la elección.
La recomendación de Albóniga para la denunciante habría sido elevar la acusación a la nunciatura, un estadío superior dentro de la organización católica. Al estilo eclesial, en las sombras y sin demasiada explicaciones, Albóniga fue eyectado de la comuna. Su destino fue Jujuy en lo que parecía un fuerte mensaje interno.
En la investigación interna se le indilga a Albóniga el accionar en torno a la denuncia y otras supuestas irregularidades. Algunos actores creen que podrían haber un transofondo aún mayor en torno al tema.
Desde el Vaticano sospechaban de una operación elucubrada entre Mestre y un multimedios de la ciudad para obstaculizar cualquier reemplazante foraneo a la diócesis y dejar a Albóniga como responsable.
La jugada política, que la Santa Sede le sindica a Mestre, habría sido el detonante que llevó a la eyección del ahora ex-Arzobispo.