Un fallo judicial autorizó a reactivar la megaferia. Ahora funcionará bajo reglas más estrictas. No se cobrará en efectivo.
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Gracias a un fallo judicial, la megaferia La Salada podrá volver a funcionar, sólo que ahora con una serie de reglas más estrictas, y no se podrá pagar en efectivo.
El juez Luis Armella dictaminó que las tres ferias instaladas en el predio de La Salada que había sido clausurado tras la detención de su principal referente, Jorge Castillo, por lavado de dinero, asociación ilícita y evasión fiscal, podrán reabrir, pero ahora con un registro estricto de todos los puestos que funcionen y con la instalación de sistemas de cobro con tarjeta, que tendrán que usar en forma exclusiva.
Ocurre que La Salada, además de ser señalada por la violación de derechos de propiedad intelectual por la venta de artículos con marcas no autorizadas, también era apuntada como una fuente de evasión impositiva debido a los cobros informales.
Las tres ferias que componen La Salada (Urkupiña, Ocean y Punta Mogotes) conforman el conglomerado de su tipo más grande de América del Sur.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, impulsaba la reapertura de la megaferia, a pesar de que Castillo y sus socios continúan presos, en atención a los miles de fuentes de trabajo afectadas.
Además de Castillo, fueron detenidos Aldo Presa y Antonio Corrillo Torrez, en tanto que un cuarto acusado, Enrique Antequera, permanece prófugo.
