9 de diciembre de 2010
PALITO EN LA RUEDA
Covelia y los sueños rotos del country en Lomas
La Cámara de Diputados bonaerense le dio media sanción a una ley que protege al predio “Santa Catalina” en donde la empresa encargada de recolectar los residuos, vinculada al Camionero Hugo Moyano, pensaba levantar un barrio cerrado. “Tienen que aceptar lo que dice la norma, sino vendrá la expropiación”, amenazan desde la Legislatura. La UNLP había vendido los terrenos por 32 millones de pesos
La media sanción que la Cámara de Diputados bonaerense le dio al proyecto que busca declarar como “Reserva Natural” al predio de Santa Catalina, produjo que se cayeran todas las posibilidades de que Covelia, la empresa recolectora de residuos que preocupa a los intendentes, ingrese en el negocio inmobiliario, incorporando un nuevo rubro a su vitrina.
Santa Catalina es uno de los últimos pulmones verdes del Conurbano y también un botín preciado para las constructoras. Ubicado en el límite entre Lomas de Zamora y Esteban Echeverría, el predio de 700 hectáreas pertenece a la Universidad Nacional de La Plata –tiene su sede la Facultad de Ciencias Agrarias- aunque también funciona allí la Universidad Nacional de Lomas de Zamora.
El reclamo por su conservación viene de larga data pero el conflicto se agudizó a partir de 2008, cuando la UNLP vendió a Covelia unas 300 hectáreas por 32 millones de pesos, incluida su Laguna.
El destino del predio incluía posibilidades varias, desde la construcción de un barrio cerrado hasta la instalación de una planta de tratamiento de residuos “de última generación”, según decía un ex intendente.
Al mismo tiempo, las asambleas vecinales denunciaban golpizas por parte de patotas oficialistas. En este marco, los intentos de toma del terreno también comenzaron a ser moneda corriente.
Oposición y oficialismo se pusieron al fin de acuerdo e instruyeron a sus diputados provinciales para que avancen en la sanción de una ley para declarar como “Reserva Natural” al lugar, incluidas las hectáreas que son de Covelia.
Así, el kirchnerismo, el peronismo federal, la Coalición Cívica y el Gen impulsaron el proyecto que la semana pasada tuvo media sanción en la Cámara Baja y que se descuenta que será aprobado en el Senado.
La ley, que reconoce a los dueños de las tierras y les mantiene su propiedad, prohíbe cualquier tipo de construcción que afecte al ecosistema e insta al Organismo Provincial para el Desarrollo Sustentable (OPDS) a que controle que la normativa sea cumplida.
La gran pregunta que se hacen los ambientalistas – y también desde el poder político- es si Covelia –lo que equivaldría a decir “Moyano”- se quedará de brazos cruzados.
“Covelia tiene que aceptar lo que dice la Ley. Tenemos con qué presionar, los documentos que avalan la venta son muy dudosos. Si bien la Justicia no hizo nada, hay mucho para aportar. Y si no, queda otro camino más directo y es la expropiación”, apunta un legislador provincial.