4 de enero de 2011
SEGURIDAD
Los federales atinan a la desarticulación estatal
Desde la fuerza disidente cargaron contra la problemática que continúa haciendo mella social y política. Según advirtieron, la Nación "va hacia un lado y Provincia hacia otro". Críticas posturas que apuntan a la falta de planificación y coordinación a la hora de enfrentar la ola de inseguridad
El Peronismo Federal volvió al ruedo en tiempos donde la temperatura aumenta conjuntamente con los cruces políticos entre las fuerzas opositoras entre sí.
En este caso, el espacio disidente cargó contra los gobiernos de Nación y Provincia por no logran prevenir ni contener la escalada delictiva.
Los federales hacen centro directamente en la falta de articulación estatal en lo que refiere a la planificación de políticas destinadas al control de una realidad que ha tomado un camino ascendente a todo nivel.
“Descreemos de la coordinación cuando vemos que tiene que salir un ministro nacional a informar que ante la sospecha de que estuviera involucrada la policía de Buenos Aires en el ataque a gendarmes y no se haya escuchado una palabra del ministro Casal ni de Scioli”, sostuvo en declaraciones la legisladora nacional, Natalia Gambaro.
En ese sentido, aclaró que “se están tomando medidas inconsultas, como el envío de gendarmes”, y enfatizó que “se está avanzando sobre la política de la Provincia sin consulta del gobierno provincial”, aludiendo a una bajada vertical desde la órbita nacional.
“Las conferencias de prensa se dan de forma individual, las medidas se anuncian desde una sola parte; estamos viendo que en Nación va hacia un lado y en Provincia hacia otro”, disparó la legisladora.
Las críticas contra las gestiones se acumulan y el costo político comenzó a pagarse a escala nacional con el descabezamiento de la Federal y la salida de funcionarios cercanos a Aníbal Fernández que manejaban áreas de la Seguridad.
Además, se ha desatado una crisis interna, antes solapada, entre la cercana a Cristina Fernández, Nilda Garré, y el alfil quilmeño de Néstor Kirchner, que poco a poco ve desvanecer su propio poder, más allá que entre ayer y hoy haya salido a desmentir su pérdida de peso o su renuncia a la Jefatura de Gabinete.
En Provincia, la coyuntura para nada es disímil. Nuevos sucesos trágicos en la Costa Atlántica, muestran a una gestión ausente corriendo detrás de los hechos consumados.