19 de abril de 2011
BERAZATEGUI
Cables pelados y amenazas de represión
Otro episodio de tensión tuvo lugar en la subestación Rigolleau, donde los autoconvocados continúan el rechazo a la instalación de un cableado eléctrico en lo que afirman es el casco urbano. La potencial peligrosidad contaminante es la principal imputación. Según acercó un concejal del distrito a LaTecla.info, las advertencias de desalojo por la fuerza bajan “desde arriba”. Vacío de respuestas en el poder municipal entre forcejeos e insultos
Sigue el avispero movido en las tierras de la Tercera, más precisamente en el municipio de Berazategui manejado por hoy Juan Patricio Mussi, hijo del hoy funcionario nacional de Medio Ambiente y ex intendente.
La subestación Rigolleau continúa dividiendo las aguas en el distrito ya que los autoconvocados mantienen su férrea postura de no ceder ante la posible instalación del cableado eléctrico en la zona del caso urbano.
El predio, establecido hace ya seis años por Edesur, genera la preocupación de la población aledaña, que teme una posible contaminación ante el tendido subterráneo de alta tensión y la emisión de campos electromagnéticos.
Durante la madrugada de ayer 3 de la madrugada, cientos de oficiales de la Policía y de Infantería acudieron al lugar para custodiar el trabajo de los operarios de la empresa concesionaria y asegurar el orden.
Al mismo tiempo, también se acercaron varios grupos vecinos que se pronunciaron a favor del cese de las obras, algo que generó aún más fricciones, con presuntos insultos, golpes y forcejeos. Todo se exacerbó cuando bajó la autoridad judicial de la Fiscalía Tercera a cargo que exhortó a ponerle coto a la protesta.
Según apuntan, alrededor de 350 agentes de seguridad se apostaron para contener a poco más de 100 vecinos.
La lucha entre los autoconvocados y el distrito en contra de la Subestación Rigolleau instalada en el centro del conurbano de Berazategui lleva ya seis años. Hace poco, el fallo del juez Adolfo Gabino Ziulú determinó que “sí o sí” había que seguir con las obras.
“El fallo del juez establece que los voltios que se emiten no son cancerígenos, amparándose en una legislación argentina que es obsoleta, ya que en todas partes del mundo se permiten 3 microteslas -unidad de medición electromagnética-, y en Argentina hasta 25”, recalcan los Autoconvocados.
Si uno va y pide respuestas al municipio nadie da la cara, siempre pasa lo mismo y acá puede haber represeión”, aclara a LaTecla.info, la edil de la CC-ARI, Ana María Cioch.