1 de septiembre de 2011
CANDIDATOS FAMILIARES
La eterna vigencia del apellido
Siguiendo la línea de padres, tíos, primos o cónyuges, muchos candidatos bonaerenses se sometieron a las urnas el 14 de agosto poniendo a prueba el vigor de sus apellidos. Cómo les fue a los postulantes que cargan con abolengo político
En las primarias internas, abiertas y simultáneas, las elecciones sirvieron para ver qué humor social existe en los distintos estamentos del Estado y qué definiciones políticas el ciudadano aprueba y cuáles no. Evidentemente, y más allá de los argumentos de la oposición y el periodismo, el votante no se preocupa mucho por “los valores republicanos” o “el ordenamiento democrático” al interior de los partidos políticos. Esas eran algunas de las quejas presentes en el cacerolazo de 2001, cuando pedíamos que se fueran todos.
A diez años, aquellas exigencias radicalizadas suenan a anécdota, y costumbres políticas como las sucesiones por lazo de sangre siguen presentes. En las primarias del 14 de agosto varios distritos bonaerenses fueron escenario de pseudos plebiscitos donde dirigentes históricos pusieron a prueba sus nombres en el cuerpo de alguno de sus familiares.
General San Martín, con los Ivoskus; San Nicolás, con los Díaz Bancalari; o Berazategui, con los Mussi pusieron a prueba este viejo dispositivo político, que no es exclusivo de ningún partido ni de ninguna época.
En un análisis a trazo grueso, el resultado no fue el más auspicioso para los familiares de referentes políticos. Si bien, en casos como el de Daniel Ivoskus, el triunfo fue logrado, los números no tuvieron la holgura con la que asumió el cargo su padre. Y podríamos arriesgar que ni siquiera fueron los que él mismo esperaba. Así también, Mónica Forastieri, esposa del intendente Hugo Pablo Oreja, no pudo superar siquiera la interna del Frente para la Victoria y no podrá competir en octubre para suceder a su marido.
Distinta fue la suerte de otros candidatos con linaje político. Juan Patricio Mussi, por ejemplo, superó el 54 por ciento de los votos en el distrito donde su padre es amo y señor: Berazategui. En San Nicolás, en tanto, el apellido Díaz Bancalari hizo regir su peso. Gustavo, el sobrino del diputado nacional José María Díaz Bancalari, ganó la interna partidaria del distrito y quedó a poco menos de seis puntos de Ismael Passaglia, ganador de las primarias con poco más del 22 por ciento de los votos.
Casos extraños los hay también, como el de los Denuchi. Padre e hijo compitieron en José C. Paz, aunque sólo uno estará en octubre: Juan Carlos hijo, quien será el representante de Udeso en la comuna.
Tras la prueba de agosto, las previsiones pueden ser muchas, pero la presencia de los apellidos tradicionales de cada distrito será algo seguro.
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