8 de febrero de 2013
MANO A MANO CON LA TECLA
Longobardi: "el kirchnerismo es una secta"
Instalado en el dial de Mitre, Marcelo Longobardi aún no encuentra razones para su salida de radio 10. En diálogo con La Tecla dice que el kirchnerismo es un fenómeno financiero, y que Scioli es el más presidenciable del PJ
Desde el micrófono de Mitre, Marcelo Longobardi volvió al aire mañanero, y espera que el liderazgo que tuvo durante trece años en radio 10 se prolongue en el tiempo. El conductor dialogó con La Tecla sobre su nueva casa, su salida de la anterior emisora, la presidenta de la Nación y el gobernador Scioli.
-¿Cómo fueron sus primeras horas en radio Mitre?
-Nosotros estuvimos en una misma radio trece años, no es que cambiamos de emisora cada dos años; por lo tanto, el cambio es muy brusco. Son demasiados años de un ámbito determinado. La radio es mucha rutina, porque cuesta la adaptación, porque es todo distinto.
-Se dijo que su salida de radio 10 se debió a una cuestión política. ¿Fue así?
-Yo nunca dije que me fui de esa radio por una cuestión política, eso fue lo que se comentó en el espectro mediático. Cuando me fui de esa emisora agradecí por todo lo que me brindaron mientras estuve allí.
-Si no fue por cuestiones políticas, ¿qué sentido tenía sacar del aire al programa más escuchado?
-La verdad que no sé. Levantar del aire el programa que lideró las mañanas de la radio durante trece años debe de haber sido por varios factores. Que la política jugó un papel, puede ser. Que el programa no era bien visto por el Gobierno, eso es seguro. Es raro que siendo líder me despidieran. Lo que ellos me dijeron es que buscaban una opción más competitiva (risas); raro, porque nosotros lideramos las mañanas durante trece años.
-Haciendo la ecuación Gobierno nacional más Cristóbal López, ¿da por resultado Longobardi afuera?
-Si el Gobierno lo pidió, o si los dueños se lo ofrecieron, o una combinación de varias cosas, puede ser. O si los dueños querían otro tipo de programa con otros temas, también puede ser. Hoy, la razón por la cual me echaron me importa poco.
-Cuando se hablaba de que Hadad iba a vender la radio, ¿veía venir un final así?
-En el fondo, nosotros no quisimos ver que se terminaba. Durante la transición que duró la transferencia de la radio a sus nuevos dueños pensamos que todo iba a seguir igual, pero nos equivocamos. Pero, ojo, los dueños tienen derecho a poner a quienes quieran. Yo, por suerte, tenía ofertas de todas las radios.
-Yendo a la política, ¿sigue pensando que Néstor Kirchner construyó un proyecto con el 22 por ciento de los votos y que Cristina lo está destruyendo con el 54 por ciento?
-Sí, claro; además, no es una postura, es un hecho. El kirchnerismo es una secta, no un gobierno. Néstor Kirchner, con todos su defectos, había armado una especie de proyecto un poco más amplio, más abierto.
-Entrevistó a Néstor Kirchner, y solía hablar con él, ¿cómo era?
-Era un tipo difícil para tratar, porque tenía unos modos horribles, pero, al contrario de Cristina, hablaba, te contactaba, negociaba, discutía. Se peleaba conmigo casi siempre. Me ha llegado a llamar por teléfono para putearme. Tenía reacciones humanas, por lo menos; éstos que están hoy parecen marcianos. Puedo decir esto porque, como personaje de la política, lo conocí muy bien.
-¿Qué piensa de Scioli? ¿Cómo analiza la gestión?
-Me parece que Daniel Scioli es el candidato presidencial más relevante del justicialismo. No la tiene fácil, porque al Gobierno nacional lo tiene en contra, y eso le complica la gobernabilidad. Ya de por sí la provincia de Buenos Aires es complicada, pero estos factores ajenos le complican aún más la gestión.
-Según las encuestas, Scioli es el que mejor mide, pero el kirchnerismo no lo acepta en sus filas...
-El kirchnerismo ya ha declarado formalmente que Daniel Scioli no es la persona adecuada para que continúe con el proyecto, aunque, realmente, no sé de qué se trata el proyecto K.
-¿El estancamiento de Cristina en los sondeos de opinión puede jugar a favor del Gobernador?
-Puede ser, pero lo que pasa es que el Gobierno va a hacerle la vida imposible a Daniel Scioli. Hay que ver qué pasa en las elecciones de octubre. No va a ser fácil la convivencia para ninguno de los dos. A Daniel se le va a hacer difícil convivir con el kirchnerismo, y al kirchnerismo se le va a hacer difícil aceptar a Daniel.
-Hoy, desde todas las agrupaciones K le tiran a matar a Scioli.
-El Gobierno nacional debe querer fulminar a Scioli, pero, como el Gobernador es un tipo con un altísimo nivel de aceptación, no puede prescindir de él.
-Los dirigentes oficialistas afirman que no representa los lineamientos kirchneristas.
-Daniel es una buena persona. Habla con todos. Scioli no piensa como el Gobierno, piensa diferente. Es moderado y dialoguista. Esta pelea va a ser la batalla de los próximos meses, esto de qué va a pasar entre Scioli y el Gobierno.
-¿Piensa que Scioli puede romper con el kirchnerismo?
-No veo a Scioli rompiendo con el kirchnerismo. No está en su formato. Sería el Gobierno el que tendría que expulsarlo del partido. Como dije: no lo veo rompiendo, ése no es su formato.
-Además de las legislativas, hoy existe la pelea entre Nación y Provincia por la coparticipación.
-Me parece que nuestro país se debe un nuevo debate por la coparticipación federal. Se debe regular nuevamente, porque algo anda mal.
-Scioli pidió formalmente ese debate hace unos días, y desde el Gobierno nacional lo cruzaron duro.
-Si el kirchnerismo pretende que Scioli no plantee que le devuelvan a la Provincia los puntos que le corresponde, la verdad que no sé qué esperan, ¿que le entregue la Provincia? (risas). Me parece que esa discusión se tiene que dar. Hoy la Nación maneja el noventa por ciento de los recursos de un país, eso no es normal. Creo que hemos llegado al extremo. El kirchnerismo es un fenómeno más financiero que político.