19 de febrero de 2013
DIFERENCIAS CON BUZZI
Coninagro: "No vender soja es insostenible"
El titular de Coninagro, Carlos Garetto, rechazó las palabras del presidente de FAA, Eduardo Buzzi respecto de la no venta de soja al exterior y sostuvo que los pequeños y medianos productores no están en condiciones de suspender la venta de granos. "La producción de soja hoy sigue siendo rentable", consideró
Ayer Buzzi se refirió a la asamblea que los productores realizaron la semana pasada en Pehuajó y dijo que "si hay soberbia en el Gobierno y al mismo tiempo son ineptos -una combinación muy complicada-, antes que se caigan los productores, decimos no vendamos soja, algo que hará que no falte leche o carne para los pibes", sostuvo el titular de la Federación Agraria Argentina en una radio porteña.
Por su parte, desde Coninagro tomaron una postura contraria al decir que los productores agropecuarios no podrán no vender soja "porque tienen que asumir compromisos comerciales, financieros e impositivos". Garetto agregó que "esas son propuestas que hicieron algunos productores en la asamblea de la Mesa de Enlace en Pehuajó".
El dirigente señaló que "una cosa es la intención y otra la factibilidad, y hoy no hay factibilidad de llevar adelante una medida de esa magnitud, más si el objetivo es retener ventas para generar en la economía algún impacto financiero, ya que para que eso ocurra tiene que darse un tiempo (de retención de ventas) de cuatro o cinco meses".
Y agregó que "en la gran escala, la producción de soja hoy sigue siendo rentable por los precios internacionales en valores históricos muy altos, lo cual compensa los mayores costos, además de ofrecer mayor seguridad de cosecha".
Garetto explicó que quienes participaron en la asamblea de Pehuajó "no están en esa situación" y comentó que el 20% de los productores concentra 80% de la cosecha, mientras el resto se reparte entre 80% del total de agricultores.
Por último, destacó el aumento de los insumos, "incluso en dólares (31% en el caso de los agroquímicos), los servicios, combustibles e impuestos, tanto nacionales como provincias y locales". "Todo eso resiente la ecuación del pequeño y mediano productor, que empieza a perder rentabilidad, se endeuda y termina desplazándose del sistema, mientras el gobierno no les da indicativos suficientes, señales claras y no genera expectativas para revertir esto en el corto o en el mediano plazo", destacó