4 de noviembre de 2014
FRANCO LA PORTA
"Scioli es el Tiger Woods de la política"
El secretario de Servicios Públicos habla de todas las empresas que dependen de su área, promete mejoras y presenta el Centro de Monitoreo. También se refiere a su trabajo para que el Gobernador sea Presidente
Franco La Porta se para frente a las seis pantallas que ocupan casi toda una pared del amplio despacho, y se entusiasma explicándole a La Tecla el porqué de la instalación de un centro de monitoreo que controlará en tiempo real a las empresas de electricidad, agua, gas y cloacas, y a la autopista Buenos Aires - La Plata. Aparecen mapas, planillas, imágenes y listas de usuarios que reclaman deficiencias en las prestaciones.
Todas las compañías bajo la órbita de la Secretaría de Servicios Públicos, ya sea las que dependen directamente de ella o sobre las que funciona como órgano de contralor, tienen desde ahora un ojo insomne que las vigila las 24 horas, y auditará la respuesta a los reclamos para determinar si corresponden sanciones o no.
“Lo primero que encaramos es tratar de mejorar la eficiencia de cada una de las empresas del Estado. Pero no nos quedamos solamente en eso, porque la secretaría también tiene potestad regulatoria, poder de policía, en un montón de concesiones privadas, como, por ejemplo, el sistema de distribución eléctrica”, dice La Porta para arrancar la charla, que también discurrirá por los caminos de la política.
“Para corregir los servicios públicos hay que empezar por tener buena información, y luego de hacer un correcto análisis generar una planificación, de corto, mediano y largo plazo. Cuando uno go-bierna tiene que hacer uso de todas las herramientas, como la tecnología, para lograr la mejor gestión posible. Si en estos tiempos no se utiliza la tecnología, es muy difícil llegar a una gestión de eficiencia, y mucho menos con la seriedad que la gente reclama”, asegura el funcionario, mientras muestra un mapa con el ranking de reclamos por problemas en el suministro eléctrico.
-¿Hay un mayor poder de policía sobre las empresas?
-Es tener el poder de policía y de regulación que establece la normativa, ni más ni menos. Buscamos que cada vez haya me-nos reclamos y haya un sistema más eficiente del servicio que se otorga. Por supuesto que si eso no se cumple el Estado tiene mecanismos de sanciones, multas y normativas legales que le permiten generar un correctivo de lo que no se cumple. Scioli fue claro cuando me dijo “hay que tratar de ponerse del otro lado del mostrador y pensar como piensan los usuarios de los servicios públicos, y a partir de ahí resolver los problemas”. Por supuesto que todo lleva tiempo, pero cuanto antes se em-piece, antes se termina.
-¿Se puede construir políticamente desde acá, cuando, por lo general, los usuarios siempre tienen sobre las empresas de servicios una mirada crítica?
-Por supuesto. Es verdad que nadie se acuerda de los servicios públicos cuando funcionan bien, y cuando funcionan mal todos le tiran dardo al blanco. El desafío es tratar de ir mejorando día a día, independientemente de que problemas hay siempre. Lo que hay tener es la fuerza, la vocación y las ganas de resolverlos.
-¿Tener la información de quién hizo tal reclamo y desde dónde llamó también les va a permitir consultar a los vecinos si están satisfechos con la respuesta?
-Eso tiene dos propósitos. El primero es dar a cada uno de los prestadores de los servicios, en su porción, la posibilidad de que puedan visualizarlo; buscamos que ellos corrijan el problema antes de que nosotros tengamos que sancionarlos. Como segunda medida, nosotros tenemos la información concentrada de todos los servicios y todas las empresas, y vamos a instalar un sistema o un procedimiento de llamadas y de encuestas de satisfacción de los contribuyentes. Ni bien esté en funcionamiento, yo mismo voy a tener un procedimiento de llamadas, y voy a instruir a cada una de las áreas de la Secretaría de que todos los días tienen que llamar a una determinada cantidad de vecinos.
Hablemos de política
-Está hecho todo un técnico, ¿y la política?
-No estoy en este lugar solamente por una cuestión técnica, fundamentalmente estoy por una cuestión política, de compromiso a un proyecto que encabeza el Gobernador; convencido de que Daniel Scioli va a ser el continuador de las políticas buenas que se han hecho durante estos diez años, y que va a ser el próximo Presidente. Además de eso nosotros tenemos un compromiso militante. El principal desafío es acompañar a que la Argentina siga creciendo a partir del escalón al que llegó, y no embarcarnos en algunos proyectos utópicos que plantean siempre el Apocalipsis para tratar de posicionarse, y decir que hay que tirar todo por la borda y empezar de nuevo. Hemos vivido esos procesos durante otras instancias y nos ha ido mal. Tenemos que valorar las cosas que se hicieron bien, potenciarlas; mejorar las cosas que se hicieron mal; y agregar muchas cosas que no se pudieron hacer porque los momentos históricos de la vida de Argentina siempre demandan una actitud, un esfuerzo y una consideración especiales de determinadas temáticas sociales.
-¿Cuál es su rol en el armado Scioi 2015?
-Uno se suma al equipo desde el convencimiento político, y desde el convencimiento de un proyecto, pensando que uno debe estar comprometido como militante en el esfuerzo conjunto de lograr un objetivo. Ese esfuerzo es el que tenemos que poner todos, y ese objetivo es que Scioli sea Presidente. Además hay que poner en valor las cosas que se hicieron bien.
-En un momento usted no fue parte del oficialismo.
-Yo fui fundador del Frente para la Victoria, y me alejé un año, por un problema de salud, primero, y después no tenía la posibilidad de incorporarme, entonces traté de incursionar para volver a la Legislatura desde otro lugar. Afortunadamente el Gobernador me convocó y estoy muy gustoso de poder volver a participar de esta idea. Vos me habrás visto desde la Cámara de Diputados defender muchas cosas que el proyecto nacional y popular ha hecho muy bien.
-¿No hay críticas?
-Soy crítico desde otro lugar, de cosas que no se han hecho o se han hecho mal, porque no podemos ser necios y decir que el país es la maravilla. Hay cosas para corregir y cosas que están bien hechas. En lo que viene, Daniel Scioli es el hombre que más garantía da para que eso pueda tener un correlato de coherencia y de continuidad.
-Usted es parte de un grupo de funcionarios que habla con algunos intendentes del interior, que se reunieron con Scioli la semana pasada, y se los ha dado en llamar los naranjas. ¿Cómo viene eso?
-Con un grupo importante de compañeros del Gabinete, como el jefe de Gabinete, el secretario general y distintos secretarios y ministros, estamos ayudando para generar el convencimiento de muchos intendentes. Ellos son el alma máter de este equipo, porque han estado durante todos estos años, al igual que Daniel Scioli, potenciando las cosas que se hicieron bien y bancando las adversidades. Desde ese lugar buscamos generar un gran espacio de pertenencia naranja, con identificación clara de que queremos que Scioli sea Presidente. Y tener los brazos bien abiertos para integrar a todos, y para que Daniel se pare sobre una platea sólida desde el punto de vista político, que es la provincia de Buenos Aires, y eso permita ser evidenciado en muchas provincias como la síntesis del mejor dirigente que el Frente para la Victoria, y el peronismo en su conjunto, puede proyectar como candidato.
-¿Su tarea, entonces, es contener intendentes?
-Sí, pero no contener como un modelo de contención pensando que si no se los contiene pueden estar en otro lugar, sino como un encuentro entre compañeros planteando objetivos a seguir y estructurando políticamente un espacio. Por supuesto, con la conducción del Gobernador, y nosotros, desde el Gabinete, acompañando y ayudando para que esto crezca y tenga un correlato de militantes que profecen la gestión de la Provincia, que permitan generar interrelaciones con intendentes de otras provincias, y transmitir por qué decimos que Scioli debe ser Presidente. Y que no sea él solamente quien se conecte con la sociedad, sino que haya muchas más voces que representen esa explicación. Porque Scioli es el Tiger Woods de la política, el de más hándicap.
-¿Qué parte de la cancha de golf es la Secretaría de Servicios Públicos?
-Una partecita muy pequeña, que se complementa con cada una de las otras áreas y forman la gran cancha. No tiene una visión privilegiada, como no debe tenerla. Tiene una posición complementaria de muchas de las otras áreas que cada una cumple su función vital.
-El torneo es uno solo y Tiger Woods no ganó todos los torneos.
-Pero ganó los más importantes.
-¿Y quién es el principal rival?
-No miro la política en términos de ganarle a un rival. Creo que lo importante está en ganarle a la adversidad de las cosas, en ganarles a las cosas que hay que hacer y erigirse como el hombre que las puede llevar adelante; y terminar siendo quien sintetice la confianza de la comunidad en general. En términos de competencia lo veo así. Si me preguntás con quién va a terminar compitiendo, porque te gusta poner nombres…
-Tampoco son tantos los nombres que dan vueltas.
-Creo que esto va a terminar simbolizado en dos sectores: uno representado por el Frente para la Victoria, con una columna central muy fuerte en el peronismo, que va a ser conducido por Daniel Scioli, y otro sector que va a representar otro modelo, que implica un cambio para la Argentina. Y quien es el exponente de ese cambio total es Mauricio Macri. No veo la posibilidad de que alguien deambule en el medio tratando de ver cómo se queda, en forma confusa con un discurso no muy claro, entre un sector y el otro. Falta mucho todavía para las elecciones, y cada candidato va a tener que plasmar claramente su intención; entonces no va a haber espacio para tibios en término de definiciones políticas, o representás una cosa o representás la otra.