7 de julio de 2015
ELECCIONES 2015
Ni con Lousteau, ni con Larreta
Mariano Recalde y referentes de La Cámpora analizaron ayer con la Presidenta la estrategia para el ballottage; insistirán en la idea de que ambos candidatos representan un mismo proyecto
El kirchnerismo decidió que no va a apoyar a ninguno de los dos candidatos que van a disputar el ballottage, el 19 de julio en la ciudad de Buenos Aires. Tampoco llamará a votar en blanco, sino que optará por la neutralidad o, mejor dicho, por cuestionar a los dos postulantes, sin hacer una recomendación sobre a quién dar el voto.
La decisión se tomó en una reunión en la Quinta de Olivos, de la que participó Mariano Recalde, los principales referentes de La Cámpora en el distrito y Cristina Kirchner. Todos estuvieron de acuerdo en que el Frente para la Victoria (FPV) debe mantener la posición expresada por Recalde durante la campaña: Horacio Rodríguez Larreta y Martín Lousteau son dos caras de un mismo proyecto.
Asimismo, el kirchnerismo porteño seguirá pensando la situación. Hay dos opciones que estuvieron descartadas desde el principio: apoyar al candidato de Pro y llamar a votar en blanco.
En el búnker del FPV, ésa era anteanoche la única certeza: nadie iba a volcarse por el actual jefe de gabinete porteño. El voto en blanco tampoco generaba entusiasmo. "Como partido de gobierno, no podemos llamar a votar en blanco. Eso lo puede hacer el Partido Obrero, pero nosotros no", explicaba ayer un dirigente.
La opción de apoyar a Lousteau no sólo implicaba una contradicción respecto de lo dicho en la campaña. También significaba un riesgo político. Un sector del oficialismo nacional considera que el crecimiento del candidato de ECO sería lo más perjudicial para las aspiraciones futuras del kirchnerismo en la ciudad. Para el FPV es preferible enfrentarse al macrismo que a un dirigente como Lousteau, que representa un "falso progresismo radical". En la construcción política que empezó con la candidatura de Recalde, el escenario imaginado es el de la polarización con Pro.
Ni siquiera la posibilidad de dar libertad de acción está libre de complicaciones. El debate público entre kirchneristas que prefieran una u otra opción podría generar enfrentamientos internos. Cómo evitar esos efectos no deseados fue uno de los objetivos del encuentro de anoche.
La solución que intentará aplicarse en las próximas horas es garantizar una libertad de acción dentro de ciertos parámetros. La idea es que, más allá de a quién decida votar, ningún dirigente se corra del discurso que indica que Larreta y Lousteau son parte de un mismo proyecto.
De esta manera, el objetivo será fortalecer el discurso elegido para las elecciones presidenciales. El FpV recordará cada una de sus apariciones que el radicalismo y la Coalición Cívica, principales sostenes de la candidatura de Lousteau, competirán en las PASO presidenciales de Cambiemos con Macri.