30 de mayo de 2016
PROVINCIA
La gobernadora instrumenta "brigadas de civil antisecuestros"
El tema de los secuestros extorsivos se convirtió en un dolor de cabeza importante para el gobierno provincial. Tras el rapto del dirigente peronista Osvaldo Mércuri y su familia, la cuestión tomó estado público y político.
El día de ayer, la gobernadora María Eugenia Vidal dijo que puso en funcionamiento “brigadas de civil” para combatir los secuestros extorsivos y destacó el trabajo en conjunto de la Policía bonaerense con las fuerzas federales en las denominadas “zonas calientes”.
“Estoy hablando todo el tiempo de esto con (el ministro de Seguridad) Cristian Ritondo, se está trabajando en la saturación de determinadas zonas que hemos identificado como calientes o difíciles”, resaltó la mandataria provincial.
Según la gobernadora, se pusieron “brigadas de civil a trabajar sobre el tema” de los secuestros y se está haciendo “investigación previa” con el objetivo de prevenir nuevas situaciones delictivas.
“Hay algunas bandas que ya cayeron en el sur de la Provincia y en el corredor oeste y estamos organizando si esto no tiene una conexión mucho más organizada”, aseguró la Gobernadora.
En una nota publicada en Página 12 sobre el tema se afirma que "hasta diciembre de 2015, en lo que era la Dirección de Comunicaciones, se intervenían aproximadamente diez teléfonos por mes por casos de secuestros, con un pico de 16 en diciembre, el mes en el que siempre se registran la mayor cantidad de delitos. Hoy en día, la Dirección de Captación de Comunicaciones (DCC), realiza más de una intervención por día por los secuestros, es decir más de 30 por mes".
Es decir, la cifra se triplicó respecto de 2015. Asimismo, destacan que "no refleja ni de lejos el nivel de secuestros, porque en la mayoría de los casos el rescate o la liberación se concretan antes de la intervención telefónica".
Por otro lado, el informe señala que “las manos libres y el autogobierno policial se convirtieron rápidamente en corredores liberados nunca vistos" y agrega: "todos los jueces, fiscales y jefes de las fuerzas de seguridad consultados por este diario coinciden en que las bandas que hoy secuestran no son organizaciones sofisticadas. Se trata de grupos que provienen de delitos como las entraderas o los robos más comunes”.