27 de diciembre de 2016
VACANTE
En medio del escándalo, Servini de Cubría renunció a la subrogancia del juzgado electoral
La jueza federal presentó su dimisión a cargo del Juzgado Federal 1 de La Plata, donde tenía competencia electoral. Tenía mandato hasta abril del próximo año, por lo que la decisión fue tomada con sorpresa. En tanto, el Consejo de la Magistratura ya tiene en vista quién ocupará la vacante y, para ello, llevó adelante una maniobra irregular.
“Por motivos personales" y de forma “indeclinable”, la juez federal María Servini de Cubría presentó su renuncia al juzgado con competencia electoral de la provincia de Buenos Aires, pesar que su mandato como subrogante vencía el próximo 1° de abril.
La salida de la magistrada tiene que ver, específicamente, con el avance irregular en el nombramiento de quien ocupará la vacante, Juan Manuel Culotta, quien hasta entonces estuvo adelante del Juzgado Federal de Primera Instancia en lo Criminal y Correccional de Tres de Febrero.
La votación de la medida en el Consejo de la Magistratura fue dispar. A favor dieron el visto bueno los consejeros Leónidas Moldes (juez), Juan Bautista Mahiques (representante del Poder Ejecutivo), Pablo Tonelli (diputado de Cambiemos) y Gustavo Valdés (diputado radical).
En tanto, se abstuvieron los consejeros Daniel Candis (académico) y Luis María Cabral (juez y presidente de esa comisión), mientras que se opusieron los consejeros Gabriela Vázquez (jueza) y Rodolfo Tailhade (diputado nacional por el FPV).
Según trascendió, el juez Culotta envió el pasado 14 de diciembre una carta al Consejo de la Magistratura solicitando que “se autorice su traslado como magistrado al Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Nº1 de La Plata, que actualmente se encuentra vacante puesto que le significaría “un crecimiento profesional teniendo en cuenta que se trata de un juzgado con mayor jurisdicción territorial, donde tramitan causas complejas, en especial aquellas vinculadas con delitos de lesa humanidad".
En materia de delitos de lesa humanidad, el juez Culotta ha sido duramente cuestionado por tergiversar pruebas y citar hechos falsos cuando era miembro de la Sala I de la Cámara Federal de San Martín, en un juicio contra el ex secretario del Ejército Eduardo Alfonso, investigado por delitos cometidos durante la última dictadura militar; hecho por el que la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, lo denunció ante el Consejo de la Magistratura.
Así todo, con el apoyo del oficialismo (puesto que ostenta 8 consejeros de los 13 que integran el cuerpo), Culotta es el nuevo titular del Juzgado, pese a que es irregular el traslado de juzgado en diferentes jurisdicciones y, lo más polémico, que ya hay un concurso abierto para ocupar el juzgado platense.
Tal como publicó La Tecla, en un contexto donde el PRO carece de estructura política y debe echar mano al radicalismo para fiscalizar elecciones, el Juzgado Federal N° 1 de La Plata vale su peso en oro. Máxime si se tiene en cuenta que el músculo legislativo oficial busca implementar el voto electrónico.
El diputado nacional de Corrientes, Gustavo Valdés, uno de los alfiles que responden a Cambiemos dentro de la estructura del Consejo de la Magistratura adelantó que la intención era “sacar el concurso lo antes posible”.
“Es un juzgado sensible y muy requerido porque es atractivo para todas las fuerzas políticas; eso implica una sobrecarga de análisis, porque se pueden presentar alrededor de 120 postulantes”, puntualizó Valdés a La Tecla.
Quien pateó el hormiguero del Consejo de la Magistratura fue otro integrante: el diputado nacional del FpV Rodolfo Tailhade. El legislador oriundo de Malvinas Argentinas produjo una interna en el órgano al plantear, puertas adentro, una maniobra irregular detrás del proceso que quieren abrir para la designación del magistrado del Juzgado Federal N° 1.
“Yo denuncio una jugada ilegal. El oficialismo está realizando una suerte de ensayo en la Provincia que consiste en dividir ese juzgado en dos: uno el electoral en sí y el otro en lo criminal y correccional. Para eso necesitan una ley, y eso no es facultad del Consejo de la Magistratura sino del Congreso, con el posterior aval de la Corte”, expresó el diputado malvinense a La Tecla.
Para Tailhade, la maniobra que quiere llevar adelante la actual conformación del Consejo de la Magistratura configura una “ofensiva electoral”, ya que “Cambiemos necesita un juez adicto que actúe como un soldado para que le garantice que no van a tener ningún quilombo cuando el voto electrónico se convierta en un bardo de acusaciones de fraude”.
Además, el legislador del Frente para la Victoria consideró que el empecinamiento del oficialismo con el juzgado que fiscaliza las elecciones en la provincia de Buenos Aires “es un globo de ensayo para potenciarlo a todo el país”, ya que “quieren avanzar ilegalmente en la creación de juzgados electorales que no están creados por ley”.