16 de noviembre de 2017
PROTESTA
Lunghi no encuentra la cura: enfermeros le hacen paro de 96 horas
El intendente radical arrastra un largo conflicto con los trabajadores de los distintos centros de salud que mantiene el distrito. Las protestas se endurecieron en las últimas horas y el sindicato cuestiona la falta de diálogo.
El histórico intendente de Tandil, Miguel Lunghi, no encuentra solución al reclamo de los enfermeros municipales que exigen bonificaciones y mejoras laborales desde hace dos meses, un conflicto que escalará en los próximos días con un paro de 96 horas.
Los enfermeros del Sistema Integrado de Salud Pública reclaman una bonificación del 35 por ciento y reducción en la carga horaria, en virtud del reconocimiento por “criticidad” de la actividad que cumplen. Y han salido a denunciar una caza de brujas por parte del oficialismo.
Tandil cuenta con los Ramón Santamarina”, “Dr. Debilio Blanco Villegas” y “Enrique Larreta” de María Ignacia y las salas de los barrios. Trabajadores de los centros de salud han elevado la exigencia al ejecutivo radical, que ha preferido ignorarlo.
En suma, los enfermeros lanzaron un paro de 96 horas que arrancará este jueves. La medida se llevará a la práctica en dos partes: jueves y viernes, por un lado, y, martes y miércoles, por otro, luego del fin de semana largo. Se garantiza la atención de urgencias y de pacientes internados.
El secretario general del sindicato, Roberto Martínez Lastra, dijo al periódico El Eco que la medida “va en serio”, y expresó su deseo de que en los próximos días el Municipio convoque a un diálogo y frene así el conflicto que puede ir incrementándose. Y apuntó contra los funcionarios que "se dedican a apretar a gente en horario de trabajo” y que recorren los centros de asistencia “con la planilla viendo quién trabaja para ver quién faltó”.
Lunghi, médico de profesión, no logró un acercamiento. Su gobierno sólo respondió con el anuncio de descuento de días no trabajados. Lastra señaló que el Municipio está en su derecho pero aclaró que si se aplica rompe las chances de un acuerdo. "Sinceramente no vemos voluntad", dijo el secretario de Gobierno, Oscar Teruggi.
“No puede ser que no podamos armar una mesa de diálogo con los protagonistas del reclamo, que nos planteen algunas cuestiones para ver si podemos encontrar un punto de contacto que nos acerque a la solución del conflicto”, apuntó.