14 de agosto de 2018
ECONOMIA
Crisis cambiaria, inflación y el fin de las Lebacs: "Estamos frente al peor de los escenarios"
El expresidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, anticipó un duro panorama económico ante el fuerte incremento del dólar, que impulsó al Gobierno a eliminar del mercado el titulo de deuda estrella. “Si esto no cambia, termina mal”.
La situación económica del país está que arde. Este lunes, el dólar cerró arriba de 30 pesos, y el Gobierno nacional anunció el fin de las Lebacs, además de dar marcha atrás con las subastas diarias de moneda norteamericana que entraron por el acuerdo del Fondo Monetario Internacional.
Ante este panorama, el Banco Central, que conduce Luis “Toto” Caputo, elevó la tasa de política monetaria al 45 por ciento, y la incertidumbre sobre cómo impactará en la economía real reina en cada rincón de la Argentina.
"Si esto no cambia, termina mal. No sabemos cuando, pero cuando sólo gana la especulación financiera no hay otra salida”, anticipó el expresidente de la entidad financiera durante el kirchnerismo, Alejandro Vanoli.
En diálogo con FM La Patriada, el exfuncionario señaló que “el acuerdo con el FMI le quitó al gobierno instrumentos para frenar esta crisis. Si el Gobierno sube las tasas de interés puede ganar tiempo, pero mata a la economía real".
"Tenemos una inflación que sigue creciendo y la economía parada: es el peor de los escenarios", apuntó Vanoli.
Cabe recordar que este lunes, el Gobierno comunicó que "el esquema de cancelación de las Lebac está pensando para no afectar decisiones de inversión pasadas. Los bancos podrán tomar Letras de Liquidez (Leliq) o Notas del Banco Central (Nobac) a un año o más y mantener la relación”.
Por ello, el resto de los inversores "deberán buscar alternativas: les daremos la opción de pasar a dólares o podrán suscribir Letras del Tesoro (Letes) en pesos o migrar a plazos fijos, si quieren mantenerse en pesos".
Asimismo, el Gobierno anunció una serie de medidas para evitar que la crisis de Turquía afecten a la economía, entre ellas elevar la tasa de interés de 40 a 45 por ciento y la suspensión de venta diaria de dólares conseguidos en junio tras el acuerdo alcanzado con el Fondo Monetario Internacional.