30 de octubre de 2020
POST GUERNICA
El después del desalojo: el Gobierno dice que no hubo "represión" y le apunta a la "mala fe" del Polo Obrero
"Se realizó con prudencia; no coincido con la definición de represión", manifestó esta mañana en declaraciones radiales el ministro de Desarrollo, Andrés Larroque. Además, al igual que la jefa comunal Blanca Cantero, apuntó los cañones a los grupos de izquierda que participaron de la movida
El desalojo de Guernica dejó tela para cortar. Y si bien hubo aprobación, también fueron muchas las críticas, algunas provenientes del propio oficialismo. El gobernador Kicillof prefirió la moderación y señaló que "hubo una denuncia judicial y luego una orden de desalojo que estaba vigente desde hacía mucho tiempo", para agregar que "la policía simplemente actuó como auxiliar de la justicia para llevar adelante esa orden".
Sin embargo, la jefa comunal de Presidente Perón, Blanca Cantero y el ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque, fueron un poco más allá y le apuntaron directo a las agrupaciones políticos que no cooperaron para evitar el desalojo, principalmente al Polo Obrero.
"Se intentó por todos los medios no llegar a un desalojo, pero evidentemente había grupos políticos a los que no les interesaba el bienestar de la gente, sino un rédito político que no entiendo", afirmó la mandataria de la Tercera, y añadió que "los partidos de izquierda no querían entender que no se les podía dar inmediatamente tierra, sino que había todo un trabajo por hacer.
"Se hizo un trabajo de ayudar en la emergencia, y después se trabaja intensamente en cuestiones a largo plazo, que es lo que hace muchos años no se hace", completó, dejando en evidencia su malestar con quienes fueron los promotores de la toma de Guernica.
A manera de balance, Cantero expresó que "fueron meses difíciles; no puedo decir que estoy contenta, porque nadie está contento de pasar una situación como esta, pero como ciudadana de este país creo que se cumplió con el cometido que siempre debemos tener por delante".
Y concluyó: "Actuó la Justicia y se hicieron todos los esfuerzos posibles para no sólo restituir la tierra a sus propietarios, sino también con la gente que expresaba que tenía problemas habitacionales", finalizó la intendenta de la Tercera sección.
Por su parte, mano a mano con Radio Futurock, Larroque señaló que "sería un error quedarse con la imagen de ayer, que lamentablemente fue una consecuencia a la que se llegó por diversos factores, centralmente por la obstrucción permanente de un sector de las organizaciones que formaban parte de la toma respecto a resolver un proceso en el que intervenimos desde agosto con mesas de diálogo".
"Logramos que 732 familias salieran de la toma en manera acordada y están en proceso de gestión de su lote con servicios; la misma propuesta teníamos para la gente que permanecía en la toma, pero lamentablemente, más allá de hacer todos los esfuerzos, no hubo predisposición. Hubo mala fe del Polo Obrero, que siempre apostó al conflicto; y de otras organizaciones entiendo que hubo falta de comprensión", agregó sin vueltas el referente de La Cámpora.
Por último, rechazó la palabra "represión" para catalogar el operativo. "Se realizó con prudencia; no coincido con la definición de represión: se ejecutó una medida judicial con todos los cuidados posibles", finalizó.