La Tecla
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Aunque la decisión aún no está firme, todo indica que el Gobierno podría implementar “vuelos especiales” desde el exterior para repatriar argentinos que se encuentran varados en destinos internacionales con situaciones “particulares”, aunque los criterios aún no fueron establecidos.
Lo más posible es que desde la Casa Rosada se mantenga, al menos durante la próxima semana, el cupo diario de 600 pasajeros que pueden regresar desde el exterior.
Sin embargo, según informaron fuentes oficiales, en los últimos 10 días se estuvieron autorizando ingresos por razones “puntuales” y se evalúa institucionalizar este modus operandi, que hasta ahora se produjo de manera informal.
Desde el entorno del ejecutivo, destacaron que seguramente “se defina jueves por la noche", y también diferenciaron la situación actual con la de los “varados” que habían viajado en 2020 antes de que se desatara la pandemia en la Argentina. “No se puede comparar con aquellas repatriaciones, el contexto es distinto y cuando salieron sabían lo que hacían”, dijo una fuente.
Cuáles serán los criterios para la repatriación excepcional
Los parámetros para las repatriaciones aún no están definidos, pero deslizaron que podrían obedecer a razones de salud, de seguridad o laborales. En ese sentido, durante las últimos días llegaron al Gobierno alertas desde los consulados en distintos países emitidos por los funcionarios de las sedes diplomáticas argentinas que hacen frente a diario a las demandas de los argentinos que reclaman regresar lo antes posible, con distintos argumentos.
Algunos, por ejemplo, reclaman el regreso por falta de medicamentos, problemas económicos, de salud y de seguridad, según denuncian los más de 14.000 varados en el exterior.
Para hacer frente a esos reclamos, que se evalúan caso por caso, el Gobierno analiza implementar mecanismos institucionalizados, que aún no fueron definidos, a los que se refieren de manera general como “vuelos especiales”. La decisión está vinculada a la posible extensión en el tiempo del cupo más reciente, que se implementó a través de una resolución que vence el viernes.
Cabe destacar que el cupo fue implementado hace diez días por decisión de la Jefatura de Gabinete que conduce Santiago Cafiero para demorar lo más posible el ingreso de la cepa Delta de coronavirus, potencialmente más contagiosa.
Esta situación provocó indignación entre los viajeros, que se encontraban en el exterior por distintos motivos. Sin embargo, en el Gobierno argumentaron que las personas que salieron del país lo hicieron con conocimiento del riesgo que podría representar, y señalaron que habían firmado una declaración jurada.
Otro frente de conflicto que le generó al Gobierno fue con las compañías de líneas aéreas, que protestaron por el recorte en las plazas de sus vuelos y señalaron la situación de unos 45 mil argentinos que no pueden volver.
En este contexto, desde el lunes el Gobierno trabajaba la idea de “ir flexibilizando el cupo de a poco” a partir del 9 de julio, la fecha límite establecida. Pero ayer el panorama cambió después de una reunión virtual que mantuvieron los ministros de Salud, Carla Vizzotti, del Interior, Wado de Pedro, y de Transporte, Alexis Guerrera, para definir si terminar o continuar con la restricción vigente para el reingreso de los argentinos que se encuentran en destinos internacionales y quieren volver al país.
Después de esa cumbre entre las carteras que intervienen en el asunto “se puso un freno a esa posibilidad”, dijeron fuentes oficiales, y por ahora las autoridades nacionales se inclinan por mantener la polémica restricción al menos durante una semana. De todas formas, otras voces señalaron que “no es oficial” y que la decisión final la tendrá Alberto Fernández. El desenlace del tema del cupo y las posibles repatriaciones puntuales se anunciarían hoy.