“Por primera vez la tensión no está hacia fuera sino hacia dentro de los frentes”
El consultor y presidente de la Cumbre Mundial de Comunicación Política presentó su nuevo libro en la Plata y dio una charla en la que abordó el escenario político actual. Entre otras cosas dijo que “hay un error conceptual de creer que el voto a Milei es de derecha”.
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El consultor político y presidente de la Cumbre Mundial de Comunicación Política, Daniel Ivoskus, presentó su último libro Matrix Política, la construcción del candidato, con una ponencia en la Facultad de Derecho de la Universidad Católica de La Plata (UCALP), donde dejó conceptos muy interesantes acerca de la campaña que se viene en la Argentina.
En la ponencia participaron también el consultor Mauro Becerra y la directora de la carrera de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la UCALP, Victoria Zapata. Durante la charla, abierta al público y a los alumnos, Ivoskus habló tanto del tópico por el que transcurre el libro, que va desde que se contrata al estratega de la campaña hasta el día de la elección, como de cuestiones referidas al escenario actual en el país, de cara a una inminente elección presidencial, y de las motivaciones que mueven a una sociedad que se muestra cada vez más apática hacia la política.
Planteó que es un desafío para los candidatos es saber a quién buscan representar y qué categorías de representación hay en la sociedad dispuestas a escuchar a determinado postulante. En ese aspecto sostuvo que “en Argentina hay seis categorías de representación claras y hay una que tiene menos claridad, sin importar si valen 2 o 20 puntos. Empecemos por la izquierda, que claramente tiene una historia electoral, sabemos quiénes son, a quiénes representan, a quién le habla. El kirchnerismo también es una categoría de representación electoral en la actualidad en la Argentina; después el peronismo y el radicalismo; y el Pro, al que esta discusión de halcones y palomas le termina haciendo daño, porque hay una diferenciación fuerte que caló en sus votantes. Y, por último la categoría que podríamos determinar de la antipolítica, barra libertarios, barrio outsiders”.
Consideró que en esos casos es más fácil determinar el público al que se le habla, porque “cuando un candidat0o dice que le habla a todos no le habla a nadie, más en una sociedad híper polarizada. Entonces, lo primero que uno tiene que hacer es identificar su electorado y hacia dónde puede crecer un poquito, sin desilusionar a los propios”.
Para el consultor, esas categorías de representación nos llevan a identificar mucho más fácil el escenario electoral que viene en la Argentina y cómo poner esos juegos de frentes, de alianzas, de contenientes; qué suma, qué no. Porque ya hemos visto alianzas electorales donde uno más uno no es dos y a veces ni siquiera da uno, sino que es neutro o termina restando”.
Ivoskus habla de voto líquido y campaña espesa y se refiere a que hay una situación que se repite en muchos países y que se da últimamente en la Argentina respecto a la pérdida del voto cautivo. Para explicar ese líquido utilizó el ejemplo de Florencio Randazzo en 2017, quye fue con el sello del PJ en la provincia de Buenos Aires y sacó 4 puntos. “No s etrata del sello partidario, el voto líquido hace que, de golpe, haya alternativas que nadie tenía en el radar”.
Respecto a la campaña dijo que es espesa porque “en las campañas cada vez más profesionales se empiezan a crear cada vez más problemas también a los candidatos, porque ya no solamente hay que preparar el candidato, sino al candidato, a las familia, a los hijos, a los grupos, a los entornos. Son cuestiones cada vez más complejas, porque en definitiva es una disputa por el poder en una sociedad híper polarizada, y esa disputa por el poder se traduce en las campañas electorales”.
Ante la pregunta de cómo ve el termómetro de la sociedad argentina en la previa de la campaña, el analista sostuvo que “en primer lugar el termómetro social está arriba de todo, al máximo. En lo concreto da la sensación que la primera definición electoral real es la de Mauricio Macri, que apunta a ordenar escenario”.
“La gran diferencia que la Argentina hoy respecto a los escenarios electorales es que por primera vez la tensión no está hacia fuera sino que está hacia dentro de los frentes. Es mucho más fuerte la tensión entre Patricia Bulrich y Horacio Rodríguez Larreta que con el afuera; y en el caso del Gobierno, es mucha más la tensión del Kirchnerismo con Alberto que pensar en Mauricio Macri, más con Macri fuera de las escena. Eso es nuevo. Antes eso estaba más ordenado”, destacó. Y atribuyó esas tensiones a la falta de jefaturas claras.
Y resaltó como “dato no menor”, que lo que en mucho tiempo fue la avenida del medio en la Argentina hoy es una avenida que está por afuera, en referencia al crecimiento de los libertarios que “es mucho más grande de lo que se pensaba”.
Al respecto, Ivoskus advirtió que “hay un error conceptual de creer que el voto a Milei es un voto de derecha. No hay investigación científica que justifique eso. Es más, en los sectores populares es donde más crece Milei. Todo su crecimiento desde las elecciones legislativas hasta ahora se da a costa del público azul (kirchnerismo) y no del público amarillo (macrismo)”.
Otra de las cuestiones que se da es que comienza a haber una influencia de los jóvenes hacia arriba. Es decir que los hijos le muestran a los padres sus propias frustraciones para rumbearlos hacia la preferencia política de una juventud que no se quiere ver reflejada en esas frustraciones paternas.