El político, que durante mucho tiempo fue considerado como la figura pública más pintoresca de Italia, fue elegido primer ministro tres veces y sirvió durante un total de nueve años, más que nadie desde el dictador fascista Benito Mussolini.
El polémico dirigente y magnate de los medios de comunicación tenía 86 años y estaba internado en el Hospital San Raffaele de Milán desde el viernes. En abril había sido tratado por una infección pulmonar relacionada con la enfermedad que le habían diagnosticado recientemente: leucemia mielomonocítica crónica.
Tras haber logrado evadir decenas de acusaciones y juicios en su contra y pese a un sinfín de leyes aprobadas por sus Gobiernos para evitar los múltiples juicios en los que se encontraba imputado, en 2013 fue condenado por primera vez por fraude fiscal. Cumplió su pena en forma de servicio a la comunidad.
Discutido, amado y odiado, siempre buscó la fama y se jactaba de alcanzar lo que se proponía, aunque fuese pagando.
“Il Cavaliere” fue un personaje central de la vida política italiana. Ocupó el cargo de primer ministro entre 1994-1995, 2001-2006, 2008-2011 y de eurodiputado entre 1999-2001. También fue senador. Construyó su carrera política gracias a su éxito como empresario y presidente del Milán AC entre 1986 y 2017, donde conquistó 5 Copas de Europa, 3 Mundiales de Clubes, 5 Supercopas de Europa, 8 títulos de la Serie A, 1 Copa de Italia y 7 Supercopas de Italia.